En este programa, se analiza el derecho al aborto en los derechos humanos islámicos y occidentales.

En el nombre y recuerdo de Dios y con saludos a todos ustedes estimados oyentes, en los programas anteriores hablamos sobre la vida y la prohibición determinante de quitar la vida en el margen del suicidio y asesinato de los demás. El asesinato de seres humanos es un acto prohibido según la razón y las enseñanzas de las religiones divinas. Sin embargo, hoy en día a veces bajo el lema de la libertad, las personas matan a un ser en pleno desarrollo.

El asesinato de un niño causa más dolor en el corazón de toda persona. Nadie puede ver el cuerpo sin vida de un niño. Pero en estos días no son pocos los datos que muestran que incluso los padres matan a sus hijos inocentes antes de que exhalen su primer suspiro en el mundo, privándoles del derecho a la vida. Dios ha prohibido el asesinato pero ha recalcado el caso de asesinato de niños y se lo ha recordado a su Profeta. En la aleya 151 de la sura Los Rebaños dice:

Di: « ¡Venid, que os recitaré lo que vuestro Señor os ha prohibido: que Le asociéis nada! ¡Sed buenos con vuestros padres, no matéis a vuestros hijos por miedo de empobreceros -ya os proveeremos Nosotros, y a ellos,- alejaos de las deshonestidades, públicas o secretas, no matéis a nadie que Alá haya prohibido, sino con justo motivo ¡Esto os ha ordenado Él. Quizás, así, razonéis».

El infanticidio es un caso absurdo que ha existido desde mucho tiempo entre las comunidades ignorantes. Algunas tribus en la era de ignorancia mataban a sus hijas porque pensaban que si ocurría una guerra podrían ser tomadas como sirvientas y consideraban esto como una mancha a su honor. El Corán en la aleya 58 de sura Las abejas dice:

Cuando se le anuncia a uno de ellos una niña, se queda hosco y se angustia.

A veces también mataban a sus niños cuando no podían proporcionarles el alimento, en particular en tiempos de sequía y pobreza.

En este caso el sagrado Corán en la aleya 151 de la sura Los Rebaños dice:

Di: « ¡Venid, que os recitaré lo que vuestro Señor os ha prohibido: que Le asociéis nada! ¡Sed buenos con vuestros padres, no matéis a vuestros hijos por miedo de empobreceros -ya os proveeremos Nosotros, y a ellos,- alejaos de las deshonestidades, públicas o secretas, no matéis a nadie que Alá haya prohibido, sino con justo motivo ¡Esto os ha ordenado Él. Quizás, así, razonéis».

Asimismo, en ese tiempo, de vez en cuando, sacrificaban a los niños ante los ídolos, y eso también está prohibido en el sagrado Corán. En la aleya 140 de la sura Los Rebaños dice:

Saldrán perdiendo quienes, sin conocimiento, maten a sus hijos tontamente y que, inventando contra Alá, prohíban aquello de que Alá les ha proveído. Están extraviados, no están bien dirigidos.

La prohibición del asesinato de niños es una importante condición que debe considerar en todo caso un buen creyente, como Dios en la aleya 12 de la sura La examinada le dijo a su último Enviado:

¡Profeta! Cuando las creyentes vengan a ti a prestarte juramento de fidelidad, de que no asociarán nada a Alá, que no robarán, que no fornicarán, que no matarán a sus hijos, que no dirán calumnia forjada entre sus manos y pies, que no te desobedecerán en lo que se juzgue razonable, acepta su juramento y pide a Alá que les perdone. Alá es indulgente, misericordioso.

