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El Jardín- Museo Qasr (Palacio en español) está ubicado en Teherán y abierto al público desde hace unos años. Este hermoso jardín, que narra una historia de altibajos, era conocido anteriormente como "Prisión Qasr". Una prisión que albergó a muchos personajes famosos y, durante el reinado de Qayar, fue el palacio de los príncipes de esta dinastía persa, lo que originó que se conozca como "Palacio Qayarí".

 

Qasr o Palacio fue construido originalmente en 1790, durante el reinado de Fath Ali Shah de la dinastía Qayar (1797-1834) quien ordenó construirlo en la cima de una colina en Teherán (actualmente entre las avenidas Police y Seyed Jandan), junto a otros edificios menores a sus cuatro lados. Este hermoso palacio estaba ubicado entre jardines, arroyos y piscinas de agua y tenía una gran mansión que incluía interior y exterior, jardín y un Kolagh Farangi.

 

 

Tras la llegada de Naser al-Din Shah al poder y la construcción de varios palacios en la ciudad capitalina, se redujo la popularidad del Palacio Qayarí y fue usado como centro militar durante muchos años hasta que en 1929 (diciembre de 1308) se convirtió en prisión y fue bautizado como "Prisión de Qasr". Esta prisión funcionaba hasta 2003 (1382). Tras la decisión de cerrarla, el Municipio de Teherán reconstruyó este lugar y en 2012 (1391) lo convirtió en un Jardín-Museo. El Jardín-Museo Qasr es ahora un centro de ocio y de vida social y las puertas de sus diversas secciones están abiertas a los interesados ​​en la historia contemporánea.

 

 

La prisión de Qasr, que es la primera prisión centralizada y moderna en Teherán, fue diseñada por Nikolai Markov, un arquitecto georgiano y fue inaugurada en 1308. Además de la practicidad de la prisión, Markov ha intentado utilizar aspectos estéticos y artísticos en la arquitectura de la prisión. Una de las características arquitectónicas de este complejo es la construcción de varios Hashti (vestíbulo en arquitectura persa) que se pueden ver en todos los pasillos. En esta prisión no hay las criptas y cárceles espantosas narradas en la historia europea. Excepto unas pocas celdas solitarias, el resto de celdas tienen grandes ventanales con una luz adecuada. En la prisión, diseñada por Markov, existían Zur Khaneh (lugar del deporte antiguo iraní), clínicas, baños, mezquitas y talleres para la producción de artefactos y artesanías, que desaparecieron con el paso del tiempo. Inicialmente, la prisión con 192 habitaciones tuvo la capacidad de acoger a 800 presos. En los años siguientes, durante el reinado de segundo shah Pahlavi, la prisión Qasr se amplió considerablemente y se le agregaron varias secciones. Después de la Revolución Islámica de Irán, esta prisión se convirtió en un lugar de detención para presos no políticos.

 

 

La entrada del Jardín-Museo Qasr es ahora una gran puerta de metal que una vez fue reemplazada por una de madera. Cuando ingresamos al jardín del museo nos encontramos con un hermoso arroyo azul que termina en la mansión Markov. En el pasado este edificio era la prisión principal y tenía una superficie de unos 8800 metros cuadrados. En la actualidad, este lugar incluye diversos espacios como el centro de documentos, imágenes y objetos históricos, exposiciones, galerías de música, café-galería y salas de reuniones polivalentes. La prisión principal, o prisión de Markov, es un edificio en forma de rombo al que se le agregaron dos brazos durante el segundo período Pahlavi. Este patrón ha ayudado a que, desde solo cuatro torres de vigilancia, se puede cubrir y monitorear todas las diferentes partes de la prisión. Algunas de las salas de la prisión de Markov se han convertido en pabellones, que contienen documentos y reliquias de la historia contemporánea de Irán. Uno de los pabellones más interesantes es una celda en la que cuelgan del techo viejos auriculares, por los que se puede escuchar el decreto de Mozafar al-Din Shah Qayar con su propia voz.

 

En el exterior del edificio hay una exhibición de autos históricos, muchos de los cuales pertenecían a las celebridades y figuras políticas iraníes contemporáneas, y al lado de esta exhibición existe una sucursal del Café Loghanteh, el primer café en Irán del período Constitucional y que fue punto de encuentro de muchos políticos y pensadores. El Café Loghanteh tiene un ambiente histórico, por lo que podemos conocer una parte de la historia iraní contemporánea. Además, hay otro café al final de la mansión, conocido como el "Café Markov", donde se llevan a cabo siempre muchas exposiciones temporales.

