Hasta 50.000 personas, según las previsiones de la Delegación de Gobierno de Madrid, llegan este sábado a la capital para recorrer el Paseo del Prado en una marcha promovida por el independentismo catalán bajo el lema: “La autodeterminación no es delito.

Democracia es decidir”. Más de 500 agentes, entre antidisturbios y unidades especializadas, se encargarán de velar por la seguridad de una protesta amenazada por las acciones de movimientos de extrema derecha, informó el diario español El País.

La policía espera la llegada de “unas 35.000 personas” procedentes de Cataluña y unas 2.000 más desde Galicia y País Vasco, además de simpatizantes de extrema izquierda. Calculan que vendrán en 450 autobuses, aparte de los participantes que lo hagan en AVE —supuestamente se han fletado 10— y en vehículos particulares. Los organizadores apuntan que son 500 autocares y elevan a 15 los trenes. 350 agentes de los antidisturbios (unidades de intervención policial) y cerca de 70 de las unidades de prevención y reacción compondrán el principal dispositivo de seguridad de la protesta, aparte de medio centenar de agentes de los servicios de Información, de la Brigada Móvil del Metro, Subsuelo y de otras unidades de seguridad, además de un helicóptero, según fuentes policiales.

La marcha, que se produce como consecuencia de la celebración del juicio del procés, ha sido convocada, entre otras, por las asociaciones Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òminium Cultural. Ambas organizaciones son las principales referencias del activismo independentista catalán, cuyos líderes —respectivamente, Jordi Sànchez, expresidente de la ANC y ahora diputado de Junts per Catalunya, y Jordi Cuixart— están en prisión preventiva desde el 16 de octubre de 2017, junto a otros 10 principales acusados por la celebración del referéndum de autodeterminación ilegal del 1 de octubre de ese año. La Fiscalía pide para Sànchez y Cuixart 17 años de cárcel por considerarles autores intelectuales de la rebelión, junto a Oriol Junqueras y Carme Forcadell. Todos ellos han declarado ya ante el Tribunal Supremo.