Pars Today - Los medios de comunicación y los círculos políticos aún se dedican a las políticas hostiles de Estados Unidos contra Irán.

Los funcionarios estadounidenses que, sin ninguna justificación y al contrario de todos los estándares internacionales, se salieron del acuerdo nuclear y reanudaron sus injustificadas sanciones contra Irán. La semana pasada volvieron a alegar que estaban listos para una conversación sin condición previa con la República Islámica.

En reiteradas ocasiones, la República Islámica ha demostrado en práctica que está a favor del diálogo y la lógica, y si acepta una obligación, la cumple, pero EE.UU. tiene un comportamiento de doble moral, y la voluntad para negociar, justo en el momento de reanudar las sanciones contra Irán, es un acto para desviar la opinión pública de los desafíos de la Casa Blanca.

Recientemente, un grupo de activistas culturales fuera del país se reunió con el Líder Supremo de la Revolución Islámica de Irán, el Ayatolá seyed Ali Jamenei, uno de los participantes expresó las inquietudes y las preocupación de los entusiastas de la revolución islámica al otro lado de las fronteras.

El Líder Supremo de la Revolución Islámica, en respuesta a la preocupación de esta persona respecto a las acciones de los enemigos, afirmó: "No se preocupen para nada por nuestra situación, nadie puede cometer ningún error, estén seguros, no hay ninguna duda al respecto, cuéntele esto a todos".

Los legisladores en Estados Unidos piensan que pueden hacer rendir a los iraníes y obligarlos a aceptar sus demandas a través de imponer presión contra el país. La base de esta creencia tiene raíz en la historia y la cultura estadounidenses, así como por su incapacidad de comprender las opiniones de países extranjeros. Pero esta es una creencia muy falsa.

El canciller de la República Islámica de Irán, Mohmad Yavad Zarif, enfatizó que las sanciones, las amenazas y los trucos propagandísticos son en vano y dijo que Estados Unidos solo podría culparse a sí mismo por salirse del acuerdo nuclear y abandonar la mesa de negociaciones.

El ministro iraní de Asuntos Exteriores aconsejó a los estadounidenses a respetar a los persas y sus obligaciones internacionales.

El analista de asuntos políticos, Stephen Collinson, en un análisis sobre el comportamiento de Estados Unidos dice que la propuesta de Trump a Irán tiene como objetivo desviar la opinión pública de los desafíos de la Casa Blanca, y se esfuerza por cambiar esta situación con mensajes duros y contradictorios contra el país persa.

En una entrevista con la cadena televisiva CNN desde Washington, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, destacó la actual situación de Irán.

Según el analista ruso, Alexander Mosesov, Washington espera el mensaje de Irán sobre su disposición para dialogar y renunciar a la aplicación de sanciones contra Irán.

Washington ha declarado en repetidas ocasiones que está listo para negociar con Teherán, en caso de que el gobierno iraní haga cambios significativos e irreversibles. Teherán, en respuesta, ha declarado que el pueblo iraní no se arrodillará ante nadie. El propósito del gobierno de Trump de reforzar estas sanciones contra Irán es intensificar la crisis económica y como consecuencia, las protestas en Irán. Según las autoridades estadounidenses, los iraníes deben levantarse y crear un cambio en el sistema desde adentro.

El ex analista de asuntos del oeste de Asia en la CIA, Paul Pillar, considera errónea la idea de algunos gobernadores estadounidenses, basada en que Irán se rendirá ante las presiones.

Según Pillar, el país norteño ahora tiene menos influencia que el pasado, y tras la retirada de este país del acuerdo nuclear, es EE.UU el país que se ha aislado y no Irán.

Los actos de Washington en la política exterior han demostrado que la confianza en dicha administración, especialmente en la nueva administración de este país, es inaceptable. Los estadounidenses nunca han querido corregir sus errores del pasado.

La política regional de Irán es clara y transparente. Teherán está interesado en mantener la seguridad y la estabilidad en la región y ha luchado contra el grupo terrorista Daesh y el extremismo.

El presidente de la República Islámica de Irán, Hasan Rohani, dice que la actitud del gobierno de Washington en estos años ha sido de tal modo que hoy es reconocido como poco confiable en el mundo que no cumple con ninguna de sus obligaciones.

