En el nombre de Dios y saludos a todos los estimados oyentes y a los interesados en el programa Dando una vuelta por la naturaleza de Irán. Esperamos que lo hayan pasado bien hasta el momento. Como recordarán en los programas anteriores les hemos hablado sobre los desiertos de Irán y sus impresionantes atracciones naturales. En el nombre de Dios y saludos a todos los estimados oyentes y a los interesados en el programa Dando una vuelta por la naturaleza de Irán. Esperamos que lo hayan pasado bie
En la edición de hoy, pretendemos darles a conocer otros fenómenos naturales y extraordinarios de los desiertos de Irán, así como los alojamientos y los caravasares en estas zonas. Ahora, les invitamos a que por favor nos acompañen.
Los lagos salados en los desiertos del mundo son una de las atracciones naturales y, en las regiones desérticas de Irán, nos encontramos con estos lagos, entre ellos el más conocido en el país es el lago de Aran y Bid-gol, conocido como el lago salado de Qom, que limita al norte con el desierto de Varamin, al sur con la ciudad de Aran y Bid-gol, al este con Siah-kuh (Montaña negra, en español) y al oeste con la provincia de Qom. Este lago se emplaza sobre una superficie de 2400 km2 con 30 km de ancho y 80 de largo y está a unos 800 metros sobre el nivel del mar. El lago Aran y Bid-gol se ha creado como resultado del movimiento de fallas al este, oeste y al sur y también al hundimiento de la tierra. Debido a las precipitaciones, la superficie y la forma del lago varía en las diferentes estaciones del año; evidentemente, en las temporadas de lluvia aumenta la superficie del lago, en cambio, disminuye en verano y en otoño. El agua de los lagos salados, como indica su nombre, es más salada que la del mar (100 o 200 gramos por litro, es decir, 50 veces más salada que el agua de los mares libres) y esto se debe a la alta cantidad de sal y minerales que se encuentran en las tierras que caen en los ríos. En verano, sube la densidad del agua del lago, porque el agua en esta época es escasa y, además, el nivel de evaporación es alto; de manera que los fragmentos de sal flotan sobre el agua, los cuales son extraídos y usados para el consumo humano. Desde luego, además del cloruro de sodio se encuentran en los lagos salados otros minerales tales como el sulfato de sodio, el cloruro de magnesio y también el sulfato de magnesio entre otros compuestos químicos que se emplean en las industrias.
Cabe mencionar que en los desiertos de Irán hay restos de caravasares que fueron construidos junto a las carreteras, los cuales evidencian que en los tiempos remotos pasaban caravanas por estos desiertos. Actualmente, se han reconstruido algunos de estos caravasares y sirven como lugares de alojamiento para los turistas que visitan los desiertos. El caravasar Maranyab es uno de los caravasares cuyo acceso requiere pasar por Teherán, la ciudad de Qom, la ciudad de Kashan y luego debemos dirigirnos hacia el noreste, es decir, la ciudad de Aran y Bid-gol, situada en la más norteña provincia desértica de Isfahán. La distancia entre Aran y Bid-gol hasta el caravasar de Maranyab es de casi dos horas y es recomendable hacer este recorrido con guías locales. Este caravasar, hecho de yeso y ladrillo, tiene forma cuadrada y sus habitaciones rodean un patio de unos 20 o 30 metros cuadrados donde se ubican también numerosos cuartos y establos y seis torres de vigilancia. En el rincón sureño del caravasar se encuentra una piscina de 4 por 10 metros. Es curioso que esta piscina se surte de una fuente de agua que se encuentra debajo de la misma piscina y que también abastece el agua potable del caravasar. Sinceramente, este recurso acuífero y los altos árboles que se encuentran en el corazón de un desierto, además de ser una gran bendición divina, son una maravilla que sorprende a cada turista que visita este caravasar.
