¿Cómo se convirtió el incidente de Tabas en Irán en un símbolo del poder divino y la derrota de la hegemonía estadounidense? + Fotos
Pars Today - En la turbulenta historia de la Revolución Islámica de Irán, el incidente de Tabas ocupa un lugar especial porque no solo es una operación militar fallida, sino también una señal objetiva del colapso de la arrogancia y la hegemonía de una superpotencia que se consideraba invencible.
En el corazón del desierto de Tabas, la tormenta de arena no solo interrumpió los avanzados planes militares de Estados Unidos, sino que también fue un símbolo de la resistencia y la voluntad de la nación iraní y un punto de inflexión en la historia de la Revolución Islámica y el colapso de la hegemonía de la arrogancia. Según Pars Today, el 25 de abril de 1980 (5 de ordibehesh de 1359 del calendario persa), Estados Unidos lanzó un ataque militar contra territorio iraní con varios helicópteros y aviones. El gobierno estadounidense, que no había obtenido resultados con sus diversas maniobras en el contexto de la derrota de la República Islámica de Irán, lanzó una compleja operación de alto secreto para liberar a sus espías, capturados durante la toma del nido de espías estadounidense el 4 de noviembre de 1979.
Con la Operación ‘Garra de Águila’, Estados Unidos pretendía asesinar a figuras importantes en la República Islámica de Irán, además de bombardear centros vitales en Irán, y luego establecer un gobierno al estilo estadounidense en Irán.
El fracaso de la operación en pleno desierto
El 25 de mayo de 1979, fuerzas estadounidenses entraron en el espacio aéreo iraní. A primera vista, todo marchaba según lo previsto, pero en Tabas, la naturaleza los recibió y se desató una terrible tormenta de arena que causó graves interrupciones en el equipo, la visibilidad y las comunicaciones.
De los ocho helicópteros enviados, uno regresó a mitad de camino, el segundo sufrió una falla técnica y el tercero se estrelló durante una tormenta. Con cinco helicópteros restantes (menos de los necesarios), la operación se canceló. Sin embargo, al abandonar la zona, un helicóptero colisionó con un avión C-130 y se produjo una gran explosión que mató a ocho soldados estadounidenses y destruyó equipo. Como resultado, las fuerzas restantes se retiraron presas del pánico.
Imam Jomeini (que en paz descanse: Las arenas eran agentes de Dios
Cuando la noticia del fracaso de la operación estadounidense llegó a Irán, la gente de todo el país salió a las calles, y el ImamJomeini, el gran fundador de la República Islámica, hizo una declaración histórica: “Consideramos que las arenas son agentes de Dios. Estados Unidos no puede hacer nada malo”. Esta frase se convirtió en un símbolo de la autoconfianza nacional, y el pueblo comprendió que, confiando en Dios y en la unidad, podrían resistir cualquier poder.
Con el paso de los años, se publicaron documentos clasificados del Pentágono y la CIA, según los cuales Estados Unidos tenía contacto con espías iraníes y se preveía el suministro de vehículos y escondites en Teherán para apoyar la operación. Pero ninguno de estos cálculos precisos pudo resistir el factor “imprevisto” natural y divino: la tormenta de arena.
Reflexión global: ¿Qué escribieron los medios de comunicación?
En aquel momento, periódicos y televisiones de todo el mundo analizaron el incidente con titulares como: “Humillación de una superpotencia en el desierto”, “Un desastre para Carter en Tabas”, “Estados Unidos se rindió a las arenas de Irán”.
El fracaso de la operación Tabas, especialmente en vísperas de las elecciones presidenciales estadounidenses, asestó un duro golpe a la imagen del entonces presidente Jimmy Carter y fue uno de los factores que contribuyó a su derrota electoral y a la victoria de Ronald Reagan.
El incidente de Tabas no solo supuso una derrota militar para Estados Unidos, sino que, en la literatura política iraní, se convirtió en un símbolo del “fin de la era de la dominación estadounidense”; donde ni los misiles, ni los helicópteros, ni los planes de espionaje, ni el equipo avanzado pudieron contra la determinación de una nación y, en última instancia, en palabras de los propios estadounidenses, terminó en un completo desastre.
