Riad llama desesperadamente a extender embargo de armas a Irán
Arabia Saudí emite llamados desesperados para la extensión del embargo de armas de las Naciones Unidas a Irán, pese al fracaso de EE.UU. en este caso.
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) respondió con un rotundo “No” a una resolución presentada por EE.UU. para extender el embargo de armas contra Irán, que expirará el 18 de octubre en el marco del acuerdo nuclear suscrito en 2015 entre Teherán y el G5+1 —integrado entonces por EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania—.
A pesar de ello, la monarquía saudí, liderada por el rey Salman bin Abdulaziz Al Saud, exigió el martes la extensión del embargo de armas a Irán, alegando que la eliminación de las sanciones conducirá a “más destrucción” y agravará los conflictos en la región de Asia Occidental.
El régimen de los Al Saud también prometió el apoyo del reino árabe a todas las medidas internacionales que contribuyan a detener la influencia de la República Islámica en la región.
Antes de dicha sesión del CSNU, el embajador saudí ante las Naciones Unidas, Abdul Aziz al-Wasel, había pedido la extensión del embargo de armas a Teherán, afirmando que el país persa canaliza armas a ciertos grupos para perturbar la paz en la zona.
El borrador antiraní, que necesitaba el apoyo de al menos nueve votos para ser aprobado, solo recibió dos votos a favor por parte de EE.UU. y la República Dominicana, mientras que China y Rusia votaron en contra y los 11 miembros restantes, incluidos los aliados europeos de Washington, se abstuvieron.
El reino árabe realiza tales acusaciones antiraníes a pesar de que Riad es el que apoya y ayuda activamente a los grupos terroristas que causan estragos en la región. Eso mientras Irán lucha en todos los aspectos contra el flagelo del terrorismo.
Además, desde marzo de 2015, Arabia Saudí, con el apoyo de su aliado estadounidense, lleva a cabo una campaña brutal contra Yemen matando a miles de civiles inocentes con la intención de restaurar en el poder al fugitivo presidente yemení Abdu Rabu Mansur Hadi, objetivo no logrado gracias a la resistencia del Ejército yemení, apoyado por el movimiento popular Ansarolá.
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