Israel está pescando en aguas turbulentas, ¡Líbano debería tener cuidado!
Pars Today - En estos días, el régimen sionista está intentando, bajo diversos pretextos, desestabilizar la situación del Líbano para servir sus propios objetivos.
La agresión israelí contra el territorio libanés, la interferencia del régimen sionista en los asuntos internos libaneses, así como terrorismo y asesinatos son algunas de las palabras clave que escuchamos recurrentemente estos días en los medios de comunicación para describir el papel de Israel como causante de la crisis en el Líbano.
Según Pars Today, el Líbano fue blanco de ataques masivos por parte del régimen sionista ocho veces: en 1948, 1967, 1973, 1978, 1982, 1993, 1996 y 2006. Durante esos años, cientos de miles de personas murieron o resultaron heridas, más de un millón de personas fueron desplazadas y las pérdidas económicas infligidas a los libaneses se estimaron en varios miles de millones de dólares.
En su más reciente agresión, el régimen sionista atacó al Líbano el 23 de septiembre de 2024, y además de violar la soberanía del país, también provocó el martirio de miles de personas inocentes.
Aunque, después de varios meses de conflicto, se estableció finamente un alto el fuego de 60 días entre el régimen israelí y el Líbano que se implementó a partir del 27 de noviembre con mediación internacional, este acuerdo no ha logrado evitar las agresiones y los actos de guerra de Israel. El régimen sionista ha violado repetidamente el alto el fuego.
Desde el 31 de octubre de 2022, cuando terminó el mandato del entonces presidente Michel Aoun, no se ha logrado elegir un sucesor, por lo que el Líbano sufre un vacío presidencial. A pesar de las múltiples sesiones parlamentarias, los diputados no han logrado ponerse de acuerdo sobre un candidato para el cargo de presidente. Este impasse está directamente relacionado con los obstáculos interpuestos por Estados Unidos e Israel en el proceso de formación del gobierno libanés, por temor a un fortalecimiento de la Resistencia y una estabilización del sistema político del país.
Aunque el presidente libanés, Joseph Aoun, dijo recientemente a Morgan Ortagus, enviado adjunto de Estados Unidos para Oriente Medio, que la estabilidad permanente en el sur del Líbano está vinculada a la retirada del régimen israelí, el comportamiento pasivo de Beirut ante la agresión israelí y la interferencia en los asuntos internos del país ha envalentonado a los funcionarios israelíes a continuar sus esfuerzos para perpetuar el malestar en el Líbano.
En cualquier caso, el régimen sionista no quiere que la seguridad prevalezca en el Líbano, ni en la guerra ni en un alto el fuego; en otras palabras, se puede decir que un Líbano inseguro es lo que Israel quiere mantener para avanzar en sus objetivos.
Sin embargo, la falta de una toma de decisiones precisa y apropiada a las condiciones actuales del Líbano por parte de sus nuevas autoridades y, por otro lado, el papel de Israel como causante de crisis en este país árabe, ilustran perfectamente el proverbio según el cual Israel “pesca en río revuelto”.
La historia de este proverbio indica que un hombre estaba pescando en un río. Había colocado su red de pescar en medio del agua y al mismo tiempo había colocado un sedal en el agua con un trozo de piedra atado a él. Sacudía la cuerda y enturbiaba el agua. Un transeúnte lo ve en ese estado y le dice al pescador: ¿Qué estás haciendo? ¡Esta es agua potable y al hacerlo la están contaminando y volviéndola inutilizable para nosotros! Pero el pescador responde: “Si haces esto y sacudes esta cuerda, el agua se volverá turbia y los peces se perderán y quedarán atrapados en mi trampa”.
Este proverbio significa aprovechar las condiciones caóticas y desordenadas y confirma que Israel explota los problemas o las crisis del Líbano para lograr sus objetivos. Por lo tanto, las autoridades, el pueblo y las élites de este país deben ser constantemente conscientes de esta amenaza devastadora y continua.