El Islam condena enérgicamente el acto de los impíos que mataban a sus niñas por vergüenza o pobreza. Además el Islam considera prohibido el aborto excepto en casos especiales. Según las enseñanzas islámicas, el aborto es ilícito (Haram) ya que la vida es un don sagrado de Dios. Así, sólo puede ser tolerado por motivos médicos: grave peligro para la madre y estado de desarrollo del feto. Para los musulmanes existe una frontera clara entre la concepción y el momento de “insuflación del alma” o comienzo de la vida. Antes de este momento, el feto está en estado embrionario. Este periodo, según los distintos hadith oscila entre 40 y los 120 días. Para abortar en este periodo embrionario deben existir razones validadas por los expertos juristas. A partir de ese momento, el aborto sería considerado un infanticidio. El Corán lo tipifica como un gran pecado. Dios en la aleya 31 de la sura El viaje nocturno dice:

 ¡No matéis a vuestros hijos por miedo a empobreceros! Somos Nosotros Quienes les proveemos, y a vosotros también. Matarles es un gran pecado.

La palabra aborto proviene del término latino (abortus), ab: privación, y ortus: nacimiento. Su traducción sería: sin nacimiento. Por lo tanto, el aborto es la interrupción del desarrollo del embrión durante el embarazo, cuando aún no ha alcanzado la madurez fetal, o capacidad suficiente para vivir fuera del útero. El aborto puede provocarlo la misma madre, golpeándose o tomando pastillas, o lo puede practicar un médico u otras personas que estimulan la caída del feto, poniendo en grave peligro la vida y salud de la madre por las condiciones no apropiadas.

Lamentablemente hoy en día veamos que cada año se practican millones de abortos. La mayoría de los abortos se hacen porque la gente libre de nuestra era desea disfrutar de la libertad sexual en su vida. Hace años que el aborto es uno de los problemas de las comunidades modernas. Este asunto es discutido como una solución a embarazos no deseos. La muerte de cientos de mujeres embarazas en todo del mundo por los abortos que se realizan en condiciones inadecuadas y por personas inexpertas se ha convertido en un problema social y ha dejado serias secuelas en la salud de muchas mujeres.

Según el punto de vista de los feministas, el aborto es el derecho de toda mujer que como un ser humano domina su físico y vida y, por tanto, al controlar su cuerpo tienen derecho legal a abortar. Pero en realidad el feto no es parte del cuerpo de la madre sino es un ser humano perfectamente digno y honorable pero prematuro que se alberga en su útero. Así en el Corán, en la lengua árabe, se llama feto “haml” y a la madre se le denomina “hameleh”.

Desde el punto de vista del Islam, la vida del ser humano se considera desde que es un feto, incluso antes de ser un embrión. Además, el Islam enfatiza que el feto es una persona con potencial y con talento y con capacidad para emprender las etapas de la perfección humana al igual que todas las otras personas, por tanto, tiene derecho a la vida. Así que quitar la vida por medio del aborto en casos que no son excepcionales es un pecado y quien ha cometido este delito merece penas porque la existencia humana comienza con la unión de dos células y destruir esta concepción en cualquier etapa, de acuerdo con la aleya 32 de la sura La mesa Servida, se considera la aniquilación de la humanidad.

Por esta razón, prescribimos a los Hijos de Israel que quien matara a una persona que no hubiera matado a nadie ni corrompido en la tierra, fuera como si hubiera matado a toda la Humanidad. Y que quien salvara una vida, fuera como si hubiera salvado las vidas de toda la Humanidad. Nuestros enviados vinieron a ellos con las pruebas claras, pero, a pesar de ellas, muchos cometieron excesos en la tierra.

Por supuesto, el aborto está prohibido en el Islam, pero se puede realizar, según algunos estudiosos islámicos, en circunstancias especiales. Cuando es seguro que la vida del feto pone en riesgo la vida de la madre, el aborto es permitido. Además, en caso de escoger entre el feto o la madre, el aborto es permitido. Algunos investigadores creen que incluso si existe la posibilidad de que el feto presente alguna malformación que provocará graves dificultades para los padres, es admisible el aborto.

Estimados oyentes en este y los programas anteriores hablamos sobre el Islam y su especial atención a la protección de la vida y la prohibición de la privación de la vida propia y de los demás. Ahora, según las estrictas reglas del Islam, por qué algunos delitos contra la vida son castigados con la privación de la vida y la ejecución? En el próximo programa responderemos a esta pregunta.