La embajada de la República Islámica de Irán en Managua abrió sus puertas para recibir la solidaridad de cientos de nicaragüenses quienes expresaron sus condolencias ante el asesinato del comandante de la Fuerza de Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) Qasem Soleimani, a manos de EE.UU.

 

En este homenaje participaron autoridades del gobierno. La delegación la encabezó el canciller de Nicaragua, Denis Moncada.

 

El Gobierno de Daniel Ortega calificó el asesinato del teniente general iraní Qasem Soleimani como un terrorismo internacional, acto que según el Estado nicaragüense no aporta a la paz.

 

Edén Pastora, excomandante sandinista y funcionario de gobierno, considera que esa acción refleja el interés de Estados Unidos de iniciar una guerra.

 

El Gobierno de Nicaragua a través de una nota oficial pidió “acciones serias y creíbles” contra los responsables del asesinato del general Soleimani. El presidente de los Estados Unidos aceptó haber ordenado el ataque.

 

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