De modo que al principio del comunicado escribe: “Ahora, cuando comienza un nuevo capítulo de la vida de la República Islámica, a este humilde servidor le gustaría dirigir unas palabras a la juventud querida, a una generación que se prepara para comenzar una nueva etapa del gran Yihad (esfuerzo) por construir el gran Irán islámico”.

 

Los jóvenes son fuerzas enérgicas, talentosas y capaces de cualquier sociedad y dan forma al futuro del país. Por esta razón, los gobiernos prospectivos invierten para mejorar las capacidades de los jóvenes en diversos campos. El Líder de la Revolución Islámica, plenamente consciente del papel de la juventud en el desarrollo del país, siempre alienta a las autoridades a utilizar la enorme capacidad de su fuerza. En particular, desde el comienzo de la revolución, los jóvenes iraníes han demostrado que siempre cumplen con su responsabilidad de la mejor manera.

 

En el comunicado “El segundo paso de la Revolución”,  el Líder persa considera a los jóvenes como esperanzas de la Revolución y ofrece estadísticas para aclarar su gran capacidad para construir un claro futuro: “La capacidad más importante y esperanzadora del país son los recursos humanos, potentes y cualificados, que cuentan con una base profunda, noble y religiosa. … Con una población de 36 millones de habitantes con edades comprendidas entre los 15 y los 40 años; cerca de 14 millones de personas con una titulación de educación superior; ocupando el segundo lugar en el mundo por el número de graduados en ciencias e ingeniería; numerosos jóvenes criados bajo un espíritu revolucionario y listos para trabajar por Dios y por amor a su patria; y un gran número de jóvenes investigadores e intelectuales, que están trabajando para crear innovaciones científicas, culturales, industriales y de otro tipo, se suman a la enorme riqueza del país, que no se puede comparar con ninguna reserva material”, reza en el texto de dicho comunicado.

 

En otra parte, aunque se refiere a las enormes capacidades materiales y la posición estratégica de Irán como las fortalezas del país, hace un llamamiento a los jóvenes motivados, expertos y expertos como el principal capital del país, ya que el uso adecuado y óptimo de los recursos materiales se logre cuando sea gestionado por una fuerza humana eficiente, ingeniosa y prospectiva.

 

 Después de la Revolución Islámica de Irán, tuvo lugar una profunda transformación espiritual en muchas personas, especialmente en los jóvenes, y ha tenido un profundo impacto en la escena social. En alusión a esta transformación espiritual de los jóvenes, el Líder persa en su comunicado resalta: “El planteamiento de devoción y moral de la República Islámica atrajo a los corazones bien dispuestos y luminosos, especialmente de la juventud, y transformó el espacio haciéndolo favorable para la religión y la moral. Los esfuerzos de los jóvenes en campos tan difíciles como la Sagrada Defensa, acompañados con rezos y oraciones y con un espíritu de fraternidad y sacrificio, hicieron revivir las corrientes del surgimiento del Islam a ojos de todos”.

 

Los esfuerzos y los  sacrificios de la juventud musulmana iraní en defensa de su patria y su revolución fue la más bella y clara representación de su habilidad, coraje y sacrificio. Antes de la guerra impuesta por Saddam contra Irán, el Imam Jomeini (qué en paz descanse) ordenó la formación de la organización de Basich, con la mayoría jóvenes. Estos jóvenes apasionados y valientes asumían la mayor responsabilidad en la guerra y lucharon valientemente en condiciones difíciles y en batallas desiguales y protegieron su país y revolución con su martirio. Al final de la guerra, las fuerzas jóvenes y sinceras de Basich se dedicaron a trabajar en la construcción y el desarrollo de su país, y el proceso continúa.

 

Otro punto que el ayatolá Jamenei ha enfatizado en el comunicado “El segundo paso de la Revolución” es la necesidad de que los jóvenes de hoy estén al tanto de las experiencias revolucionarias pasadas para aplicarlas en el futuro. En ese texto, el Líder persa se refiere a varios avances de la República Islámica de Irán en los últimos 40 años y agrega: “El camino recorrido hasta ahora forma parte, simplemente, del glorioso camino hacia los elevados ideales de la República Islámica. El seguir por este camino, que probablemente no sea tan difícil como en el pasado, debe hacerse de forma voluntariosa, vigilantes, con rapidez a la hora de actuar y, a través de la innovación de ustedes, los jóvenes”.

