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Tal como los personajes y los escritores de obras literarias pueden animar a los interesados a visitar ciertos sitios, los programas populares de la televisión y las películas exitosas, también pueden crear destinos turísticos.

 

 

Los expertos llaman a este tipo de turismo como el turismo cinematográfico (film-inductivo o movie-induced).

 

 

Aunque las películas y los programas televisivos tienen el mismo efecto para atraer a visitantes, tienen audiencias distintas y es diferente la duración de su impacto.

 

 

El tipo de la relación que un asiduo televidente de una serie de larga duración establece con el lugar de su filmación es diferente de la relación que una persona establece con el mismo al ver escenas espectaculares filmadas en una zona concreta.

 

 

Sue Beeton, profesora de Turismo de una universidad canadiense, y Graham Busby, profesor de educación superior en turismo, han enumerado diversas formas de turismo cinematográfico, que incluyen: visitar los lugares de filmación de las películas o programas televisivos, o visitar las casas de las celebridades de cine y televisión y visitar las casas de las estrellas de cine. Los turistas de cine y televisión no son necesariamente un grupo con motivos similares.

 

 

Un grupo de personas puede sentirse atraído por ver un lugar, ver el lujo de la vida de una celebridad o su estilo de vida particular.

 

 

Otros pueden identificarse con un lugar a un nivel más afectivo y tener una sensación de nostalgia hacia el mismo. El deseo de beneficiarse con este tipo de turismo ha conllevado a la formación de asociaciones entre organizaciones de turismo y comisiones locales de cine para realizar las filmaciones en ciertos lugares y proyectar sus productos.

 

 

La Comisión de Cine de Londres y la Organización del Turismo han diseñado y publicado un conjunto de mapas de películas que muestran los lugares de filmación de algunas películas realizadas en Londres.

 

 

El turismo basado en los medios de comunicación, además de crear empleos e ingresos extras para una región, crea oportunidades también para la venta de souvenirs, bienes y servicios turísticos, de modo que puede mejorar también la imagen de un área.

 

Por ejemplo, se puede referir a la ciudad de Sheffield en el norte de Inglaterra, que se convirtió en un destino turístico al alcanzar la fama la película Full Monty.

 

 

El gobierno de Nueva Zelanda utilizó la trilogía cinematográfica de El Señor de los Anillos en sus campañas propagandísticas y, para aumentar los considerables beneficios derivados de ella, nombró a una persona como ministro del  Señor de los Anillos.

 

 

Las películas o los programas televisivos llevan a diferentes visitantes a un destino y a veces también cambian su comportamiento. La película de aventuras “Asaltante de La Tumba” (Tomb Raider), con base en la cual se ha producido también un videojuego, fue rodada en Camboya.

 

 

Los turistas que después de ver la película visitaron el lugar de su filmación, e imitaron a la protagonista femenina, trepaban los antiguos muros del templo. Este tipo de programas mediáticos son inconsistentes con los planes de la protección del patrimonio.

 

 

La importancia de las imágenes simuladas, la naturaleza fugaz del turismo basado en los medios, la distinción indistinguible entre la realidad y la ilusión, así como el papel de las celebridades en este tipo de turismo han llevado a algunos comentaristas y expertos a considerarlo como un claro ejemplo del post-turismo.

 

 

En la contemporánea cultura posmoderna, de la cual forman parte los turistas, los lugares reales se convierten en mercancías y en bonitas escenas que deben ser consumidas por los turistas. Los visitantes miran a estos lugares como si estuvieran mirando las grandes pantallas de una sala de cine.

 

 

El turismo de salud o el turismo médico es un tipo de turismo en el que los turistas viajan a otro país para tratar y curar sus enfermedades.

 

 

Este tipo de turismo ha crecido significativamente en la última década, especialmente en el campo de la cirugía plástica.

 

 

Una de las razones del crecimiento del turismo médico es que se reduce el costo y el tiempo de espera para la cirugía con respecto a otros países.

 

 

Este tipo de turismo ha llamado la atención en los países en vías de desarrollo, sobre todo en los países asiáticos.

