Rusia condena intentos que buscan desunir a Bielorrusia
El canciller ruso denuncia el envío de extremistas desde Ucrania a suelo bielorruso y promete una respuesta dura a los intentos de alejar a Rusia de Bielorrusia.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, en referencia a la tensa situación socio-política de Bielorrusia, ha subrayado que Moscú va a “atajar categóricamente” los intentos para provocar disturbios e infracción de las leyes, así como tensar la situación y desunir a ese país de Europa Oriental.
“Vamos a responder de manera contundente a aquellos que tratan de tensar la situación en Bielorrusia, a aquellos que, con sus coqueteos torpes con Minsk, obvios para todos, buscan desde hace años desunir a Bielorrusia y Rusia”, ha señalado Lavrov en una rueda de prensa celebrada el miércoles en Moscú, capital rusa, tras una reunión con su par bielorruso, Vladímir Makéi.
El jefe de la Diplomacia rusa, destacando que sus afirmaciones se basan en “informaciones verificadas”, ha precisado que uno de los planes para desestabilizar Bielorrusia consiste en el envío de “200 extremistas entrenados en Ucrania” a este país europeo.
“En Ucrania hay campamentos de entrenamiento de tales extremistas (...) según nuestras estimaciones, son unos 200 extremistas entrenados en el territorio ucraniano que se encuentran ahora en Bielorrusia”, ha remarcado Lavrov.
El canciller ruso, asimismo, ha denunciado los intentos de ciertos países occidentales de torpedear los cimientos del Estado de la Unión que forman Rusia y Bielorrusia, y ha rechazado la injerencia extranjera en los asuntos internos bielorrusos para presionar al Gobierno electo en las urnas.
“Condenamos la presión que ahora intentan ejercer sobre las autoridades legítimas de Bielorrusia otros países, que al mismo tiempo apoyan abiertamente a la oposición descontenta con los resultados de las elecciones presidenciales”, ha afirmado el canciller ruso.
De igual modo, ha considerado “destructivas” las observaciones que hacen la Unión Europea (UE) y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) sobre la coyuntura socio-política en Bielorrusia.
Lavrov también ha arremetido contra la Organización para la Seguridad y la Cooperación de Europa (OSCE) por no haber cumplido con sus obligaciones de garantizar la observación internacional sobre las últimas elecciones bielorrusas, cuyos resultados generaron una polémica en el país.
La propia OSCE, de acuerdo con el ministro ruso, necesita reformas para emerger de la crisis interna en la que se encuentra esta institución europea.
De acuerdo con las autoridades rusas, la negativa de la OSCE a enviar observadores a los comicios en Bielorrusia demuestra que había decidido su postura con antelación.
Bielorrusia es, desde el pasado 9 de agosto, escenario de multitudinarias protestas contra el resultado de las elecciones presidenciales, en las cuales, Alexander Lukashenko, que lleva en el poder desde 1994, obtuvo el 80,1 % de los votos. La oposición pide la repetición de los comicios, el mandatario rechaza hacerlo.
N/FE/C