Hillary Clinton apoya la campaña presidencial de Biden contra Trump
La exsecretaria de Estado de EE.UU. Hillary Clinton decide apoyar a Joe Biden en su campaña contra el actual presidente Donald Trump para llegar a la Presidencia.
“Quiero sumar mi voz a las muchas que te han apoyado para ser nuestro presidente”, ha dicho Clinton en una reunión virtual con Biden, quien suma apoyos a su candidatura a pesar de no ser todavía el candidato oficial del Partido Demócrata, ya que debe ser escogido en la Convención Nacional pospuesta para agosto por el coronavirus.
La ex primera dama subrayó que en la actual coyuntura “necesitamos un líder como Joe Biden”, en referencia a la situación de EE.UU., donde la pandemia (este martes se han confirmado más de un millón de casos confirmados de contagiados por COVID-19) ha paralizado la sociedad, la economía y disparado el desempleo.
Clinton ha alabado la trayectoria de Biden e insistido en lo diferente que sería pasar por una crisis como actual pandemia con un presidente que “escucha” los hechos científicos. “Me gustaría que fueras presidente ahora mismo”, ha dicho la exjefa de la Diplomacia estadounidense.
El apoyo de Clinton también significa que Biden podrá contar con la asesoría invaluable de la única candidata que ha hecho campaña contra Trump en la recta final y lo enfrentó mano a mano en tres debates.
Este será el último apoyo político escalonado que recibe Biden, de 77 años, tras quedar como virtual candidato demócrata a principios de este mes, cuando el senador Bernie Sanders se retiró de la contienda.
Desde entonces Biden cuenta con el apoyo del expresidente Barack Obama, el aval de su rival en las primarias, Bernie Sanders, y el respaldo de la líder demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
Biden y Clinton trabajaron en la Administración de Obama, pero la relación entre ambos no siempre fue buena. Biden se resintió de la atención que se lo otorgó a Clinton en el 2008, cuando ambos se enfrentaron en la primaria presidencial. Pero luego Obama escogió a Biden como vicepresidente y a Clinton como secretaria de Estado.
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