Hamedan, capital de la civilización persa (3)
ParsToday-Hamedan, es la capital del turismo de Asia en 2018. Una ciudad con atracciones históricas, geográficas y culturales que tiene una naturaleza única y sorprendente. En el programa de hoy nos dedicamos a esta hermosa naturaleza montañosa.
La montañosa provincia de Hamedan, además de su rica antecedencia cultural e histórica, es muy importante por su ubicación geográfica, desde el aspecto natural, el turismo y la navegación en naturaleza. La montaña de Alvand, como una de las características naturales de la provincia de Hamedan, recibe cada año a muchos turistas nacionales y extranjeros, quienes se dedican al montañismo así como visitar los recursos naturales y el paisaje de esta región. Montañas que gozan de únicas fuentes y recursos naturales.
Alvand, una sola montaña de las ramas orientales del de Zagros central, con un área de 1375 kilómetros cuadrados, sigue siendo el mayor fenómeno granítico remanente desde el cuarto período de la geología. Su altura es de 3574 metros sobre el nivel del mar y divide la provincia de Hamedan en dos partes, norteña y sureña. La montaña tiene valles profundos y verdes, fuentes, prados y varios picos.
En las montañas de Alvand, además de los picos altos y escarpados, hay pequeñas llanuras, cuyas superficies están cubiertas de césped y hay muchas fuentes en ellos. Teniendo en cuenta que tienen superficies relativamente planas, se han convertido en el lugar de descanso de los escaladores. Los más importantes de estas pequeñas llanuras son: la Plaza Mishan, Tajt e Nader, Chaman Shah Nazar y Tajte Rostam.
La plaza de Mishan o la llanura de Mishan es una de las llanuras de las montañas de Alvand. Esta área está ubicada en la ruta principal al pico de Alvand, con un área de aproximadamente una hectárea y una altitud de 2600 metros sobre el nivel del mar. En los viejos tiempos, los nómadas que pasaban el verano en las laderas del norte de Alvand, se establecían en la Plaza Mishan, que gozaba de las aguas corrientes, praderas y hermosos paisajes naturales.
El clima montañoso, el hermoso valle de Alvand y el magnífico paisaje de la llanura de Mishan han atraído a los turistas de muchas partes de Irán e incluso del mundo a visitar a esta área. Este enorme complejo cuenta con todas las instalaciones recreativas, deportivas y educativas, incluidas las plataformas de salto Bungee, el muro de escalada, los senderos (para ciclistas), la sala de bolos, la estación de esquí, la pista de trineo y la línea Telecabina, parques, jardines y otras facilidades.
La cueva de Qaleh Yuq se encuentra a 135 km de la carretera de Saveh hacia Hamedan, conocida por su proximidad a la aldea de Qaleh Yuq. Esta cueva es una de las cuevas importantes creadas por el hombre y tiene tres entradas. La entrada de la cueva está a unos 20 metros sobre el suelo y el acceso a la cueva no es posible sin uso de equipamientos de escalada.
Al comienzo de la entrada, existe un cráter tiene aproximadamente 2 metros de diámetro y la entrada a la parte principal de la cueva es posible a través de un orificio que se encuentra sobre la boca. El orificio de entrada tiene un diámetro de unos 50 a 75 cm, y después de pasarlo, llegamos a la parte principal de la cueva: un pasillo grande, con dos habitaciones pequeñas de 2 x 2 metros en sus lados. En frente de uno de los pasillos de la cueva, hay una pequeño muelle a una profundidad de 25 cm, y esta precisión especial en la construcción de esta cueva la ha convertido en uno de los artefactos antiguos más sorprendentes.
Esta cueva se utilizaba como un santuario, en el que se realizaban ciertos rituales. Se observan varios vagos dibujos y líneas en la pared de la cueva. En la cima de la montaña sea construida una torre que en el pasado se utilizaba para la supervisión.
