Podemos y el PSOE refuerzan la campaña de boicot a Israel
La coalición del Gobierno de España, conformada por Podemos y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), refuerza la campaña de boicot a Israel.
Los medios palestinos informaron el sábado que los partidos de izquierda del país europeo han puesto en marcha una amplia campaña antisraelí, que se hace eco de la consigna internacional conocida como Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS) contra Israel, que se estableció en 2005 con el objetivo de retirar inversiones y sancionar los productos israelíes.
La iniciativa española exige el reconocimiento del Estado de Palestina, entre otras medidas, según una lista revelada en el sitio web oficial de la campaña.
Las regiones españolas que se incluyen en esta campaña son: Andalucía, Aragón, Asturias, Islas Canarias, Cantabria, Castilla La Mancha, Castilla y León, Cataluña, País Vasco, Navarra, Extremadura, Galicia, Islas Baleares, Madrid y Valencia.
Un total de 58 ayuntamientos españoles se han sumado a la campaña de boicot a Israel, tal y como reportaron el 14 de febrero los medios locales. Ahora, más instituciones y asociaciones políticas se han adherido, pese al sabotaje de los lobbies proisraelíes.
Al respecto, la asociación española pro-Israel, Acción y Comunicación sobre Oriente Medio (ACOM), tras haber denunciado la participación de las instituciones públicas de España en el boicot contra Israel, comentó el lunes que esta postura es “una política habitual del partido del vicepresidente segundo del Gobierno de España”, en referencia al líder de Podemos, Pablo Iglesias.
Los partidos izquierdistas de España, en virtud de los pactos Espacios Libres de Apartheid Israelí (ELAI) que viene desde 2015, han acordado no realizar contratos con empresas israelíes y no comprar ningún producto relacionado con el régimen de Tel Aviv.
Iglesias calificó de “criminal” e “ilegal” al régimen israelí en una entrevista emitida en junio de 2018 por la cadena de televisión pública RTVE.
La campaña de boicot se desarrolla en España en una situación en que el Gobierno de EE.UU., urdiendo el plan anti-Palestina, conocido como el ‘acuerdo del siglo’, ignora todos los derechos principales de los palestinos, al disponer que la ciudad palestina de Al-Quds se convierta en la capital israelí, además de reconocer la soberanía de Israel sobre el valle del Jordán y los asentamientos ilegales en Cisjordania, y exigir un Estado palestino desmilitarizado.
En este sentido, el máximo responsable diplomático de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, en un comunicado emitido el sábado expresó preocupación ante los planes de Israel para construir nuevas viviendas ilegales en el este de la cuidad ocupada de Al-Quds.
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