Feb 01, 2020 04:55 UTC

ParsToday-La Revolución Islámica de Irán ya entra a sus 41 años de vida desde su victoria, una revolución que proviene del corazón de las clases sociales. Esta revolución se ha formado a base de las creencias nacionales y no aceptó mantenerse en silencio ante la arrogancia y la injusticia y su principal objetivo fue luchar contra la crueldad. Pero lo que conllevó a la movilización de la gente, fue el mensaje de Dios sobre la apertura de las puertas de la verdadera victoria y un panorama con un f

En los primeros días de la revolución, la aleya 11 de la Sura El Trueno del sagrado Corán se observaba en la mayoría de las consignas y anuncios: ´´Alá no cambiará la condición de un pueblo mientras éste no cambie lo que en sí tiene´´.
 
 
El pueblo entró en la escena para determinar su destino y marcó una gran revolución. Ellos entendieron este mensaje de Dios que, en cualquier siglo y época, la tradición divina se basa en que, en cualquier lugar que los oprimidos estén bajo dominio de los opresores, según la voluntad divina llegará un momento en que ellos saboreen el dulce sabor de la victoria de la justicia ante la injusticia y al final, se les otorgará la gobernanza y el liderazgo de la tierra.
 
 
´´Quisimos agraciar a los que habían sido humillados en el país y hacer de ellos jefes, hacer de ellos herederos´´. (Aleya 5 de la Sura El Relato).
 
Según algunos, esta aleya de la sura ´´El Relato´´ fue revelada en el año 11 en la Meca, después de la emigración, justo cuando los musulmanes estaban sufriendo duras torturas y molestias impuestas por parte de la tribu Quraish, así como, el asedio económico cuando fallecieron dos patrocinadores del gran profeta del Islam (P), Abu Talib y Jadiya. En estos días, el viaje propagandístico del profeta se enfrentó con el fracaso, porque los musulmanes sufrían la etapa más débil e insegura. Dios relata la historia de la crueldad del Faraón y la sublevación del Hazrat Musa (P), donde su desesperación se convierte en esperanza y mostrar que después de cada dificultad hay una viabilidad y la voluntad divina vencerá todas las voluntades. 
 
Muchas aleyas del sagrado Corán insisten en que probablemente en toda lucha pueden tener víctimas, pero al final no fracasarán y saldrán victoriosos. El sagrado Corán da esta buena nueva a todos aquellos que van en el camino de la resistencia.
 
Hoy en día, el mundo musulmán observa un brillante panorama ante sus ojos. Hoy, no solo la República Islámica se considera como un poderoso y estable gobierno en la región, sino que, los grandes enemigos y arrogantes que dominan todo el mundo, se sienten débiles ante los levantamientos de las naciones musulmanes y el despertar de los países islámicos.  Su camino está cerrado y eso demuestra la promesa divina que dice: ´´Quisimos agraciar a los que habían sido humillados en el país y hacer de ellos jefes, hacer de ellos herederos´´. (Aleya 5 de la Sura El Relato). Estas promesas divinas se cumplirán gradualmente en un futuro próximo, gracias al despertar y al movimiento de los musulmanes.
 
 
 
P/NA/NL
 

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