Pero se debe observar las maravillas de la naturaleza en la provincia de Hamedan por la cueva de Alisadr. La cueva, que según los expertos en geología del mundo, se considera entre las más grandes y únicas del mundo y su formación se remonta al período Jurásico (el segundo período de la geología, hace 190 a 136 millones de años). La cueva Alisadr se encuentra a 65 km al noroeste de Hamedan y se encuentra en una de las regiones más altas de la provincia en la cordillera de las montañas Zagros. La altura del cráter de la cueva desde el nivel del mar es de 2180 metros. La cueva de Alisadr fue identificada en 1963 por varios escaladores y espeleólogos del grupo Sina de Hamedan junto con la gente de la aldea de Alisadr, y al principio, se realizaba la navegación en esta increíble cueva con equipamiento elemental. Cinco años después, extendieron el cráter de la cueva y se facilitó el tránsito a esta. Sobre la base de la investigación y la documentación existentes, en el periodo del imperio safávida, los habitantes de la zona utilizaban la entrada a la cueva, de tal modo que se aprovechaban de la entrada como refugio y sus aguas como reservorio para uso agrícola.
La cueva de Alisadr tiene el más largo curso de vela en cueva del mundo. El área de la cueva tiene numerosos corredores. A partir de una serie de aguas, se ha creado un gran lago dentro de la cueva, por lo que la penetración en las profundidades de la cueva solo es posible por barco.
Aunque la gente llama hoy a esta cueva "Alisadr", el principal nombre de la cueva es Ali Sard (Sard significa frío en persa), debido a que el agua que contiene es entre las aguas frías.
Lo que distingue a la cueva de Alisadr de las otras cuevas del mundo es la facilidad de uso de los canales de agua en su interior, que, debido a su amplitud, facilita la circulación a través de los barcos ordinarios. La altura del agua en la cueva de Alisadr alcanza los 14 metros en el punto más profundo.
La temperatura dentro de la cueva es de aproximadamente 16 ° C y la temperatura del agua es de 12 ° C. El pH de agua es muy cercano a la neutralidad y es igual a 8, y la profundidad del agua se mide entre la 0.5 y 15,5 metros. La dureza del agua de la cueva es alta y calcárea, por lo que no se recomienda beberla. Alisadr es una cueva viva y no se encuentra ningún gas venenoso en ella, y debido al flujo de aire, los visitantes no sienten la dificultad para respirar. Tampoco hay vida animal en la cueva debido a la falta de luz solar. Curiosamente, Alisar es un tipo de cueva muy sólida y no ha experimentado ninguna destrucción en los últimos cinco millones de años, ya que las estalagmitas y las estalactitas existentes en la cueva tienen la misma edad. Hasta el momento, se han identificado 11440 metros del total de los atrios de la cueva en varias etapas y aproximadamente 2/2 kilómetros están siendo visitados por entusiastas. Alrededor de un millón de personas de Irán y el resto del mundo visitan la cueva anualmente.
Cruzar por las esquinas del corredor, los atrios, los senderos, las aguas cristalinas y las quebradas, cuyas formas se han cambiado por el paso de tiempo, es emocionante para todos los visitantes. Hay nombres extraños en los signos que representan las formas extrañas de las rocas.
El techo de la cueva (que en algunos lugares está hasta 10 metros por encima del nivel del agua) está cubierto con depósitos de carbonato de calcio puro y mezclado con otros elementos químicos. Estos sedimentos han producido diferentes estalagmitas con formas atractivas, que han creado hermosos espectáculos en el suelo de la cueva, y donde no hay agua
La fuente de agua de la cueva es el agua subterránea y, además, es la lluvia atmosférica que fluye hacia el agua como gotitas de agua a través de la pared y el techo de la cueva. En general, esta cueva masiva se creó a través de la erosión y la formación de cavidades pequeñas en la masa de piedra caliza y la interconexión gradual de estas cavidades a lo largo de los años.
De acuerdo con la clasificación térmica, el agua de la cueva se considera agua fría, que es muy clara y carece de un olor y sabor especiales, por lo que incluso en lugares con una profundidad de 5 metros, se puede ver su lecho a una luz normal y a simple vista. El aire dentro de la cueva es ligero, limpio, libre de polvo y sin movimiento, y en caso de encender una vela, no habrá ningún movimiento en la llama de la vela.