E: Bueno queridos oyentes estamos de aniversario, el aniversario de la Revolución Islámica de Irán y, para abordar este tema, hemos invitado al analista internacional Pablo Jofre Leal, quien nos hablará desde Santiago de Chile.

La victoria de la Revolución Islámica de Irán en 1979 marcó un punto de inflexión en la historia política del país. Nació un nuevo sistema, que además de reforzar el papel de los ciudadanos en decisiones políticas, acabó con la intervención de las potencias mundiales en asuntos de Irán. La victoria de la Revolución Islámica de Irán, no solo no ha dado ni un paso atrás de sus posturas antiimperialistas, sino también ha respaldado a cualquier movimiento político independentista en el mundo. Señor Jofre Leal podría explicarnos cuál ha sido el impacto más importante en los 39 años de vida de la Revolución Islámica en el mundo.

JL: Es una fecha muy importante para ese país, para la nación persa. Son 39 años desde el triunfo de la revolución, desde el 1 de febrero cuando retorna en el año 1979 el ayatolá Jomeini a Irán desde el exilio en Francia hasta el 11 de febrero cuando, en esto que se denominó 'La Década del Alba', se desencadena una explosión popular, una revolución, que derroca definitivamente el régimen monárquico de los Palahvíes, el 11 de febrero. Desde esa fecha hasta ahora, indudablemente, han sido cuatro décadas de una gran influencia no solo un cambio radical respecto a la soberanía y la dignidad de Irán en cuanto a su manejo político, su manejo social y cultural, en su manejo de autodeterminación. Recordemos que Irán era un país, absolutamente, sometido a los deseos y los designios, principalmente, de Washington. El régimen de los Palahvíes era indudablemente cercano a EE.UU. y servía de gendarme de los poderes occidentales en Asia Central y en Oriente Medio. Desde ese triunfo se origina, por tanto, un país distinto, un país donde los conceptos de soberanía y dignidad se imponen. Un país (Irán) que además comienza a ser sometido a un cerco y una presión internacional, prueba de ello fue la guerra impuesta desde Irak, bajo el régimen de Sadam Husein, que implicaron ocho años de una guerra sangrienta de un país agredido, como Irán, a manos de las fuerzas iraquíes que eran apoyadas, avaladas, armadas y financiadas, precisamente, por el Occidente. Esa guerra significó una consolidación aún más fuerte de la revolución iraní, significó que, a pesar de lo dramático y el millón de muertos, consolidó esta revolución, y comienza así todo un tema de cómo consolidar la revolución en un contexto regional complicado, que se complica aún más a partir de la década de los y 90 cuando se invade Irak a manos de una coalición internacional, pero aún se complejiza más cuando en el año 2001 se generan los llamados atentados del 11 de septiembre de 2001, que va a originar la invasión de Afganistán, vecino de Irán, va a originar nuevamente la invasión de Irak, vecino de la República Islámica de Irán, y todo lo que se va a denominar la 'guerra contra el terror' por parte de EE.UU. y sus aliados que hasta el día de hoy tiene sometido en ocupación y con centenares de miles de muertos tanto a Afganistán como a Irak y que a partir del años 2011 se suman otros países a una larga lista de países a esta larga lista de países ocupados y agredidos, como es el caso de Siria, como es el caso del Magreb; en todo este entorno, en todo este contexto, Irán ha tenido una importancia fundamental a través del apoyo a gobiernos y sociedades que luchan contra el terrorismo takfirí, como es el caso de Siria, como es el caso de Irak, como es el caso al pueblo de Yemen, al pueblo de Bahréin, y sobre todo, al pueblo de Palestina, desde el año 1979, precisamente, bajo la determinación del Imam Jomeini se instaura el Día de Al-Quds, el Día de Jerusalén, como una muestra de apoyo sostenido de Irán a los derechos de autodeterminación del pueblo palestino.

