Jun 12, 2017 07:51 UTC

En el nombre de Dios, todopoderoso. Saludos cordiales estimados oyentes de la Voz Exterior de la República Islámica de Irán. Estamos con ustedes con otro programa más de la serie de artículos titulados “Derechos Humanos Islámicos”.

ueridos oyentes, tal como comentamos en los programas anteriores, el sistema jurídico del Islam ha atendido seriamente las relaciones sociales entre las personas y ha determinado deberes y derechos entre ellos. Muy claramente se puede decir que, a excepción de los derechos y deberes islámicos, ningún documento de derechos humanos ha atendido tan minuciosamente los derechos de los miembros de una sociedad; ya que solamente han explicado una parte de los derechos primarios de las personas lejos de los valores morales, humanos y sentimentales sin atender a las responsabilidades de cada ser humano.

 
El sistema jurídico del Islam no solo ha determinado deberes y derechos en el ámbito de los derechos personales y sociales, sino que interviene también en el ámbito familiar. La familia se considera uno de los centros importantes sociales teniendo como base a los padres.
 
Entre los lazos familiares y los miembros de la familia, nadie es más cercano y más amable que los padres. Por ende, el  valor y la consideracion para con ellos es mucho más que con cualquier miembro de la familia. Por otra parte, todo el mundo conoce el papel vital y valioso de los padres en el desarrollo de sus hijos, tanto físico como intelectual, pues ellos,  a base de esfuerzos y sacrificios sacan adelante a sus hijos para que puedan obtener un puesto y si es posible en una posición elevada, los hijos no deben olvidar los apuros y problemas que sus progenitores han tenido en el transcurso de su crecimiento, ellos  deben darles el debido valor a sus padres. La religión celestial del Islam ha atendido seriamente el papel de los padres en la familia y los clérigos religiosos islámicos también tienen múltiples recomendaciones al respecto.
 
En cuatro suras del sagrado Corán, se ha aludido a la bondad hacia los padres seguidamente  del caso del conocimiento de Dios. La simultaneidad de estos dos asuntos demuestra que el Islam considera relevante el valor de los padres. La importancia de este asunto es tal, que tanto, el sagrado Corán como los imames y grandes clérigos religiosos, en sus narraciones recomiendan muy claramente a los musulmanes, respetar a los padres incluso si son ateos u opositores.
 
Los hijos, aun cuando se esfuercen por respetar y ser bondadosos con sus progenitores, nunca podrán recompensar sus amabilidades en este mundo. Pero de todas formas, tienen que esforzarse por apoyarles especialmente en su vejez; además, deben considerarles como una bendición por parte de Dios y utilizar esta oportunidad para ayudarles.
 
Un hombre preguntó al gran profeta del Islam (saludos sean para él y sus descendientes): mis padres se han hecho viejos y necesitan mi ayuda. Pues, yo me comporto como ellos lo  hacían cuando era niño, es decir: cuando quieren comer, pongo la comida en su boca, cuando quieren descansar, les ayudo y les narro una historia, cuando quieren cambiar su ropa, les ayudo a cambiarse e incluso cuando quieren ir al baño, les ayudo y los limpio; en realidad, los trato como si fueran niños. Ahora, con mi comportamiento, ¿he podido recompensar sus amabilidades? Aquel Hazrat dijo: no, ya que ellos hacían todo eso por ti con amor y amabilidad mientras esperaban y veían tu crecimiento y desarrollo como persona, pero tú, te comportas bien. Sin embargo, esperas su muerte.
 
Arbaiin Soleimani, ha narrado que los padres tienen ochenta derechos en sus hijos: cuarenta derechos durante su vida y cuarenta derechos después de su muerte. Pero, de los cuarenta derechos en su vida: diez de ellos se vinculan al cuerpo, diez al lenguaje, diez al corazón y diez a su riqueza.
 
Los diez derechos de los padres en cuanto al cuerpo y que los hijos deben de cumplir son: tienen que servirles, deben respetarles en el interior y fuera de casa, no deben sentarse dándoles la espalda a ellos, deben obedecer sus órdenes, siempre y cuando, no vayan en contra de los principios religiosos, si hacen ayuno, tiene que ser con concentimiento propio, no deben ir a viajes no obligatorios sin la autorización de los padres, tienen que levantarse cuando ellos entran a la casa y no deben sentarse hasta que ellos no se hayan sentado, cuando vayan juntos, deben caminar detrás de ellos, siempre tienen que mirarles con amabilidad y finalmente, deben estar preparados para atenderles.
 
Y los diez derechos de expresión  ante los padres son: los hijos no deben dirigirse a los padres con descortesía, no deben alzarles la voz, no deben ofenderles, no deben llamarles por su nombre, no tienen que interrumpirlos cuando hablan, no deben obligarles a hacer algo, no tienen que gritarles, no deben desatenderles y finalmente, tienen que comportarse con ellos cortésmente.
 
Los derechos del corazón respecto a los padres también son: los hijos siempre tienen que ser amables con sus padres, siempre deben amarles aunque piensen que no se lo merecen. También, deben amar a los amigos de sus padres.
 
El Hazrat Mohamad (saludos sean para él y sus descendientes) dice: los hijos tienen que guardar las amistades de su padre y si las cortan, Dios apaga la luz de sus ojos. Además deben continuar las buenas costumbres de sus padres como dar comida a los pobres y celebrar ceremonias de luto. También, tienen que sentirse alegres con sus alegrías y deben sentirse tristes con sus tristezas. No tienen que convertir a sus enemigos en sus amigos. No deben molestarse por su comportamiento duro. No tienen que enojarse por su opresión y si les castigan, los hijos deben besar sus manos. Siempre en su corazón tienen que solicitar su satisfacción y no molestarse. En su corazón, deben pedir a Dios larga vida para ellos aunque sean pobres y enfermos.
 
Y los diez derechos de los bienes de los hijos ante sus padres son: los hijos tienen que comprar lo mejor para ellos, deben darles una buena comida, tienen que pagar sus deudas, deben solventar los gastos de sus viajes tanto obligatorios como no obligatorios. Si han muerto y tienen rezo o ayuno, deben encargarse de ello. Si no tienen vivienda, tienen que proporcionarles una, ya sea comprada o alquilada, deben poner su riqueza a su disposición en tiempos de necesidad. Tienen que hacerse cargo de los asuntos de ellos como, los gastos médicos,  gastos administrativos, reparar su vivienda o pagar sus gastos. Con su riqueza tienen que darles grandeza. Deben poner sus bienes a disposición, para cubrir las necesidades de sus progenitores.
 
Respetar los derechos de los padres, no solamente se refiere cuando se encuentren en vida sino, también, después de la muerte, los hijos deben considerar este respeto como un gran deber. Algunas veces, la persona en el periodo de vida de sus padres es bondadosa con ellos, pero después de su muerte, los olvida, no realiza sus obligaciones y no solicita el perdón del Creador del mundo; entonces, Dios no perdona a esta persona en el otro mundo. Pero, si una persona durante la vida de sus padres no se comportó bien, sin embargo, cuando mueren, paga sus deudas y pide perdón al Creador del mundo; entonces, Dios les considera como bondadosos a sus padres.
 
En el programa siguiente, les hablaremos detalladamente en torno a los derechos de los padres después de su muerte.