Jul 26, 2017 09:00 UTC

E: Estimados oyentes saludamos al doctor Libardo Orejuela, profesor y rector de la Universidad Libre de Cali, Colombia, quien abordará los recientes acontecimientos en la Mezquita de Al-Aqsa, Al-Quds (Jerusalén).

La imposición de más restricciones a la entrada y salida de los palestinos en la Mezquita Al-Aqsa, además de la represión ejercida por parte de las fuerzas israelíes contra los palestinos, han aumentado las tensiones entre las partes. Los musulmanes consideran esta medida como intentos por parte del régimen de Israel de sofocar su libertad de expresión y para tratar de judaizar la Mezquita Al-Aqsa, uno de los lugares más sagrados del Islam. Hasta el momento dichas protestas han dejado más de 1000 palestinos heridos y varios muertos. Señor Orejuela ¿cómo se avizora la situación entre palestinos e israelíes?

 

LO: La Mezquita Al-Aqsa, conocida universalmente como el tercer lugar más sagrado del Islam tras La Meca y Medina, la Explanada de las Mezquitas en el corazón de la capital de la patria Palestina, es decir, en Jerusalén, la ciudad sagrada de la patria Palestina, está ocupada. Jerusalén está ocupada por un aparato militar de guerra del estado de Israel, con respaldo del aparato militar de guerra más poderoso del mundo, el norteamericano, y esto provocó acontecimientos similares provocando una Intifada, hace algunos años, que se describe como una confrontación entre ese aparato infernal de guerra estatal  de Israel, con respaldo norteamericano, de un lado, y la resistencia civil, inerme, del pueblo palestino que le hace a uno recordar la figura del Antiguo Testimonio en la confrontación de David y el gigante que lo confrontó (Goliat), de modo pues que ahí se está jugando la suerte simbólica y real del pueblo palestino. Jerusalén no es negociable, lo están diciendo los pueblos del mundo árabe, se está repitiendo en Irán, en Teherán, en la capital persa, que Jerusalén no es negociable pero Israel intenta, con las políticas de las colonias que han hecho todos sus ministros y presidentes y con la toma de la parte este de la ciudad y eso por supuesto está provocando la confrontación que todos vemos.

 

La historia de esa ocupación, para mí está simbolizada en la terrible masacre en Cisjordania, en la ciudad de Jenin que tiene un mártir que para mí es un símbolo:  Jamal Rashid, sentado en su silla de ruedas, aplastado y desvertebrado por retroexcavadoras israelíes enviadas desde los Estados Unidos; esa tragedia está simbolizada en la masacre de 1982 en Sabra y Shatila que comprometieron al señor (entonces ministro de defensa israelí) Ariel Sharon. Esta masacre, esta tragedia está representada en la política del apartheid  que pensamos que se limitaba a Sudáfrica y a Estados Unidos en la década de los setenta, pero que se aplica de manera contundente en Israel. Esa tragedia del pueblo palestino está también simbolizada en la manera en que Estados poderosos del mundo árabe, cómplices de Washington, financian los sectores del terrorismo internacional, que no son más que grupos como Al-Qaeda, y grupos como EIIL (Daesh, en árabe) y luego de manera filistea, hipócrita y traicionera intentan señalar a otros Estados como al Estado iraní, como si fueran responsables de ese avituallamiento o financiación o sostenimiento que los grandes imperios del mundo hacen del terrorismo, que les quede escrito, solamente y con el solo objetivo de desequilibrar la región, dar un zarpazo geopolítico y geoeconómico sobre los recursos naturales no renovables, —sobre el petróleo y el gas— a intentar destruir, por ser un socio estratégico, a la República Islámica de Irán, porque entienden que en esta República ha habido no cualquier tipo de revolución sino una revolución espiritual y los pueblos, los seres humanos y las comunidades nos movemos por paradigmas, por sueños, algo que se puede calificar, por utopías, nos movemos por razones del espíritu, como decía un escritor inglés, William Shakespeare, los hombres caminamos no tanto con nuestros pies, sino que caminamos fundamentalmente por nuestra voluntad, y aquí hay dos voluntades encontradas, la del aparato infernal de guerra de Israel, incluso confrontado en su propio territorio por movimientos de ciudadanos israelíes que no comparten lo que está sucediendo, y por otro lado, la resistencia de un pueblo heroico, como pocos, el pueblo palestino.      

 

E: Señor Orejuela, en medio de esta debacle que enfrenta el pueblo palestino, las organizaciones a nivel internacional, están apoyándolo, considerando que la causa palestina es anunciada como la causa principal del mundo del Islam, realmente, están movilizándose.

 

LO: Yo pienso que las movilizaciones las están haciendo grupos de ciudadanos en todo el mundo, pueblos en todo el mundo, consciencias en todo el mundo, pero las estructuras burocráticas del mundo

árabe, fundamentalmente, han sido cómplices de la tragedia del pueblo palestino, obedientes —con obediencia de cadáver a lo les enseña Washington—, lo mismo ha hecho Europa que es un continente subalterno hoy de la política exterior de Estados Unidos, desde que el Jack J. Servan Schreiber, el escritor francés escribió el texto de la década de los setenta "El desafío americano", probando cómo los Estados Unidos coparon toda la economía europea, hasta hoy la presencia del gobierno europeo en Bruselas ha hecho que Europa sea un socio menor sin mayor importancia.

 

Todos se están moviendo, recordemos la tragedia de Vietnam, si algo empezó a quebrar la invasión a Vietnam fue el tribunal Roussell que Beltran Roussell y Jean Paul Sastre construyeron para juzgar los crímenes de los imperios en la guerra de Indochina. Allí comenzó el vuelco de esa guerra y ese tribunal se montó en consciencia, no se invocó el derecho sino la ética, la moral, la consciencia y creo que es un buen ejemplo que se debe repartir en varios lugares del mundo para que los gobiernos burocráticos, del mundo árabe y muchos de América Latina entiendan que no se puede frenar el avance y no se puede destruir ninguna causa justa en el mundo por poderoso que sea el injusto agresor que se enfrenta a ella.

 

E: Exactamente, señor Orejuela agradecemos sus valiosos comentarios para los oyentes de la Voz Exterior de la República Islámica de Irán.