“Hashemi fue detenida por islamofobia e iranofobia de EEUU”
Una excolega de Marzie Hashemi nexa la detención de la presentadora iraní con el fenómeno de la islamofobia y sentimientos antiraní y antiperiodistas en EE.UU.
“Hay algo muy oscuro en Estados Unidos en este momento. Esto es la islamofobia. Esto es un sentimiento antiraní. Esto es un sentimiento antimedios y antiperiodistas”, resaltó el sábado a la cadena rusa RT, Narges Mobaleqi, excolega de la periodista de la cadena en inglés Press TV Hashemi, quien está detenida desde el pasado 13 de enero en EE.UU., sin cargos, solo como “testigo material”.
Con “sentimiento anti-periodistas”, Mobaleqi hizo alusión a los “ataques constantes” del presidente estadounidense, Donald Trump, contra los medios de comunicación, a los que considera “enemigos del pueblo”, “deshonestos” y de “noticias falsas”.
Del mismo modo, transmitió la preocupación de la familia de su excolega por la violación de los derechos religiosos y el estado de salud de Hashemi. La periodista ha sido blanco de un trato vejatorio, entre otros, fue despojada de su hiyab (velo islámico) por la fuerza y en contra de su voluntad, y se les negó el acceso a alimentos halal (que siguen lo que prescribe el islam), como ella expresamente había solicitado.
Aunque el caso Hashemi ha acaparado los titulares de los medios internacionales, nada se sabe sobre el fundamento de su detención. “El panorama en este momento es bastante confuso. Hay muchas preguntas y muy pocas respuestas”, dijo Mobaleqi.
La magistrada Beryl Howell, principal jueza de la corte federal del Distrito de Columbia, —que emitió la orden del arresto de Hashemi a petición del Departamento de Justicia estadounidense— confirmó el viernes que la documentalista “no ha sido acusada de ningún delito”.
Varios medios han planteado la posibilidad de que el arresto de Hashemi obedezca a razones políticas. Al respecto, Mobaleqi advirtió de que los documentales de su excolega sobre el movimiento Black Lives Matters (La vida de los negros importa) y sus críticas a las políticas del Gobierno de EE.UU. sean el motivo de su detención. De ser así, “esto lleva a muchas preguntas ¿Esto tiene motivaciones políticas?” cuestionó.