 

 

 

La Galería del Jardín-Museo Qars también se encuentra en el edificio de Markov. Con una capacidad para exhibir 400 pinturas, la galería goza de una iluminación y diseño adecuados. Un poco más adelante, en el lado derecho del espacio exterior, se encuentra el edificio de la prisión política en un área de unos 5000 metros cuadrados, que narra la historia de la Revolución Islámica y sus luchadores. El edificio también consta de celdas, una biblioteca, un centro de estudios y un museo. Una de las partes interesantes de esta zona es un pasillo que conduce a la sala de visitas. En esta sección se transmiten las voces de los presos que se grabaron cuando se reunían con sus familias para hacer palpable el espíritu de esta sala y los dulces recuerdos de los presos con sus parientes.

 

Un avión ubicado en la zona de entrada al jardín, también llama la atención. Cabe mencionar que se trata del primer avión que voló en Irán. En 1913, durante el reinado de Ahmad Shah Qayar, un piloto polaco llamado Kozminski, con fines financieros, llevó las piezas de un avión modelo Blériot XI desde Rusia a Irán, en concreto al puerto de Anzali, situado en el norte de Irán. Posteriormente lo ensambló en Teherán con el fin de usarlo para realizar movimientos dramáticos y así voló el primer avión en Irán. El avión se encuentra ahora en el Jardín-Museo Qasr.

 

En el espacio trasero del Jardín-Museo está la mansión de Kolagh Farangi (quiosco), construido en el periodo de Qayar. La mansión tiene un plan octogonal regular y con techo y las paredes enlucidos con estuco.

 

 

 

Amigos estamos con ustedes en el programa Visitando los Museos de Irán. La prisión es conocida en todas las culturas y países del mundo como uno de los peores y más inapropiados espacios, donde el hombre es prisionero y está privado de la mayor bendición es decir la vida, la libertad. Además de delincuentes, también hay personas prominentes del mundo de la literatura y la política que han sido encarceladas solo por tener ideas y actividades políticas amantes de la libertad. La Prisión Qasr también ha sido testigo del encarcelamiento de muchas figuras revolucionarias y políticas. Entre ellas destacan el ayatolá Taleqani, Mahdavi Kani, Mohamad Taqi Shariati (padre de Ali Shariati), Akbar Hashemi Rafsanyani, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, Morteza Motahhari, Bahonar, Mohamad Yavad Tondgovian, Marzieh Dabaq y muchos nombres más, figuran entre los prisioneros revolucionarios que fueron detenidos en esta prisión durante algún tiempo debido a sus opiniones liberales y antiarrogantes durante el régimen de Pahlavi.

 

 

Además de los presos revolucionarios y políticos, la prisión Qasr albergó a muchos escritores y poetas encarcelados durante la primera y la segunda era Pahlavi por sus pensamientos, poemas y escritos políticos. Entre estos poetas y escritores, podemos mencionar a Bozorg Alavi, Mahmud Dolatabadi, Faroji Yazdi, Shamlu, Akavan Sales y otros. Estos eruditos también han creado valiosas obras durante su estancia en la prisión como el libro Kelidar de Mahmud Dolatabadi, quien completó este valioso libro durante su encarcelamiento.

 

Es interesante saber que un espía inglés también estuvo preso por un tiempo en la prisión Qasr y después alguien le ayudó y escapó. El prisionero fue Thomas Edward Lawrence. El nombre de Lawrence nos recuerda probablemente la fascinante y costosa película del mismo nombre, realizada en 1962 por David Lean. Sin embrago los familiarizados con los textos históricos, saben que Lawrence antes de ser el protagonista de una película de acción es un espía que incluso algunos le atribuyen el plan de Medio Oriente tras el colapso del imperio otomano y la creación de grandes y pequeños Estados árabes. Lawrenceque fue arrestado durante una operación en Urmia, y encarcelado en la prisión Qasr por un tiempo. Escapó de la prisión Qasr durante los disturbios del año 1930.

 

 

Amigos hemos llegado al final de esta parte de la serie "Visitando los Museos de Irán". Esperamos que le disfruten. 

 

 

 

 

P/FSH/NL