¿Qué edad tiene Irán?
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Descubren una taza de arcilla en la Ciudad Quemada de Irán, conocida como la animación más antigua del mundo
Pars Today – Irán siempre ha sido el centro de la civilización y la cultura en el mundo.
Cuando hablamos de Irán, nos viene a la mente un nombre más allá de un país; una tierra cuyas raíces se remontan a miles de años, a la formación de las primeras civilizaciones humanas. Desde hace unos 10 000 años, cuando surgieron sociedades agrícolas en colinas como Ganj Dareh y Zagheh, hasta el surgimiento de civilizaciones avanzadas como Shahr Sokhta, Jiroft, Elam y el magnífico imperio aqueménida, Irán siempre ha sido un escenario de innovación, cultura y poder. Esta tierra no sólo fue testigo del surgimiento de los primeros sistemas de gobierno y escritura, sino que también ocupa un lugar único en la historia mundial al mantener su identidad cultural a pesar de los acontecimientos históricos.
En este artículo de Pars Today, emprenderemos un viaje profundo a la historia de Irán, analizando evidencia arqueológica y fuentes históricas, para ver cómo esta tierra ha preservado su identidad, desde los suelos antiguos hasta los rascacielos actuales.
Inicios prehistóricos (8000 a. C.)
Restos arqueológicos del Neolítico (alrededor del 8000 a. C.) muestran que Irán fue una de las primeras cunas de la agricultura. Sitios como la colina Ganjdareh en Kermanshah y la colina Zagheh en la llanura Qazvin ofrecen evidencia de agricultura temprana y domesticación animal que data de hace unos 10 000 años. Estos asentamientos son el punto de partida de la cronología cultural de Irán.

La Ciudad Quemada (3200 a. C.)
Ubicada en Sistán y Baluchistán, al este de Irán, la ciudad quemada fue fundada hace 5000 años (alrededor del 3200 a. C.) y floreció hasta el 1800 a. C. Esta ciudad avanzada, con sus sistemas de alcantarillado, talleres industriales e incluso evidencia de cirugía cerebral (el ejemplo más antiguo conocido), demuestra sofisticación social y tecnológica. Artefactos descubiertos como el ‘ojo artificial’ (la prótesis más antigua del mundo, del año 2800 a. C.) y juegos de mesa son evidencia de la rica cultura de esta civilización.

Civilización elamita (alrededor de 2700 a. C.)
Los elamitas, uno de los primeros estados organizados en Irán, surgieron alrededor del 2700 a. C. en lo que hoy es Juzestán. El zigurat de Chogha Zanbil, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es un testimonio de su habilidad arquitectónica y fue construido alrededor de 1250 a. C. La capital de Elam, Susa, tiene capas de habitación que datan del 4200 a. C., con artefactos como tablillas preelamitas que indican sistemas de escritura tempranos.

Civilización de Jiroft (alrededor del 2500 a. C.)
La civilización Jiroft, en la actual Kermán, floreció alrededor del 2500-2200 a. C. y es conocida como uno de los centros comerciales y culturales de la región. Las excavaciones arqueológicas en Kenardar y las colinas de Yahya han revelado artefactos únicos, como tablillas de piedra con escrituras desconocidas y vasijas de clorita grabadas, lo que indica amplias conexiones con Mesopotamia y la India. Esta civilización, que algunos llaman el «eslabón perdido» entre las civilizaciones oriental y occidental, contribuyó a la riqueza cultural del antiguo Irán.

Imperio aqueménida (550–330 a. C.)
El Imperio aqueménida, fundado por Ciro el Grande, unificó a Irán como entidad política alrededor del año 550 a. C. En este contexto, Persépolis, la capital ceremonial construida alrededor del año 518 a. C., es un símbolo de este período con sus bajorrelieves y magníficos palacios. El complejo de Pasargada, incluida la tumba de Ciro (530 a. C.), demuestra la grandeza de este imperio y la oficialización del nombre ‘Irán’ (del antiguo persa Aryanām, que significa ‘tierra de los arios’).

Períodos posteriores
Imperios posteriores, como el de los partos (247 a. C.-224 d. C.) y el de los sasánidas (224-651 d. C.), continuaron con este legado. Lugares como Bishapur (sasánida, siglo III d. C.), con sus bajorrelieves, y Ctesifonte (la capital parto-sasánida) demuestran la duradera influencia cultural y política de Irán. El periodo islámico trajo consigo nuevas capas, como el Santuario del Imam Reza (a partir del siglo IX d. C.), aunque éstas son más recientes.