El caravasar de Maranyab es uno de los observatorios importantes de Irán que atrae mucho por su espléndida vista a los amantes del espacio. Los grupos astronómicos se establecen en el techo del caravasar y observan con telescopios y cámaras equipadas las bellezas del cielo en un fascinante silencio. La temperatura por las noches alcanza en otoño e invierno cero grados y, como máximo uno o dos grados bajo el cero. A una distancia de casi 12 kilómetros del este del caravasar se ve una amplia zona de colinas de arenas movedizas, las cuales se enumeran entre las otras atracciones extraordinarias del desierto de Maranyab; estas colinas son un paisaje agradable para aquellos fotógrafos que les encantan las novedades de la naturaleza. La arena que generalmente se mueve sobre la superficie del suelo debido a los vientos, se queda quieta cuando se enfrenta con plantas, las piedras u otros fenómenos naturales y se va acumulando al entorno de ellos para formar así una colina. Cuando los obstáculos son mayores, se acumula más arena y, por tanto, las colinas son más grandes. Estas colinas, frecuentemente, son de cuarzo, pero, a veces, también son de yeso, piedra caliza, arcilla, ceniza volcánica y otros materiales. La abundancia de estos minerales ha generado numerosas colinas de arena, las cuales se clasifican según sus formas. Algunas tienen forma de media luna, de “U”, de espada o bien se juntan como largas cadenas. La altura de las colinas de arena también varía, pero por lo general, no supera de 20 metros. Sin embargo, a veces, puede llegar a los 100 metros. En el norte del caravasar Maranyab se encuentra una pequeña montaña llamada Siah Kuh de 1865 metros de alto y rodeada por tierras pantanosas, por lo cual, para subir a la zona más alto es imprescindible la ayuda de guías que la conozcan pues solamente se puede escalar a través de determinadas rutas.
Cabe destacar que en el margen occidental del desierto de Lut se encuentra el campo desértico de Shahdad, establecido en los últimos años gracias a los esfuerzos de la Organización de Turismo de Irán. Bellos cobertizos hechos con hojas de palma, agua potable, electricidad, centros comerciales, lugares de aseo y cuartos de baño están entre las comodidades que brinda este campo citado. Para llegar al campo desértico de Shahdad hay que recorrer una distancia de 2 kilómetros por la carretera de Shahdad-Mahan, luego, cruzando una distancia de 15 kilómetros por la carretera de Shahdad –Nehbandan, se entra a la carretera del campo desértico donde sólo quedan unos 10 kilómetros más para encontrarse con el magnífico campo desértico de Shahdad que es un lugar adecuado para alojar a los turistas que desean visitar el desierto de Lut.
El desierto, aparte de sus bellezas, cuenta con muchas otras bendiciones. Así es un lugar apropiado para la crianza de camellos ya que a estos animales les gusta mucho comer una planta llamada alhagi que, justamente, se encuentra en el desierto. Por tanto, con el fortalecimiento de los pastos desérticos, se puede aprovechar de la carne y la leche de los camellos. El Dr. Kardavani, destacado experto de asuntos desérticos, opina al respecto: “Muchas de las plantas que crecen en el desierto son medicinales o industriales tales como el alhagi, el ashñan, el Tamarix, el astragalus, entre otras”. La planta ashñan, conocida en la lengua local como Eshlon, tienen propiedades de un astringente natural y bilógico. También de esta planta se extrae hidróxido de sodio que sirve en la industria textil de la alfombra. Como se ha dicho antes, el ashñan es una planta desértica que les interesa particularmente a los camellos. Otra planta desértica es la llamada asclepia que contiene una savia que es antidiarreica y de la cual se puede producir diversos medicamentos relacionados con los problemas de la diarrea. Para el Dr. Kardavani, de la planta citada se genera una tela mucho más fina, blanca y con calidad que la seda natural. El Tamarix es otra planta que crece en el desierto, de la cual se consigue un dulce jugo que se emplea mucho en la confección de pasteles. Además de todo lo que se ha dicho, crecen en el desierto diferentes clases de arbustos resistentes y compatibles con el aire seco y las duras condiciones desérticas y a los cuales también los lugareños les dan diversos usos.