 

 

 

En el mundo de hoy, los turistas no solo buscan divertirse, sino también, quieren obtener ciertos beneficios además de diversión.

 

 

En las últimas décadas, los turistas especialmente buscan el bienestar para su salud en sus viajes y básicamente tratan de elegir destinos que, además de tener una serie de factores, también cuenten con sitios de hidroterapia para que puedan aprovechar al máximo su viaje.

 

 

Si bien el objetivo del turismo médico es la salud y el bienestar de la persona, el turismo es una actividad económica que incluye el comercio en los servicios y el establecimiento de comunicación entre las dos áreas de la medicina y el turismo.

 

Seyed Ahmad Ronaghi, experto en turismo en Irán, en cuanto a los potenciales del país para el turismo de salud dice lo siguiente:

 

 

“Los logros espectaculares de los especialistas de las ciencias médicas de Irán en algunos campos tales como el cultivo de células madre, producción de vacunas y el tratamiento de infertilidad, han convertido a Irán en uno de los principales y más famosos países del mundo en estos campos.

 

 

 

Y por otra parte, la reactivación de la medicina tradicional iraní, - que es tan antigua como la historia de la medicina mundial - en las facultades de medicina del país y la presentación de métodos de prevención y tratamiento basados en las enseñanzas de esta valiosa escuela médica, han creado potenciales especiales al respecto en Irán”.

 

 

 

Añadió que además, la existencia de aguas minerales calientes con diversas propiedades curativas en diferentes partes del país y la existencia de costas con lodos curativos, zonas montañosas con aire limpio, naturaleza intacta con hermosos paisajes, así como sitios culturales e históricos y la diversidad climática en diferentes partes de Irán lo han convertido en un destino adecuado para el turismo con fines terapéuticos.

 

 

Los países desarrollados han comprendido bien la necesidad del ser humano de viajar y, con una amplia publicidad, hacen todo lo que puedan para absorber a turistas a fin de crear un cambio impresionante, sostenible y estable en su economía.

 

 

Dado que los hombres consideran el viaje como su salvador en los aprietos monótonos de la vida, y que el deseo de viajar a tierras lejanas y el aventurismo es un sueño que no tiene fin para el ser humano, el fenómeno del turismo puede ser uno de los recursos ilimitados y rentables para los países.

 

 

La industria del turismo tiene importantes impactos económicos y sociales, entre los cuales destacan la creación de empleo, la obtención de estables y adecuados ingresos de divisas, así como el conocimiento cultural mutuo en pro de la paz y la concordia internacionales. Por otro lado, el turismo es de suma importancia en la diversificación y el enriquecimiento de la economía local.

 

 

El turismo como un importante factor económico y muy efectivo ha llamado mucha atención en los últimos años, por lo que se está tratando de evitar los factores que influyen en la disminución el flujo del turismo y de brindar las posibilidades necesarias para su crecimiento y desarrollo.

 

 

Así que el turismo es una fuente confiable en muchos países desarrollados y en vías de desarrollo, lo que puede tener un creciente impacto en el aumento de los ingresos a nivel nacional y de las oportunidades de empleo, el incremento de los sueldos y la transformación y expansión de la producción.

 

 

El desarrollo del turismo en una región genera   cambios sociales y culturales, y es necesario dar pasos  para evitar efectos negativos y fortalecer sus efectos positivos en la sociedad anfitriona.

 

 

Básicamente, diversas experiencias han demostrado que el turismo afecta la cultura, y la sociedad anfitriona afecta al turismo. El turismo protege el patrimonio cultural de la región, además de abonar el terreno para preservar y promover los modelos culturales en los campos de la música, el teatro, la vestimenta, el arte y la artesanía, las costumbres, el estilo de vida y el estilo arquitectónico, que destacan entre las más importantes atracciones turísticas.

 

 

Hoy en día, en muchos países asiáticos, africanos, latinoamericanos y de Asia Occidental, la industria del turismo ha reactivado las técnicas y la producción de muchos productos artesanales.

 

 

 

P/FE/JP