Ejército yemení sigue cazando a mercenarios en el suelo saudí
El Ejército yemení infligió grandes pérdidas entre las fuerzas agresoras saudíes y sus mercenarios en la región sureña de Arabia Saudí.
Las fuerzas yemeníes, apoyadas por el movimiento popular Ansarolá, atacaron las posiciones de los saudíes y sus aliados instaladas en varias partes de las provincias saudíes de Najran, Jizan y Asir, con artillería y varios misiles balísticos tipo Badr-P1, según explicó el martes un militar yemení a la agencia local de noticias Saba.
Decenas de las fuerzas agresoras, de acuerdo con el informante, murieron y resultaron heridas en la operación, en que también fue destruido un vehículo militar y se confiscó una gran cantidad de armas y municiones.
El militar yemení, que fue citado en anonimato por la fuente, añadió que la fuerte artillería, asimismo, impidió la infiltración de los mercenarios en el territorio yemení, que se iba a realizar con el apoyo de la aviación de las fuerzas aliadas de Riad.
Decenas de mercenarios fueron aniquilados o resultaron heridos en una emboscada realizada mientras ellos estaban intentando, en vano, entrar” a Yemen, indicó un militar yemení.
¿Cómo se inició la guerra?
En marzo de 2015, Riad y sus aliados comenzaron una campaña de ataques aéreos contra Yemen con el propósito de restaurar en el poder al expresidente fugitivo yemení, Abdu Rabu Mansur Hadi, un estrecho aliado de Riad que apoya la intervención militar en su país.
Un informe publicado el pasado 11 de diciembre por el proyecto Datos sobre Localización y Acontecimientos de Conflictos Armados (Acled, por su acrónimo del inglés) precisa que la agresión iniciada en marzo de 2015 por Arabia Saudí y sus aliados contra Yemen ha dejado más de 60 000 civiles muertos.
Las fuerzas yemeníes atacan al suelo saudí para vengarse de los ataques de Riad
Además de cientos de muertos, de mayoría civil, la agresión saudí a Yemen ha ocasionado también “la mayor crisis humanitaria del mundo”, donde hay unos 22 millones de personas que necesitan ayuda para sobrevivir y varios otros millones que padecen hambruna, de acuerdo con el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
La precaria situación obligó a las fuerzas yemeníes a tomar acciones y responder la guerra librada en su contra que cuenta con el apoyo multilateral de EE.UU. y sus aliados regionales y occidentales.
El Ejército yemení ha advertido de que las unidades de Ansarolá tienen señalados otros 300 objetivos saudíes que pueden ser atacados con armas apropiadas, si el liderazgo lo decide. Yemen asegura que cuenta con sistemas de misiles balísticos capaces de golpear sus objetivos con precisión sin verse desafiados por los sistemas de defensa del enemigo.