 

En otras palabras, el Líder de la Revolución Islámica cree que la continuación del gran movimiento del pueblo iraní, pavimentado con los esfuerzos de otros, especialmente los jóvenes, depende en sí de ellos mismos. Por supuesto, argumenta, las personas revolucionarias y comprensivas que en el pasado llevaron la carga de la revolución, ahora deben compartir sus valiosas experiencias con la generación actual para que la revolución avance a un ritmo más rápido y con menos errores.

 

Sin embargo, los jóvenes, al poseer cualidades prominentes como la creatividad, el coraje, el empoderamiento y el idealismo, no pueden hacer un buen uso de sus capacidades hasta que tengan la motivación y la esperanza de construir un mejor mañana. Sabiendo esto, los enemigos del país y la revolución, recurriéndose a falas propagandas, están tratando de eliminar el espíritu de esperanza del joven iraní y entretenerlo con ilusiones.

 

El ayatolá Ali Jamenei, no obstante, consciente del papel destructivo de la desesperación en la moral y la motivación de los jóvenes, siempre les promete a ellos y a todas las personas un futuro brillante. Por esta razón, en su comunicado con motivo del 40 aniversario de la victoria de la Revolución Islámica, así explica su primera recomendación: “Antes que nada, mi primer consejo se refiere a la esperanza y tener una visión optimista del futuro. Sin este punto clave no se puede dar ni un solo paso. A lo que me refiero es a una esperanza auténtica basada en realidades palpables”.

 

Además, les responsabiliza de enfrentar con la invasión propagandística del enemigo para decepcionar a la generación joven y, hace este llamado: “Ustedes, los jóvenes, deben ser pioneros a la hora de romper este asedio propagandístico. Cultiven en su ser y en quienes les rodean la planta de la esperanza en el futuro. Alejen el miedo y la decepción de sí mismos y de los demás. Este es su primer y más importante Yihad (esfuerzo desinteresado)”.

 

 Los medios de comunicación occidentales también, al propagar entretenimientos falsos y dañinos y el estilo de vida occidental, se esfuerzan por alejar a los jóvenes iraníes de la espiritualidad, cultura y la ética islámica y decepcionarles de construir el futuro del país. Por esta razón, el Líder persa en su comunicado, ha advertido de este peligro así: “Los medios de comunicación de masas e influyentes suponen buenos instrumentos para los centros antiespiritualidad y antimoralidad. Hoy en día, contemplo cómo aumentan las agresiones de los enemigos contra menores y jóvenes inocentes, recurriendo al empleo de tales herramientas”.

 

El comunicado “El segundo paso de la Revolución” está dirigido a los jóvenes para explicar su responsabilidad de construir un Irán próspero y progresista. Por esta razón, el ayatolá Ali Jamenei insta a los jóvenes a participar en varios campos de Yihad. Sobre la continuación y expansión de los logros científicos afirma: “La primera piedra de una revolución científica en el país está puesta, y esa revolución ha dado mártires como los expertos en energía nuclear asesinados. Levántense y hagan fracasar a un enemigo malévolo y rencoroso que al que aterroriza su Yihad del esfuerzo científico”.

 

Otra recomendación del Líder se refiere a esforzarse para fortalecer el proceso del desarrollo económico y sobre todo la expansión de la justicia económica y social. El ayatolá Jamenei en su comunicado “El segundo paso de la Revolución” dice: “Les digo explícitamente a los queridos jóvenes, en quienes quedará depositado el futuro del país, que lo que se ha hecho hasta el momento no es todo lo que se debería haber hecho y se debería hacer. En la República Islámica los responsables deben esforzarse denodadamente por eliminar la pobreza y temer considerablemente al hecho de que aumenten las brechas económicas entre las capas sociales”.

 

De acuerdo con el ayatolá Jamenei, los jóvenes revolucionarios y fieles de Irán son capaces de asumir el pesado cargo de la construcción de un futuro brillante para el país y su revolución. Al respecto, escribe: “Los gerentes jóvenes, los jóvenes ejecutivos, los jóvenes pensadores, los jóvenes activistas en todos los campos —desde la política hasta la economía, la cultura, las relaciones internacionales, la religión, la ética, la espiritualidad y la justicia— deben asumir sus responsabilidades echando mano de las experiencias y lecciones aprendidas en el pasado, aplicando la visión y el espíritu revolucionarios y las acciones del Yihad para construir, partiendo de nuestro querido Irán, un modelo integral de un gobierno islámico avanzado”.

 

 P/NA/NL