Portavoz de la Cancilllería iraní: Censurar NO es diplomacia

En un mensaje publicado el domingo en su cuenta de Twitter, Jatibzade recordó a la nueva Administración de Estados Unidos, encabezada por Joe Biden, de que la política de “máximo fracaso” del anterior inquilino de la Casa Blanca Donald Trump fue lo que impidió una reunión Washington-Teherán.

 

 

El vocero persa también puso de relieve que mientras sigan vigentes las sanciones antiraníes de EE.UU., Teherán “aplicará lo mismo” y no alterará su posición ante Washington. “Censurar NO es diplomacia. No funciona con Irán”, enfatizó Jatibzade.

 

En su tuit, Jatibzade menciona que, considerando las posiciones y acciones recientes de Estados Unidos y de los tres países europeos firmantes del acuerdo nuclear –Alemania, Francia y el Reino Unido–, la República Islámica de Irán considera que no es el mejor momento para celebrar una reunión informal propuesta por el jefe de la Diplomacia de la Unión Europea (UE), Josep Borrell.

 

En declaraciones en la misma jornada, el diplomático destacó que Irán responderá a la acción con acción y regresará a sus compromisos en el acuerdo nuclear, firmado en 2015 con el nombre oficial de Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), a medida que se eliminen las sanciones, así como también responderá del mismo modo a todas las medidas y comportamientos hostiles en su contra.

 

Ante la salida unilateral, en mayo de 2018, de EE.UU. del acuerdo nuclear, la reimposición de las sanciones antiraníes y la inacción de los firmantes europeos del convenio para garantizar los intereses de Irán, Teherán empezó a reducir gradualmente sus compromisos establecidos en el tratado.

 

El nuevo Gobierno estadounidense se ha expresado listo para volver al pacto, pero con la condición de que Irán cumpla plenamente sus compromisos.

 

Por su parte, Teherán ha dejado claro en reiteradas ocasiones que no aceptará ninguna condición sobre lo pactado en 2015. Si bien, ha afirmado que revertirá los pasos que redujeron sus compromisos nucleares solo cuando los demás signatarios, en especial EE.UU., cumplan sus obligaciones y antes que nada se eliminen todas las sanciones antiraníes.