Pars Today

Esta noche silenciosa y tranquila de Medina se sorprende por la luz de la casa del Imam Sayad (la paz sea con él), una luz brillante alumbra el cielo de Medina, es la luz que emana de la cara feliz de un bebé inocente de Ahlul-Beith. Felicitamos el nacimiento de la quinta estrella del cielo de la Wilayat, una flor del jardín de la orientación y la sabiduría a todos los amantes de esta familia.

 

Su nombre bondadoso del quinto Imam es "Mohammad" pero es conocido por Baquer o Baquer -al-Olum que significa, "Analizador erudito de la Ciencia", pues él es como un mar de conocimiento que aclara el misterio de la ciencia. También tiene otros títulos que se refieren a la paciencia, agradecimiento y orientación que cada uno indica las características de aquel sublime. Tanto por parte de padre como de madre tenía consanguinidad con el Mensajero de Dios (BP), ya que su padre fue el Imam Zain ul 'Abidin (P), hijo del Imam Husain (P), y su madre Shahr Banu, hija de Imam Hasan Muytaba (P).

 

Uno de los fieles compañeros del Profeta del Islam era Yaber ben Abdula Ansari. Un día fue a visitar al Imam Baquer. Estaba muy contento de visitar a aquel sublime. Su cuerpo estaba muy débil y sus ojos casi no veían pero su cara reflejaba alegría. Al observar al Imam Baquer dijo: "juro por el Dios de la Caaba, que esta cara que estoy viendo es la cara y el cuerpo del Hazrat Mohammad (saludos sean para él y sus descendientes). Gracias a Dios por darme la oportunidad de conocerte y date los saludos del Profeta de Dios. Un día, cuando estaba con el Profeta, me dijo: Yaber, tu vivirán hasta ver que una hija de mi familia que tendrá uno de los hijos de Husein. Su nombre será Mohammad, el que analiza la religión y luego será famoso como Baquer. Cuando lo veas, dale mis saludos".

 

La vida del Imam Baquer transcurrió en un periodo caracterizado por la extensión y la activación de las ciencias islámicas y en el que vivieron grandes sabios y jurisprudentes en el escenario de las hadices y la teología, pero el Imam Baquer entre ellos disfrutaba de un prestigio elevado. El Sheij Mofid, uno de los grandes sabios de finales del siglo IV y principios del siglo V, escribió: "los sobrevivientes de los grandes compañeros de los seguidores del Profeta y los jefes de los eruditos religiosos musulmanes han hablado sobre las actividades del Imam Baquer en los asuntos religiosos. Este Imam narraba a la gente los acontecimientos de sus antepasados, de los profetas y la tradición del Profeta Mohamad (P). La gente tenía confianza en él y lo consideraba un modelo a seguir. También era un referente sobre los ritos de peregrinación y la interpretación del Corán. Toda la gente narraba sus hadices y respetaba a su ciencia".

Todos los escritos tanto de chiíes como de suníes se refieren a este Imam por su título "Baquer" y "Baquer-al-Olum" por sus grandes conocimientos. Sin embargo, este nombre fue designado por el Profeta, según ha narrado Yaber –ben-Abdula Ansari, el Profeta dijo que Imam Baquer-al-Olum, significa el que analiza la ciencia de modo completo y perfecto.

Un gran erudito chií del siglo V, Sheij Tusi, dijo que el número de los alumnos destacados de aquel Hazrat era de 466 personas. El Imam Baquer en el terreno de los asuntos teológicos, era jurisprudente de los ulemas de la Meca. Muchos grandes jurisprudentes suníes, ante de él, eran como sus alumnos pues de él aprendían la ciencia. Su fama en la Meca era tal que lo llamaban Seyed de los jurisprudentes de la Meca (los grandes eruditos de la Meca).

El lugar especial del Imam Baquer en las ramas de las ciencias islámicas y su gran personalidad científica eran tan ilustres y destacadas que la presencia del Imam siempre era considerada por todos los eruditos de las tierras islámicas motivo para aprovechar de sus conocimientos. Muchos eruditos suníes han reconocido el carácter científico y su posición en esta área.

 

Uno de los grandes eruditos sunitas Zahabi, escribió: "El Imam Baquer era una de las personas que tenía honra y dignidad junto al mérito de califa".

