Sep 16, 2017 07:52 UTC

La vida política y social en cada sociedad se debe en primer lugar a las capacidades de los hombres y de las mujeres y, a su participación consciente y comprometida en los escenarios político-sociales.

Ahora bien, pese a que los gobiernos tiranos han obstaculizado la presencia de las mujeres en la sociedad, las mujeres musulmanas iraníes desde hace mucho tiempo han participado en los campos políticos y sociales criticando a los gobernantes opresores que pisoteaban los valores humanos e islámicos.

Después de la victoria de la Revolución Islámica de Irán, las mujeres recuperaron su lugar y conocieron sus responsabilidades personales y sociales. El rendimiento y la eficiencia de las mujeres en esta época, expresa los valores recuperados por la Revolución Islámica de Irán y, se debe a las luchas de los hombres y mujeres que antes de la victoria de la revolución, soportaron muchas dificultades y, lucharon contra el régimen tirano de Pahlavi. En este episodio de la serie Exitosas Mujeres Persas, les presentaremos a una de estas mujeres luchadoras en las épocas previas a la revolución. 

 

Entre las exitosas mujeres persas en el escenario político, antes y después de la revolución, se puede mencionar a la Sra. Parvin Salihi. Ella nació en el año 1957 en la ciudad de Isfahán. Desde su infancia se interesó mucho por aprender las ciencias y asistir a diferentes escenarios de la sociedad. Como una muchacha, que siempre llevaba velo, fue sensible a los asuntos de su sociedad y, criticaba mucho los desvíos del régimen autoritario de Pahlavi. Por lo cual en muchos escenarios se enfrentaba con diversas dificultados creadas por el régimen.

Salihi se casó en el año 1972 con el Dr. Morteza Labafi-neyad, un joven luchador e inteligente científico. Colaborando mutuamente en las actividades políticas, esta pareja buscó una nueva forma para luchar codo a codo contra la represión del régimen del Shah y, por eso, los dos fueron detenidos y encarcelados. En aquella época, la Sra. Salihi tenía sólo 18 años de edad. Primero la condenaron a pena de muerte, pero debido a su corta edad la condenaron a dos años de cárcel.

Sin embargo, su esposo fue condenado a la pena de muerte. Esta dama luchadora sufrió las más duras torturas físicas y psicológicas en las cárceles del régimen del Shah. 

Parvin Salihi gracias a su interés y a su entusiasmo que tuvo para el aprendizaje, pudo estudiar después de la revolución la carrera de Obstetricia en la Universidad de Ciencias Médicas de Isfahán. Más tarde, debido a su interés en querer saber más sobre la relación entre madre y niño, comenzó sus estudios en la carrera de la Salud de Madre y Niño en la misma universidad y consiguió el título de Master.

 

Esta sobresaliente dama iraní tiene en su currículo laboral un largo registro de cargos ejecutivos. En una legislatura fue diputada del pueblo por la provincia de Teherán en la Asamblea Consultiva Islámica de Irán y, simultáneamente se integró a la Comisión de Salud de la asamblea, donde llevó a cabo servicios sustanciales para diferentes clases de ciudadanos, en particular las mujeres y los niños.

Dado a su antecedente científico, fue nombrada como Directora del Departamento de Investigación de La Mujer y la Familia en el Centro de Investigaciones de la Asamblea Consultiva Islámica. Además, ocupó durante 15 años, diferentes puestos en el Servicio de Radio y Televisión de la República Islámica Irán, entre otros fue jefa de la Oficina de la Mujer y la Familia, donde actualmente sigue ejerciendo dicho cargo. En el año 2006 y en el aniversario del nacimiento de la Hazrat Fatemeh Zahra (Saludos sean para ella), hija del profeta del islam, que es el día elegido en Irán como el Día de la Mujer, la Sra. Salihi fue elogiada como la mujer ejemplar por el expresidente, Mahmud Ahmadineyad. Ella tiene muchos artículos científicos y religiosos; asimismo, en sus viajes a diferentes países donde participó en seminarios y conferencias internacionales logró exponer los puntos de vistas del Islam acerca de los temas como La Mujer y la FamiliaLa Mujer y los Medios de Comunicación y, El papel de la Madre, entre otros temas.

