En el nombre de Dios y saludos a todos los estimados oyentes y a los interesados en la serie "Dando una vuelta por la naturaleza de Irán". Les presentamos un nuevo capítulo que esperamos sea de su agrado e interés. En el programa de hoy les hablaremos de Kelardasht, uno de los más hermosos paisajes naturales del país persa conocido como el Paraíso Perdido o la Joya Verde del Norte de Irán. Una región que se encuentra en la zona central de la cordillera de Alborz a una altura de entre 1200 a 1300 metros sobre el nivel del mar, donde se encuentran numerosos ríos, bosques, glaciares naturales, altos picos y grandes rocas. A unos 170 km de Teherán, capital de Irán, y atravesando la ciudad de Karajch y las carreteras laberínticas de Chalus, llegamos a una ciudad pequeña llamada Marzan-abad; desde allí hasta el centro de Kelardasht, hay una distancia de 24 Km. Luego, nos encontramos en una región llamada Kordichal, considerada por muchos turistas un punto de partida hacia la diversión.  Ahora, les invitamos a que por favor nos acompañen.

 

Kelardasht, situada en la provincia de Mazandarán,  es uno de los distritos de buen clima de la ciudad de Chalus. Esta zona limita al sur con el pico Takhte-Soleiman, al norte con el mar Caspio y la ciudad de Tonkabon, al este con las ciudades de Chalus, Noshahr y Kayor y, finalmente, al oeste con las ciudades de Qazvin y Alamut. Las obras halladas en la zona de Kelardasht y las colinas de alrededor indican que una parte de esta región estaba habitada en tiempos antiguos.

 

La estructura montañosa y forestal de Kelardasht dispone de un agradable clima. En las cordilleras de Alborz, en las cercanías del mar Caspio, las nubes se concentran y producen precipitaciones en el todo norte de Irán, pero, la nieve en las alturas de Kelardasht hace que el clima, en comparación con otras regiones en la provincia de Mazandarán, sea más fresco. Los masivos y verdes bosques, el río de Sard-abrud, los picos de Alam-kuh y Takhte-soleiman y el agradable clima están entre los rasgos de esta región iraní.

 

El maravilloso paisaje de Kelardasht asombra a cualquier visitante. Las altas montañas de Alam-kuh y Takhte-soleiman en el oeste, los amplios y coposos bosques de Abbas-abad en el norte, los mágicos paisajes naturales en el sur, los montes y las aldeas que se encuentran en las estribaciones de estas montañas en el este, todo esto  ha convertido  a Kelardasht en una región bella y extraordinaria. Muchas veces, la verde llanura de Kelardasht se esconde entre la niebla que se mueve en las alturas de Alamut, lo cual crea los momentos indescriptibles para los visitantes que pasan por allí. Kelardasht tiene aldeas donde sus habitantes, en un ambiente tranquilo y lejos del alboroto de las ciudades, reciben a los turistas y a los interesados en la naturaleza. La población de Kelardasht junto con la de Marzan-abad y las aldeas de su entorno es menos de 40.000 personas en invierno. Mientras que la población crece en la primavera y llega a 120.000 de personas. El crecimiento de la población se produce por la llegada de visitantes que buscan disfrutar de esta llanura soñadora. Cabe destacar que los nativos de Kelardasht son muy trabajadores, amables y acogedores y hablan tres lenguas: laki, guilaqui y el persa.

 

En las altas montañas de Kelardasht se encuentran los glaciares naturales y permanentes, los cuales siguen activos aún después de millones años. Estos grandes glaciares que están mezclados con piedras y tierra están entre las principales fuentes naturales que abastecen el río de Sard-abrud, que con su bello recorrido de vueltas y sus truchas de color, es uno de los ríos más importantes de Kelardasht. En cercanías del  río se encuentra una fuente que nace de la montaña y es conocida como Absarde Rudbarak, por su agua clara y dulce. En las alturas sobre la fuente se observan la montaña llena de  árboles gruesos; todo esto ha regalado una belleza fascinante a Kelardasht. En este lugar, en invierno, caen avalanchas desde las alturas de las montañas hacia los alrededores del río de Sard-abrud y la fuente de Ab-sard. Y, a veces, hasta mediados de verano se observan huellas de la nieve y de las avalanchas, lo cual revela que sus inviernos son muy fríos. En los días festivos de verano, el espacio entre la aldea de Rud-barak y la fuente de Ab-sard se llena de gente interesada en la naturaleza y que ha escogido esta región para descansar y comer algo rico. En cercanías de esta geografía, hay otra región llamada Akaapol y Amir-cheshmeh, que también son lugares muy agradables para pasar el tiempo. 

 

Son muchas las atracciones naturales en el entorno de Kelardasht, por ello, un turista que viaja a esta zona puede disfrutar de maravillas naturales en todo su camino. En el oeste de Marzan-abad y en sus cercanías, empieza una carretera secundaria de la carretera principal que termina en las montañas de Golam-rey y el bosque de Baraar. Los masivos arbustos en las colinas con vistas al río le han aportado una belleza extraordinaria a esta zona de Marzan-abad. Los paisajes de las montañas de Golam-rey y el bosque de Baraar son verdaderametne impresionantes. La aldea de Baraar que se encuentra en las estribaciones de la selva y la montaña nos habla de la antigua amistad entre el hombre y la naturaleza que, además del río que siempre recorre esta zona, se pueden observar árboles gruesos que esperan la llegada de los pasajeros cansados de recorrer la montaña para ofrecerles su sombra.

 

Si bien ya ha terminado el tiempo del programa de hoy, podemos asegurar que las bellezas naturales de Kelardasht son interminables. Entre otras atracciones de esta zona se puede enumerar los grandes y pequeños lagos que aumentan las atracciones naturales. El lago de Valesht es uno de los lagos de agua dulce de Irán que está en esta región y es un medio ambiente apropiado para las aves y los animales acuáticos.