Todo lo que podamos decir en estos 39 años de Revolución Islámica representa no solo la consolidación de un modelo al interior de Irán con todas las sanciones, presiones y embargos a los que ha sido sometido, incluso proceso se desestabilización que han tratado de aprovecharse de las legítimas  aspiraciones y deseos de la población en reclamos económicos, a pesar de todo ello, Irán ha sido capaz de sobrevivir y, al mismo tiempo, dar el apoyo a otras sociedades para consolidarse como sociedades, donde la soberanía y la dignidad existan como concepto, se mantiene. Creo que ha sido una influencia notable para el mundo, sobre todo, para la zona de Oriente Medio y Asia Central.

E: Sí, señor Jofre Leal, usted nos dice que prácticamente la revolución sigue viva en estas cuatro décadas, pero ¿cuál ha sido lo qué ha hecho que esta revolución tenga la supervivencia hasta la actualidad?

JL: No hay una revolución que sea capaz de sobrevivir si no está profundamente enraizada en el pueblo, en la sociedad. Puede haber diferencias, puede haber oposición, puede haber opiniones distintas, diferentes, diversas, puede haber alguien que quiere profundizar más ciertas líneas u otros que quieren que se avance menos rápido y otros más rápido, pero si tu lo cuentas dentro de las líneas generales de un país, con el apoyo social, respecto a lo que quiere, cuál es tu norte, cuál es tu objetivo, el respeto a sus autoridades políticas y religiosas, sobre todo, una noción de país, de nación, de sociedad, enraizadas en valores políticos, religiosos y morales, no puede sobrevivir, si eso no está claro, no hay  sobrevivencia posible, y creo que Irán, con todo lo que les he descrito anteriormente, respecto a la guerra santa de la década de los ochenta hasta el siglo pasado, las agresiones constantes por parte de Occidente y esta triada que se ha formado entre el sionismo, el imperialismo y el wahabismo, a pesar de eso y en un contexto aún más agresivo a partir del año 2011, si Irán no tuviese ese apoyo social, no tuviese claro sus objetivos de norte, lo que se pretende, no hay sociedad que resista, a pesar, recordemos muy bien, cómo Occidente trató de aprovechar el apoyo que Irán ha dado a sociedades como la de Siria, Irak y el pueblo palestino, tratando de presentarla como una especie de reclamo social, que la sociedad no quería eso, que quería solucionar su problema económico interno. Irán puede solucionar sus problemas, pero también necesita una profunda arraigante social, que la tiene, y que el resto de la sociedad internacional no solo comprenda sino que tenga la ética moral necesarias para dejar de presionar y cercar a Irán, si eso no se da, indudablemente, los países buscan alternativas distintas al resto de la comunidad internacional. Irán no ha pretendido eso, no lo ha hecho ni siquiera con su programa nuclear, un programa nuclear pacífico, que en junio de 2015, además, significó la firma de este Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA por sus siglas en inglés), que determinó que no se iba a enriquecer uranio, que iba a rebajar los niveles de centrífugas, que iba a ver inspecciones de la Organización Internacional de la Energía Atómica (AIEA). Qué sociedad puede dar esas garantías y, al mismo tiempo, apoyar a otras sociedades, resistir los embates del imperialismo, el sionismo, la casa Al Saud y su influencia en Oriente Medio, sin que tenga el apoyo de una base social fuerte y sostenida. Eso tiene que entenderse en el análisis internacional, lo tienen que entender los gobiernos occidentales, parte de ellos lo están entendiendo, creo que precisamente los países europeos del Grupo 5+1 han entendido que Irán tiene una profunda arraigante revolucionaria  y apoyo en el seno de su sociedad que le permite firmar esos acuerdos, resistir los embates y agresiones internacionales , sobre ello, apoyar y ayudar a otras sociedades.

E:  Así es señor Jofre Leal, muchísimas gracias por su análisis y datos históricos sobre esta gloriosa revolución.

Muchas gracias a ustedes y a los auditores de esta importante radio, que permite dar a conocer otras informaciones, no ser parte de la corriente ilógica y poco informativa del resto del mundo.