Teherán repudia declaraciones antiraníes del jefe de la Liga Árabe
Irán le recuerda a Ahmed Aboul Gheit, que como secretario general de la Liga Árabe (LA), no debe ser el “promotor” de las políticas de ciertos países regionales.
“Le aconsejamos a usted que, influenciado por ciertos países de la región, evite proferir cualquier observación discrepante. Recuerde que usted es el secretario general de la Liga Árabe, no el promotor de las políticas de ciertos países”, ha indicado este domingo el portavoz de la Cancillería iraní, Bahram Qasemi.
En unas declaraciones antiraníes durante los Diálogos del Mediterráneo, celebrados la semana pasada en Roma (capital italiana), Aboul Gheit afirmó que Teherán tiene que “pensar profundamente para reconsiderar su actitud hacia los países árabes”.
El diplomático persa ha señalado que hay Estados en el oeste de Asia que optan por conductas que perjudican a los países árabes y musulmanes en “esta región tan sensible del mundo”, conocida como Oriente Medio.
Teherán, según ha resaltado Qasemi, considera que el responsable egipcio de la LA debería haberse dirigido de esa forma a los países que tienen un multimillonario presupuesto militar, financiado por “la riqueza nacional”, y que “compran su seguridad” al Occidente.
Pero, en realidad, lo que consiguen por fin es “un par de insultos” y “una creciente preocupación” por su propio futuro, ha lamentado el funcionario del Ministerio iraní de Asuntos Exteriores.
Qasemi ha hecho constar que Teherán mantiene una relación “lógica” y “equilibrada” con la mayoría de las naciones de la región, la cual se basa en la “cooperación”, el “diálogo”, el “respeto mutuo” y los principios de “buena vecindad”. Además, la República Islámica se ha mantenido junto a los países regionales, “si así se lo han solicitado”, ha destacado.
Irán, conforme ha matizado el diplomático, también está comprometido con la política de no intervenir en los asuntos internos de otros países, como tampoco lo permite cuando se trata de los asuntos a nivel nacional.
Arabia Saudí, el régimen de Israel, EE.UU. y sus aliados intentan formular una teoría de la conspiración contra la República Islámica de Irán para impedir lo que han dado en llamar la “influencia” iraní en la región.
El presidente estadounidense, Donald Trump, incluso acusó el pasado octubre a Irán de tener planes para ocupar Oriente Medio en tan solo “12 minutos”.