La libertad de reunión es una de las libertades sociales que faculta a un grupo de personas a reunirse libre y pacíficamente. gozar de diferentes pensamientos y creencias. No existe ningún obstáculo para su reunión. Se considera una libertad política y un derecho humano de primera generación.

En el programa de hoy queremos estudiar el caso de la libertad de reunión y manifestación pacífica como un derecho humano desde el punto de vista del Islam.

El derecho de la libertad de reunión es uno de los más importantes derechos que se ha reconocido oficialmente de forma amplia a nivel nacional, regional e internacional en diferentes documentos de los derechos humanos como uno de los derechos cívicos y políticos. Esta libertad hace capaces a los miembros de una sociedad para que se reúnan y pidan sus intereses comunes de forma masiva y los defiendan. La libertad de reunión puede realizarse a fin de seguir o alcanzar un objetivo común en los asuntos políticos, religiosos, económicos, sociales, deportivos, culturales o profesionales.

La reunión se dice al acto masivo de un grupo de personas que se reúnan por un corto plazo en un lugar y tiempo determinado para intercambiar su opinión, plantear sus problemas sociales y políticos, anunciar sus posturas, defender sus objetivos e intereses comunes y abastecer sus objetivos y fines. Y si esta reunión se realiza en un acto simbólico para atraer la atención del gobierno y del pueblo en las calles de diferentes ciudades del país, se denomina Manifestación.

La libertad de congregación es una de las libertades fundamentales para que la gente pueda reunirse de forma libre y pacíficamente y gozar de diferentes pensamientos y creencias sin existir ningún obstáculo al respecto.

La libertad de congregación y manifestación es uno de los símbolos de la democracia en la que el pueblo al presentarse conversa, y directamente en la sociedad puede hacer llegar su voz a los mandatarios del país sin ningún mediador.

Por eso, la libertad de congregación significa que cada persona para anunciar sus opiniones, tiene derecho de celebrar una manifestación en un lugar y tiempo determinado con unas personas concordantes con ella desde el punto de vista de pensamiento y creencia. Esta congregación puede conllevar la celebración de diferentes discursos, reuniones y conferencias y concluir con la emisión de comunicados consistentes en reglamentos o recomendaciones generales.

Estas congregaciones son temporales y después de manifestar la opinión de los participantes, la reunión se finaliza y las personas se dispersan. También, estas se celebran con anuncio previo a fin de informarse de los pensamientos de los demás y tienen un orden especial. Finalmente, estas reuniones tienen un objetivo especial y determinado.

Lo importante al respecto es que el objetivo de la libertad de congregación es el derecho de la libertad de una congregación pacífica y este derecho no consiste unas congregaciones con objetivos violentos y no pacíficos.

El derecho de la libertad de reunión se ha reconocido oficialmente en diferentes fuentes de los derechos humanos entre ellas, se puede aludir a los tratados y documentos sobre derechos humanos. Los documentos que se han aprobado en organismos nacionales e internacionales, han reconocido oficialmente este derecho como un derecho humano y lo han apoyado de forma amplia. El Comunicado Mundial de los Derechos Humanos de la Asamblea General de la ONU aprobado en el año 1984, en su vigésimo artículo dice: cada persona en la sociedad tiene derecho de gozar de la libertad de reunión pacífica.

El Tratado Internacional de los derechos cívicos y políticos de la Asamblea General de la ONU aprobado el 16 de diciembre de 1966, en su artículo número 21, insiste en que el derecho de la libertad de  congregaciones pacíficas, se ha reconocido oficialmente y esta medida no obedece ninguna limitación excepto que sea contrario a los intereses o la seguridad general y nacional del país. Los documentos regionales de los derechos humanos también han aceptado claramente el derecho de la libertad de la celebración de congregaciones pacíficas.

En los periodos anteriores, el Islam se esforzaba mucho por la salvación de las personas y luchaba seriamente contra el esclavismo que se consideraba el mayor problema complicado del ser humano en la antigüedad. Esta religión divina eligió un tratamiento lógico y gradual para esta enfermedad antigua y basándose en la justicia y grandeza humana e insistiendo en el principio de la hermandad e igualdad, fundó el sistema humano y nuevo mundial y se esforzó por la salvación y liberación de las personas y consideró iguales a todos los miembros de una sociedad; después, negó los privilegios raciales y tribales y consideró a todas las personas de una única raíz humana. El Islam insistió en que el ser humano se ha creado de la tierra y ninguna persona tiene superioridad en la otra, excepto que tenga unas características especiales humanas. Esta religión divina regaló la libertad de pensamiento a todas las personas. Enfatizó en la participación de todos los miembros de una sociedad en diferentes asuntos como el principio fundamental de la estructura política de un gobierno islámico e insistió muy seriamente en el principio de la libertad de pensamiento y creencia de todos y creó diferentes libertades personales y generales en diferentes terrenos. 

El derecho de la libertad de reunión no se vincula a los actuales gobiernos islámicos sino que, desde el principio del surgimiento del Islam existían algunos actos en el Islam que demostraba la importancia que da esta religión a unos asuntos como congregaciones generales. Entre ellos, se puede mencionar la reunión política, religiosa y social del rezo colectivo del viernes, la gran congregación de Haj (peregrinación), y diferentes círculos religiosos y espirituales que existían desde hace muchos años. Estas congregaciones, conllevan muchos provechos políticos, sociales y religiosos para la gente. Por otra parte, siempre se respeta las congregaciones de los opositores al gobierno islámico y no hay que insultarlas.

Las libertades de los ciudadanos siempre se enfrentan con limitaciones y obstáculos; ya que, algunos elementos como improperios a la grandeza de las personas, el respeto a los derechos y libertades de los demás y la prohibición del caos en la sociedad pueden provocar limitaciones en libertades personales y generales de los ciudadanos. Por eso, el derecho de la celebración de diferentes congregaciones puede enfrentarse con unas limitaciones. Con base en los reglamentos de los derechos humanos, el mantenimiento de la seguridad o el orden y salud general de la sociedad, son algunos de los reglamentos para la celebración o la prohibición de algunas congregaciones.

Según lo dicho, se puede decir que las limitaciones legales y lógicas de los derechos humanos contienen los intereses de los ciudadanos no  provechos del gobierno ni los gobernadores. Lo que puede provocar limitaciones en la celebración de una congregación, es poner en peligro la seguridad física de los participantes u otros ciudadanos no el temor de la crítica al gobierno.