En este programa estudiamos los atentados terroristas de Barcelona y el ámbito de islamofobia que se ha creado en España después de estos ataques.
Se acerca el tiempo de la oración, pero el Imam de una pequeña mezquita en el corazón de Barcelona, Raja Maya, no espera que se llene la mezquita. Sentado en una pequeña habitación, mientras en otra cercana, un pequeño grupo de niños lee el Corán, Maya dice: "Los musulmanes tienen mucho miedo. Tienen tanto miedo que no salen de casa. Pocas personas vendrán hoy a la oración". Este es el ambiente que domina Barcelona tras el sangriento atentado del jueves 17 de agosto. Como todos los atentados terroristas en Europa, los musulmanes fueron presentados como los primeros culpables. Entre tanto, los extremistas también han utilizado esta atmósfera antiislámica y anti-Islam para apuntar contra los musulmanes en sus ataques.
Una mezquita de Sevilla, el sábado 19 de agosto, fue blanco de un ataque racista cometido por desconocidos que escribieron consignas antiislámicas en las paredes del centro donde se reúnen musulmanes, en su mayoría de países del norte de África. Uno de estos escritos contenía una amenaza para la comunidad islámica. La ciudad de Granada también fue atacada por un grupo de extrema derecha racista que hizo huir a las mujeres y los niños musulmanes que estaban en la mezquita. Los racistas irrumpieron en la mezquita con una pancarta que decía "todos los que patrocinan la mezquita, apoyan el terrorismo". El portavoz de la Mezquita de Granada, Khalid Nitou, quien informó de este crimen de odio a la policía, dijo: "Los racistas han usado el atentado terrorista de Barcelona para molestar a los musulmanes y están tratando de promover sus ideas racistas". Añadió: "La gente debe saber que los musulmanes, como todos los demás, pueden ser víctimas de la injusticia de los grupos terroristas".
La agencia de noticia estadounidense NBC News informó que muchos analistas están preocupados por el endurecimiento de la vida de muchos musulmanes que viven en la ciudad española. El periodista barcelonés Javid Moghl expresó su preocupación por los efectos de los ataques del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) en España sobre la vida de los musulmanes. Al respecto, enfatizó: "Si se presume que una persona de Cataluña es criminal, ¿no deberían presumirse como criminales toda la gente de esta región, incluidos los musulmanes?”. Pero muchos en Occidente están buscando una oportunidad para extender la islamofobia y el odio hacia los musulmanes que viven en Europa entre el resto de sus ciudadanos. Uno de ellos es el principal rabino del barrio judío de Barcelona. Meir Bar Hen afirmó que los judíos de Barcelona están condenados a muerte porque las autoridades españolas no quieren enfrentarse al Islam extremista. El rabino, con el fin de alentar a los judíos a emigrar a los territorios palestinos ocupados, intenta atribuir actos terroristas a los musulmanes y convencerles de que los territorios palestinos ocupados son zonas más seguras donde podrían vivir mejor. "Yo les digo a mis feligreses: 'no penséis que debemos permanecer aquí para siempre', y los animo a comprar propiedades en Israel", reconoció el rabino Bar Hen. "No repitan el error de los judíos argelinos y de los judíos venezolanos. Más vale [salir] temprano antes que sea tarde'", es otro de los consejos del religioso, que además subrayó la presencia de una gran comunidad musulmana con "tintes radicales" en la región. "Este lugar está perdido [...] Europa está perdida", concluyó el rabino, alegando que las autoridades españolas son reacias a enfrentar el terrorismo islámico. En las frases de este rabino racista, lo que predomina es la atribución del extremismo y la violencia a las enseñanzas islámicas. Esto, mientras que el régimen sionista es una de las fuentes de propagación del extremismo y la violenta en la región y en el mundo. Básicamente, la ocupación de la tierra de Palestina y la formación de un régimen falso llamado Israel fueron llevadas a cabo por extremistas de derecha y racistas judíos. Israel es también un régimen racista, cuyas estructuras se basan en el "apartheid" y la discriminación racial.
Actualmente, se ha revelado la estrecha relación que mantienen los grupos takfiríes y terroristas, especialmente Daesh, con el régimen falso de Israel. Para los musulmanes, Israel es el principal enemigo y el régimen que ocupó la primera quibla de los musulmanes. Pero, para los grupos takfiríes y terroristas como Daesh, Israel no solo no es un enemigo sino que mantienen estrechas relaciones. Hace dos años, un ataque digital a las cuentas del director de la oficina del primer ministro del régimen sionista, se reveló información confidencial que confirmaba que el régimen sionista ha entregado armas a los terroristas sirios, así como el apoyo generalizado de Arabia Saudí y Catar a los terroristas. Los hackers tuvieron éxito al infiltrarse en una serie de cuentas de Internet de personas relacionadas con la seguridad del régimen sionista, entre ellas Manzar al-Safdi, conocido como Mandy al-Safdi, miembro del gabinete del primer ministro israelí, Benyamín Netanyahu, que es muy activo en el caso de Siria. Según los documentos obtenidos de la computadora de Manzar al-Safdi, Israel, a través de una red de mercenarios en Siria, El Líbano, Arabia Saudita, Catar, Jordania y los territorios ocupado de Palestina, ha cooperado en diferentes áreas, militar, financiera y de inteligencia, con grupos takfiríes y terroristas, especialmente Daesh y el Frente Al-Nusra. Además, se han publicado muchas fotografías e imágenes que demuestran que los heridos de las bandas terroristas en Siria son atendidos o ingresados en hospitales israelíes en los territorios ocupados de Palestina. En una de estas imágenes, el primer ministro Netanyahu visita a uno de estos heridos. No hay duda de la hostilidad del régimen sionista con los musulmanes, No es extraño, entonce,s que los takfiríes y terroristas que cometen los peores crímenes de lesa humanidad en el Islam, no consideren a Israel su enemigo.
Los actos terroristas llevados a cabo en el nombre del Islam por jóvenes inconscientes de las enseñanzas tergiversadas del verdadero Islam, proclamador de la paz y la justicia en Europa, no persiguen un objetivo más allá que la destrucción de la imagen justa y pacífica de esta religión celestial. Una de las corrientes que trata de explotar política y propagandísticamente el terrorismo para cubrir sus crímenes en los territorios ocupados es el régimen de Israel. En este sentido, también, las autoridades israelíes han usado la matanza y destrucción de Siria e Irak a manos de los grupos takfiríes y terroristas. El objetivo principal de estas bandas ha sido debilitar el eje de resistencia ante la agresión del régimen israelí. Hasta ahora, los grupos takfiríes, en la cabeza Daesh, que alegan ser musulmanes, no han disparado ni una sola bala contra los territorios ocupados de Palestina. Un judío nunca ha sido blanco de un miembro de Daesh. Los musulmanes españoles, tras el atentado terrorista de Barcelona, celebraron algunas reuniones en las que expresaron su solidaridad con las víctimas de este atentado y, además de declarar la inocencia de los musulmanes en estos hechos, subrayaron que son las principales víctimas de los crímenes de los grupos takfiríes.