Comentario sobre mensaje de Líder persa, Ayatolá Seyed Ali Jamenei
Creo que todas las personas en todo el mundo, independientemente de las creencias religiosas que profesan, deben prestar mucha atención al mensaje del líder supremo de Irán a los peregrinos, el ayatolá seyed Ali Jamenei, que ha dirigido a los peregrinos musulmanes de todo el mundo, que se paraban para la ceremonia de Hach.
En primer lugar, debido a que el líder iraní denunció con fuerza las dos tragedias que ocurrieron en 2015 en Mina y Mezquita de Al-Haram, y por otro lado, cuando impidieron a los peregrinos iraníes de expresar su fe y rezar en los lugares sagrados (de la Meca y Medina), por razones que no podían ser determinadas, y esto debido a que el gobierno de Arabia Saudí rechazó la formación de una comisión internacional musulmana de investigación para aclarar la verdad sobre las circunstancias que causaron la muerte de miles de peregrinos. Entre ellos, unos 500 peregrinos iraníes.
Hay una fuerte sospecha sobre las razones técnicas que supuestamente han causado la caída de una estructura de la grúa bajo la responsabilidad de las autoridades de Arabia Saudí, con fuertes indicios de que esta caída puede haber sido provocada deliberadamente. Las sospechas que se plantea acerca del comportamiento inhumano de las autoridades saudíes es su retraso a la hora de rescatar a los heridos. Además de la demora, la acción cruel de saudíes de guardar a los heridos y los muertos en los mismos lugares, según los testigos, que causó la muerte de un número de heridos.
Lo que llama la atención es la conducta irresponsable de las autoridades de Arabia Saudí, que están culpables por el aumento del número de muertos y el sufrimiento de los heridos, de seguir cínicamente por el discurso de la no politización de ceremonias, como si este gobierno hoy no fuera el mayor responsable del uso indebido y manipulado de las creencias religiosas con fines políticos, para provocar guerras entre los musulmanes. Como si el bombardeo criminal de Yemen no fuera un acto político para provocar guerras. Como si armar a Takfiris en Siria, Irak, Libia y otros países no fuera una criminal politización de los preceptos religiosos con el fin de provocar guerras en el mundo islámico. '
Es obvio que estas acciones del gobierno de Arabia Saudí benefician a aquellos que quieren dividir a los musulmanes, a saber, los Estados Unidos y sus aliados como Israel, que recurren al uso ilegal e impropia de las acciones militares contra el mundo musulmán, como la causa palestina que merce la solidaridad de Irán, Irak, Libia y Siria, frente a todos los objetivos de las acciones agresivas del imperialismo y sus aliados.
Cabe alertar también acerca del hecho de que por lo general había una distorsionada y manipulada cobertura de noticias sobre los episodios trágicos que han ocurrido en Mina y Mezquita de Al-Haram, en el año pasado, siempre ocultan a los regímenes y los políticos que tratan de dividir y debilitar a los pueblos de la región, que están agredidos y atacados sistemáticamente debido a la presencia militar de Estados Unidos en la región. Está claro que el flujo de información en todo el mundo está controlado en gran parte por los servicios de conglomerados de Estados Unidos y sus aliados de la OTAN, así como los agresores militares contra Irán, Irak, Libia y ahora Siria. Esta operación periodística de ocultamiento pretende hacer creer que ciertas tragedias son accidentales, finalmente, intimidar y hacer frente a las personas en su legítimo derecho a celebrar su creencia. El control de peregrinos iraníes por el servicio de las agencias de espionaje del imperialismo, como denuncia el líder supremo, tiene como objetivo suprimir el legítimo derecho del pueblo de Irán para construir y ejercer los objetivos de la revolución iraní de 1979, incluido el respeto por la autodeterminación, la independencia, la solidaridad internacional con los pueblos oprimidos y la coexistencia pacífica entre las naciones.
Beto Almeida, periodista