Mar 20, 2016 20:30 UTC

Uno de los asuntos que actualmente ha atraído la atención de la mayoría de los científicos, es el caso de la tranquilidad y la seguridad mental de las personas.

Seguramente ustedes también han pensado en este asunto, porqué en la actualidad, dadas las posibilidades materiales y de bienestar suficiente que existen a disposición del ser humano, ¿aun la mayoría de las personas no están satisfechas con su vida?

Los psicólogos consideran que el aumento de la preocupación, depresión y la insatisfacción interior, son los índices claros de esta época. Según ellos, la vida se ha hecho violenta y ha perdido su exquisitez. Se ha reducido el sentimiento del placer verdadero entre el pueblo y la mayoría de las personas, especialmente en las sociedades industrializadas; duermen con la ayuda de medicamentos somníferos. Por esta misma razón, hay que decir que actualmente, con la mayor complicidad de la vida personal, social y el aumento del nivel de estrés entre las personas, aumenta más la necesidad de atender los asuntos psicológicos y sentimentales.

Hay que confesar que a pesar de los progresos materiales e interesantes, aun no se ha suministrado los principios de la salud mental de las personas.

Hace unos años, en la década de los 80, un investigador norteamericano llamado Mayers escribió sobre la sociedad occidental así:

Ningún siglo ha tenido tanta bendición material, tecnológica e industrial, sin embargo en ningún siglo, el medio ambiente ha sido destruido así. Ninguna cultura ha experimentado tanta depresión. En ningún período, por un lado la tecnología ha regalado esta tranquilidad y bienestar, por otro tantos instrumentos horribles para la amplitud de la corrupción y la destrucción. Actualmente, nosotros gozamos de muchas posibilidades educativas, pero observamos un alto nivel de desesperanza y suicidio entre adolescentes y jóvenes.

Queridos oyentes, nosotros en estos programas nos esforzaremos por hablarles sobre la salud mental con una visión religiosa. Al utilizar los últimos estudios e investigaciones realizadas en el terreno de la salud mental, describimos las capacidades de la religión para conceder un ejemplo correcto a la vida. Esperamos que nos ayuden a través de sus opiniones al respecto.

Ha han dado muchos significados para la salud mental y las vías del tratamiento de enfermedades espirituales. Así como también para las religiones divinas y diferentes movimientos filosóficos.

Los líderes religiosos han explicado de una forma diferente el caso de la salud mental y lo han estudiado desde diferentes marcos intelectuales.

Según la Organización de la Salud Mundial, la salud mental significa la capacidad del establecimiento de una relación adecuada con los demás, la capacidad de cambiar y hacer reformas en el ambiente personal y social y la solución de las discrepancias; y también, cambiar las tendencias personales de una forma favorable y adecuada.

Dadas estas definiciones completas y globales, entendemos que la salud mental es muy eficaz en la vida de las personas. Tener objetivos buenos junto con un esfuerzo continuo, y alcanzar éxitos en diferentes terrenos de la vida, solamente se pueden obtener a través de un espíritu sano. La salud mental y espiritual eleva el nivel de la satisfacción de la vida y esto, deja una influencia obvia en la reducción de las preocupaciones mentales y psicológicas de las personas. Actualmente, cada día que pasa, aumenta el número de personas que piensa que la espiritualidad, trata las preocupaciones y depresiones existentes. Actualmente, el ser humano con una visión abierta, ha llegado a esta conclusión, que sin la espiritualidad, uno se queda solo y sufre una vida sin interés.

Aunque en el pasado, algunos psicológicos no conocían oficialmente el papel de la religión y las enseñanzas religiosas en el mantenimiento de la salud mental, pero actualmente la mayoría de los expertos ha confesado sobre la influencia de la religión y sus enseñanzas en la salud mental. Considera que la mayoría de sus hallazgos científicos en el terreno de la salud mental, concuerda con las recomendaciones religiosas. A este respecto, es necesario aludir a la experiencia del psiquiatra y psicólogo suizo, Carl Jung.

Él escribe así: en todos los enfermos que vi en la segunda mitad de mi vida, llegué a la conclusión que ellos sufren problemas por no tener una visión adecuada sobre la vida. Seguramente se puede decir que todos ellos sentían una profunda enfermedad, porque habían perdido lo que las religiones divinas de cada época, entregan a sus seguidores.

Ninguno de ellos, obtuvo una salud completa antes de tener una visión religiosa verdadera sobre la vida.

Actualmente, algunas investigaciones realizadas en el terreno de la influencia espiritual en la elevación del nivel de la salud mental, se realizan en unas sociedades, donde se ha reducido la presencia de la religión y enseñanzas religiosas. Los psicólogos en dichas sociedades piensan que es necesario creer profundamente en la existencia de valores elevados y un poder elevado. Ellos consideran que es muy eficaz y útil usar los asuntos religiosos para enfrentar la preocupación y depresión.