Turquía descarta la posibilidad de poder resolver problemas con EE.UU., por la mentalidad de Trump, y lamenta que Washington no pueda distinguir a sus “amigos”.

Turquía descarta la posibilidad de poder resolver problemas con EE.UU., por la mentalidad de Trump, y lamenta que Washington no pueda distinguir a sus “amigos”.

“EE.UU. no sabe ni puede ver quién es su verdadero amigo. Podríamos resolver fácilmente los problemas con EE.UU., pero no mientras siga con su mentalidad actual”, ha criticado hoy viernes el ministro turco de Asuntos Exteriores, Mevlut Cavusoglu, al término de la conferencia de embajadores turcos en Ankara (la capital).

Los señalamientos del jefe de la Diplomacia turca vienen horas después de que el presidente de EE.UU., Donald Trump, haya advertido a Turquía de que “no va a esperar sentado” a que los tribunales turcos pongan en libertad al pastor norteamericano detenido, Andrew Brunson, amenazando así con intensificar la guerra económica que ha provocado este caso.

“Turquía, en mi opinión, ha actuado muy, muy mal, y aún no hemos visto lo último, pero no vamos a esperar sentados. No pueden coger a nuestra gente. Veremos qué pasa (…) Turquía es un problema desde hace tiempo. No han actuado como un amigo”, resaltó Trump, en alusión al rechazo de las autoridades judiciales turcas a la tercera apelación de la defensa de Brunson.

“No estamos haciendo una película de vaqueros. Somos dos grandes países que necesitan tener buenas relaciones, pero tenemos que aprender a respetarnos”, ha matizado, según recoge el diario local Yeni Safak.

Las relaciones entre Ankara y Washington han ido empeorando desde el 1 de agosto, cuando EE.UU. dictó sanciones contra varios ministros turcos por el caso del pastor evangélico Brunson, arrestado en Turquía por cargos de terrorismo y espionaje.

La semana pasada, Trump intensificó su ataque a Ankara al duplicar los aranceles sobre las importaciones turcas de aluminio y acero, en momentos en que la moneda turca, la lira, se desplomaba.

Por su parte, Turquía ha respondido de manera simétrica a estas medidas, aumentado los aranceles sobre varias importaciones norteamericanas, además de “boicotear” los productos electrónicos de EE.UU.