Nueva pesadilla saudí: Misil yemení que alcanzó el Golfo Pérsico
La capacidad misilística de las fuerzas yemeníes se ha convertido en una pesadilla para Riad, ya que sus costas en el Golfo Pérsico no están a salvo de su impacto.
El Ejército yemení, respaldado por el movimiento popular Ansarolá, atacó ayer jueves con un misil balístico de largo alcance un centro militar en la ciudad saudí de Al-Damam (este), sita en la costa del Golfo Pérsico.
Esta operación considerada de exitosa por algunos expertos militares, constituye, según ellos, un gran logro para las fuerzas yemeníes, ya que el citado misil, además de burlar los avanzados sistemas de defensa aérea Patriot, ha logrado alcanzar por primera vez las costas orientales de Arabia Saudí tras volar más de 1200 kilómetros.
Horas después del ataque, el portavoz del Ejército yemení, el general de brigada Yahya Sari, pidió a las empresas extranjeras que abandonen de inmediato las ciudades saudíes ribereñas del Golfo Pérsico, advirtiendo además de más ataques contra este país si Riad no pone fin a sus violentas agresiones contra Yemen.
“Las fuerzas armadas renuevan su llamado a todas a los ciudadanos y las compañías extranjeros para que se alejen completamente de los objetivos militares y estratégicos, ya que pueden verse afectados por nuestros ataques en cualquier momento”, asevera el militar yemení en una nota difundida por el canal oficial de noticias Al Masirah.
Por su parte, el ministro yemení de Información, Daifulá al-Shami, destacó que esta operación revela el fracaso de los sistemas estadounidenses Patriot para interceptar los misiles balísticos yemeníes.
Al-Damam se encuentra en la parte más oriental de Arabia Saudí, a las orillas de las aguas del Golfo Pérsico, y se considera como uno de los principales centros para las empresas económicas. La sede de la empresa de Aramco, encargada de exportar el petróleo saudí, está situada en esta ciudad.
La reciente operación se produce en momentos en los que los combatientes yemeníes han intensificado sus ataques con misiles y los aviones no tripulados (drones) contra centros militares y aeropuertos saudíes. Estos han advertido que se producirán “grandes sorpresas” en el futuro si la dinastía que reina en Arabia Saudí y sus aliados no ponen fin a los bombardeos ni los bloqueos aéreo y naval a Yemen.
Esto sucede mientras, la agresión saudí contra Yemen, iniciada en marzo 2015, ha causado más de 91 000 muertes en el país más pobre del mundo. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) calcula que, si la guerra no se detiene, la cifra de víctimas mortales llegará a 500 000 para finales del año 2020.
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