 

En la entrevista que le hicimos le preguntamos sobre sus luchas y el rol que desempeñaba su esposo en este escenario. Para la Sra. Salihi convivir con su esposo, aunque por  corto tiempo, fue uno de los factores de su éxito en la vida y, al respecto subrayó: “Las mujeres pueden colaborar junto con los hombres en todas las áreas, en el campo de la política entre otros y, tener influencia. Yo le debo parte de mi éxito a mi esposo mártir, el Dr. Labafi-neyad; era un hombre que tenía una gran alma. Pese a que no duró mucho nuestro matrimonio, por su desaparición, me di cuenta que los grandes hombres disponen de grandes rasgos. Vivir con los hombres de Dios es glorioso. Ellos son hombres que benefician tanto a sí mismos como a su entorno. El pensamiento, la actitud y las ideas de los grandes hombres nos hacen recordar a Dios.

Yo aprendí de mi esposo a conocer quién es el mejor criado de Dios. Principalmente, aprendí ser criada de Dios y a obedecerle. Nuestros hechos, tendrán sentido siempre y cuando obedezcamos a Dios.

Además, los conocimientos de un criado de Dios buscan un objetivo que es para Dios y para estar al servicio del pueblo”.

 

A juicio de la Sra. Salihi, como una dama ejemplar, la base de la familia es imprescindible para que los individuos progresen en el aspecto tanto material como espiritual. En la misma línea ella recalca: “Considero a mi familia como parte eficiente en mis éxitos. Siempre he intentado ser una persona útil para la sociedad; incluso, pretendía que la carrera en la cual estudiaba, sirviera de algo para la sociedad. Para mí, la familia influye en la situación de los individuos. En efecto, las virtudes positivas y negativas de cada persona en la sociedad nacen de su familia.

Así es, todas las personas tienen el 70 % de su comportamiento de la familia. Los modales ideológicos personales, morales, etc. se forman en la familia. Y la mujer es el eje central en la familia. Por lo cual los gobernantes deben preocuparse lo suficiente en el importante rol de las mujeres en la educación de la nueva generación, para así, construir la sociedad”. La Sra. Salihi tiene, gracias a sus cuidados maternales, dos hijos bien educados que han progresado en la vida. Hoy su hijo ya es un médico comprometido y especialista y, al igual que su madre, está al servicio de su sociedad.

 

La Sra. Salihi cree que los hombres y las mujeres deben fortalecer en sí mismo sus virtudes humanas y morales, puesto que Dios envió al profeta para que se perfeccionen las diferentes dimensiones morales del hombre. Para la Sra. Salihi, los hombres y las mujeres deben actuar según los principios morales obtenidos de la religión y los modales de los profetas. Además, opina que hoy día las mujeres deben en todas  partes del mundo acabar con una opresión histórica impuesta hasta la fecha. También subraya: “Al día de hoy oprimen a las mujeres bajo el título de libertad. En esta época, particularmente en el Occidente y en Europa, y en una forma de esclavitud moderna, se aprovechan de las mujeres para caprichos de los hombres. Quizás, muchas de las mujeres aún no se han dado cuenta de que son esclavas en las manos de los hombres caprichosos. El sistema capitalista y el colonialismo se aprovechan de la apariencia de las mujeres engañándolas con falsos lemas. Parece que ya ha llegado el momento de que las mujeres acaben con este aprovechamiento ampliando sus informaciones espirituales y científicas”.

 

Dado el despertar islámico que se ve en la región y en el mundo y también el papel eficaz de la mujer musulmana en este cambio, esta dama luchadora persa piensa que las experiencias de las mujeres iraníes en las luchas y también en los escenarios políticos pueden abrir el camino para las musulmanas en otros rincones del mundo. La Sra. Salihi añade que: “Las mujeres bahreiníes, libias, egipcias, etc. deben hoy su despertar a los esfuerzos de la República Islámica de Irán. Ellas tomando como ejemplo a las mujeres iraníes y con paciencia y resistencia pueden triunfar en un futuro cercano”.

 

La Sra. Salihi desea la victoria y la salvación de las mujeres musulmanas sobre sus opresores en el Oriente Medio y señala: “Esto es un gran milagro que pese a que los enemigos cuentan con todos los medios, sin embargo, el pueblo de la región despertó y se levantó. La promesa divina es verdadera y, le pedimos a Dios que les de fuerza para resistir y mantener la unidad”.