Ven con nosotros a Irán (194)
En el nombre de Dios Todopoderoso. Saludos a todos los estimados oyentes y a los interesados en el programa Ven con nosotros a Irán.
A continuación de las últimas ediciones donde les hemos presentado los diferentes lugares extraordinarios de Teherán, hoy les daremos a conocer el Palacio-Museo de Sad-abad. Los palacios cuyas puertas estaban cerradas al público antes de la victoria de la Revolución Islámica de Irán, es decir, durante más de medio siglo, después del triunfo de la revolución fueron abiertos al público y ya tiene la función de museo. Ahora, les invitamos a que por favor nos acompañen.
El gran complejo cultural-histórico de Sad-abad se encuentra en las estribaciones de Tochal, las montañas de Alborz, en el valle verde de Darband y en una parte agradable del norte de la ciudad de Teherán cuya superficie llega a 300 hectáreas. Sad-abad limita al norte con las montañas de Alborz, al este con Golab-darreh, al oeste con Welenyak, y al sur con Tayrish.
Los reyes de Qayar veraneaban en esta zona, pero después de que ocurriera el Golpe de Estado del año 1299 de la hégira solar (1920), se integró una gran superficie de los jardines a dicha residencia veraniega y fue destinado al Rey Pahlawi I. Ahí, fueron construidos con diferentes motivos otros 18 palacios pequeños en distintos lugares de esta residencia, que se encuentra cubierta de viejos árboles de álamos y cipreses. Cada uno de estos palacios que disponían de un gran espacio y grandes instalaciones de ocio tales como piscinas, campos de juegos y jardines, estaban a disposición de los familiares del régimen nefasto de Pahlawi. En este palacio-museo se observan muchas artesanías hechas por los persas y los europeos. Algunas de estas obras son obsequios regalados a Irán por los mandatarios de los diferentes países pero, la familia real de aquel entonces los había monopolizado.
Todo este complejo que se convirtió en un museo después de la victoria de la Revolución Islámica, cuenta con unas 180 hectáreas de bosques naturales, fuentes de agua, jardines, invernaderos, calles cubiertas de árboles y flores que junto con los múltiples edificios históricos han convertido a Sad-abad en una de las importantes y únicas atracciones turísticas en Teherán.
El jardín-museo de Sad-abad está cubierto de una variada vegetación tales como bosques naturales, diferentes especies de plantas ornamentales y exóticas. Este complejo también posee varias comodidades para el bienestar de los visitantes, como una biblioteca, el Centro de Documentos, la sala de Khaliy Fars (Golfo Pérsico), la sala del cine Mellat, el anfiteatro de Eivane Attar, la estación de radio local, una capilla general, la estación de salud y deporte, los talleres de recuperación de las obras y los objetos del museo y múltiples invernaderos, entre otros.
Lo que asocia cualquier visitante persa en la primera vista a los objetos que se encuentran en el palacio-museo de Sad-abad es el régimen nefasto de Pahlawi que saqueó los bienes culturales del país. Sin duda alguna, los regalos europeos han reemplazado muchas de las obras valiosas y preciosas persas que fueron saqueadas.
El palacio-museo de Sad-abad está lleno de distintas obras artísticas y objetos valiosos que brillan junto con las decoraciones de yeso y de espejo y las impresionantes alfombras persas tejidas a mano que crean un ámbito imponente. El Palacio Blanco y el Palacio Verde son los más destacados y gloriosos entre otros muchos palacios que se encuentran en el complejo cultural de Sad-abad. Y en esta oportunidad les contaremos sobre estos dos palacios.
El Palacio-museo de Mellat es el más amplio en el complejo de Sad-abad que debido a su color blanco fue conocido como la Casa Blanca. La fachada exterior del palacio es de mármol y tiene el estilo arquitectónico de los palacios alemanes. La arquitectura interior tiene el diseño persa-bizantino de cuatro columnas. El palacio tiene una superficie de 2.164 m2 y 5.000 en funciones y cuenta con dos plantas y un sótano. La decoración interna del palacio es una amalgama del arte persa-europeo. Las decoraciones de yeso que se encuentran en el techo se cuentan entre las más bellas y prototípicas artes originales persa. Además, las impresionantes alfombras ubicadas en los salones son únicas en su tipo y realzan al máximo el buen gusto y el arte de los tejedores de las alfombras persas. Las grandes salas ceremoniales del palacio están decoradas al estilo de las Casas Reales europeas de los siglos pasados, por lo cual muchas de las obras que se encuentran en él, han sido compradas a precios muy altos en las tiendas de antigüedades de Francia y en las subastas artísticas de Europa. El Palacio-Museo de Mellet fue abierto al público en 1981, manteniendo la forma original con sus decoraciones.
Shahwand, con piedras de color verde en su fachada, conocido como el Palacio-Museo Verde, es sin duda alguna una de las más gloriosas estructuras arquitectónicas que se encuentran en Irán. Las paredes exteriores de este palacio cuya superficie es de 1400 m2, están decoradas con hermosas piedras talladas. Comparándolo con otros palacios que se encuentran en el complejo de Sad-abad, se nota claramente que los hábiles ingenieros emplearon los principios de la arquitectura persa en esta mansión. Las decoraciones de yeso y de espejos, las marqueterías, los manuscritos ilustrados y los grabados con diferentes diseños empleados en este palacio, muestran la arquitectura tradicional y original persa que en su tipo es única en el mundo.
Uno de los rincones más bellos del Palacio-Museo Verde es la Sala de Espejo que aparece ante la vista de los visitantes al pasar por las escaleras de la entrada y es muy impresionante y deslumbrante. La sala dispone de una cúpula que desde el sócalo de la pared hasta final de ella, está decorada de una forma maestra con pequeños pedazos de espejos.
Otro de los lugares asombrosos del Palacio-Museo es el despacho de trabajo donde todas las paredes y los objetos que se encuentran allí están cubiertos con hermosas marqueterías muy finas. Todas las obras de las marqueterías de este despacho son el resultado del trabajo en grupo del maestro persa Sani Khatam y sus discípulos. Dado que construir una pequeña caja unida una al lado de la otra con distintas maderas pequeñas demanda muchas horas de trabajo y, a veces días y exige una labor constante, se revela la gran y la inmensa tarea que se ha llevado a cabo en este espacio. Además, las hermosas decoraciones de yeso y los manuscritos ilustrados de las paredes diseñados por el maestro persa Hossein Taher-zadehe Behzad, atrae la atención de cualquier visitante.
Las finas piezas que se encuentran en el Palacio-Museo Verde han sido adquiridas a altos precios y mayormente de los países europeos. Las lámparas, los cuadros de alto valor, los muebles que datan de la época de Luis XVI de Francia, junto a los relojes, los candeleros, los jarrones de bronce y también los diversos objetos de cristal, se cuentan entre las piezas de colección más preciadas que se encuentran en este palacio-museo.
Estimados oyentes, aquí terminamos el programa de hoy. En la próxima edición les presentaremos otros museos del complejo del palacio de Sad-abad. Ahora nos despedimos de todos ustedes hasta nuestra próxima edición.