El pasado miércoles, Hasan Rohani, en una reunión con el ministro de Relaciones Exteriores de Corea del Norte, Ri Yong-ho, en Teherán, afirmó que Irán desea el establecimiento de la paz y la seguridad en la región de la península coreana y declaró que los avatares en esta zona son importantes para Teherán.

El representante de Irán ante las organizaciones internacionales en Viena, Kazem Qaribabadi, durante una reunión con el presidente del Grupo de los 77 (países en vías de desarrollo), Carlos Játiva, se refirió sobre este punto y dijo: " El gobierno de Trump en esta política está completamente aislado y la comunidad internacional ha desafiado seriamente sus acciones unilaterales, junto con Irán.

El fortalecimiento de las organizaciones internacionales para hacer frente a las acciones unilaterales se ha convertido en una necesidad, e Irán, en este marco, subraya la importancia del multilateralismo y el importante papel que pueden desempeñar, en particular del grupo 77 y el Movimiento de los países No Alineados, en este campo.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tras la salida de algunos pactos internacionales y el acuerdo nuclear, se esfuerza por imponer el unilateralismo y una seria confrontación con el multilateralismo. Estas políticas han llevado al mundo a una crisis e inseguridad a largo plazo, con sus efectos en Asia occidental, la península de Corea y el continente africano.

Los recientes acontecimientos en la región, así como a nivel internacional, muestran que el unilateralismo, la tiranía absoluta y la falta de participación en las instituciones mundiales son una amenaza no solo para Irán, sino también para todos los países.

Desafortunadamente, algunos regímenes corruptos y opresivos en la región han tomado el camino equivocado para alinearse con Estados Unidos y han provocado inseguridad en la zona al desencadenar guerras subsidiarias. En este sentido, las acciones de Arabia Saudí son preocupantes. Mientras que el régimen de Al Saud se ha convertido en una fuente de apoyo al extremismo y propagación del terrorismo en la región, la semana pasada abusó de la reunión de la Organización de Cooperación Islámica (OCI)  para acusar a Irán de provocar inseguridad.

Mientras tanto, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Bahram Qasemi, rechazó la declaración de 11 artículos de la reunión de los representantes permanentes de la OCI en Yedda, y condenó duramente las acusaciones contra la República Islámica de Irán.

Bahram Qasemi declaró que los representantes de la República Islámica de Irán no pueden asistir en las reuniones de la Organización de Cooperación Islámica en Yedda, porque no obtienen los visados de Arabia Saudí, por lo que tales comunicados se preparan y publican de manera desigual y unilateral.

El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores agregó que los países agresivos a Yemen, que son responsables de la crisis humanitaria en los recientes años y los asesinatos diarios de los indefensos yemeníes debido a la compra de las más avanzadas armas y la devastación de las infraestructuras del país, recurren a la emisión de tales comunicados sin valor y mecanismos regionales e internacionales para tapar sus crímenes y desviar la opinión pública de la región y el mundo.

La emisión de tales declaraciones con el nombre de la OCI,  abusar de la credibilidad de este organismo, crear desconfianza entre sus miembros, malgastar los fondos y las capacidades de los estados miembros, conlleva la ineficacia en los principales problemas que afectan al mundo islámico y debilita a esta organización internacional.

En lugar de apoyar al pueblo palestino, Arabia Saudí busca garantizar los intereses de Israel.

Naser Abu Sharif, representante del Movimiento de la Yihad Islámica palestina en Irán, en una reunión que se llevó a cabo en Teherán, afirmó que Estados Unidos y el régimen sionista y algunos gobernantes regionales presionan a los palestinos para que renuncien a sus objetivos reales, como el regreso de los refugiados a sus tierras.

Estados Unidos busca eliminar los derechos del pueblo palestino. El plan estadounidense del "acuerdo del siglo" es una de las cadenas de esta conspiración centrada en el sagrado Al-Quds, cuya ejecución es la entrega a los sionistas; los refugiados en otros países no tendrán derecho a regresar y Palestina solo será propietaria de las tierras restantes de Cisjordania y la Franja de Gaza.