El Imam Baquer también era famoso como el mejor comentarista del sagrado Corán, siempre reflejaba la interpretación correcta de las aleyas coránicas venciendo a los opositores. Él siempre para probar sus afirmaciones aprovechaba de las aleyas del Corán, ponía de testigo de sus palabras, las palabras de Dios. Decía: "Todo lo que ustedes me preguntan está en el Corán, yo solo les recito las aleyas concernientes". El Imam era tan hábil en la interpretación de las aleyas del Corán, que el poeta de su era Malik ibne Eain Yahani sobre él escribió: "si la gente busca conocer el Corán tiene que saber en Qoraish tiene a su mejor sabio y si el Imam Baquer habla sobre las ciencias coránicas, conocerán una gran cantidad de pequeños detalles".

 

Además, ayudar a los necesitados y oprimidos de la comunidad era el gran principio de la vida del Imam Baquer, pues, consideraba que ayudar a la gente a resolver sus problemas materiales y espirituales era una de las más importantes actividades sociales. El Imam, siempre estaba rodeado de gente a la que escuchaba y resolvía sus problemas. El Imam Sadiq (la paz sea con él), al respecto, dijo: "Un día estuve ante mi padre mientras que dividía 8 mil dinares entre los necesitados de Medina y liberaba a once esclavos". El Imam Baquer durante los días feriados, especialmente los viernes, se dedicaba a la caridad y a estudiar la situación de los necesitados, lo que animó a otros a realizar esta tarea. En otra narración, el Imam Sadiq afirmó que dar limosna los viernes sobresale entre los otros días de la semana. La sonrisa de un hombre a su hermano musulmán es muy agradable, y borrar la tristeza de su cara es propio de las personas buenas y Dios no quiere nada menos que alegrar el alma de un devoto.

 

El Imam Baquer se alegraba de hacer feliz a los demás y narró que su abuelo, el Hazrat Mohammad, había dicho que alguien que alegra a un devoto es como si me hubiese alegrado y la personas que me alegran han satisfecho al Señor. El Imam a veces bromeaba con la gente de su entorno con moderación y les provocaba alegría y estímulo. Decía: "Dios ama a las personas que bromean entre sí mientras su broma no esté mezclada con malas palabras".

El Imam Sadiq narró: "mi padre siempre estaba ocupado mencionando a Dios. Durante su comida mencionaba Dios. Cuando hablaba con la gente no olvidaba recordar a Dios. Y siempre decía No hay más Dios que Alá. En madrugada nos convocaba a orar hasta el amanecer. Para aquel grupo de familiar que sabía recitar el Corán le ordenaba recitar el Corán y al resto le recomendaba mencionar a Dios".

 

Uno de los sabios suníes Mohammad ben Monkader, citando al Imam Sadiq, dijo: No creía que Ali ibne Husein tuviera un hijo cuya ciencia y virtud sea igual a la de él, hasta cuando vi a Mohammad ibne Ali,... Hacía mucho calor, era el momento en que la temperatura estaba al máximo, me dirigí hacia los alrededores de Medina, en el camino vi a Mohammad ibne Ali, era un hombre fuerte. Estaba trabajando en campo. Me dije a mí mismo: un hombre de los grandes de Qoraish, en este clima caliente, ha salido para lograr su sustento en este mundo y luego va a predicar. Me acerqué y le dijo: Qué Dios arregle tu trabajo, que un grande de Qoraish, en este calor, ha salido de su casa para trabajar, si la muerte te encuentra ¿qué harás? Aquel Hazrat retirando la mano de los dos esclavos, se levantó y dijo: Juro por Dios si en este momento la muerte me encuentra, me moriré adorando a Dios porque este trabajo en medio de este calor hace que no necesite ayuda de hombres iguales a ti. Sí yo tengo miedo solo a morir en un estado y cuando esté en pecado. Entonces, le dije a aquel Hazrat, que Dios te bendiga, yo quería aconsejarte pero tú me has dado a mí un consejo.

 

Felicitamos el aniversario del nacimiento del sol brillante de la ciencia y la fe, el Hazrat Imam Mohammad Baquer a todos los chiíes del mundo.