Pars Today

 La Revolución Islámica y el sistema de la República Islámica de Irán, desde el principio, han perseguido objetivos e ideales valiosos, uno de los cuales ha sido resistir ante los opresores y defender a los oprimidos.

 

El rechazo a cualquier hegemonía y sumisión, el apoyo a la independencia y la libertad, y el imperio de un Estado de derecho para todo el mundo forman parte de las políticas fijas que ya se han institucionalizado en la República Islámica.

 

En este sentido, la Revolución Islámica iraní se convirtió en un inicio para del Despertar Islámico entre las naciones musulmanas.

 

Ahora y en su segundo paso al cumplirse cuatro décadas de su triunfo, la Revolución Islámica ha demostrado e institucionalizado el poderío y la influencia del Frente de la Resistencia en el destino de los pueblos oprimidos de la región, así como la impotencia y el declive del régimen usurpador israelí.

 

En ese punto de inflexión histórico, el Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, emitió el 11 de febrero de 2019 la importante “Declaración del Segundo Paso de la Revolución”, donde expuso los logros impresionantes de las últimas cuatro décadas ofreciendo consejos fundamentales para lanzar una “gran yihad (esfuerzo) o lucha santa para construir el gran Irán islámico”.

 

Esta declaración traza, de hecho, la senda de un brillante futuro para Irán y una estrategia a largo plazo para entrar en la “segunda etapa del autodesarrollo, el procesamiento de la sociedad y el fomento de la civilización”, que marcará el “nuevo capítulo de la vida de la República Islámica”.

 

En este segundo paso, no solo no se menoscabarán los valores e ideales revolucionarios, sino que se pondrá énfasis en dar un fuerte seguimiento a las valiosas metas y aspiraciones de la Revolución Islámica.

 

De conformidad con los artículos 152 y 154 de la Constitución de la República Islámica, “defender los derechos de todos los musulmanes” y el apoyo a la “lucha legítima de los oprimidos contra los arrogantes en cualquier parte del mundo”" es una responsabilidad que, en el área de la política exterior, recae sobre el país.

 

El apoyo tanto material como espiritual al pueblo palestino es la segunda característica más importante de la política exterior persa con respecto a Palestina, en lo que los responsables y el pueblo de Irán han insistido reiteradamente.

 

El Líder de la Revolución, el ayatolá Jamenei, ha dicho al respecto que el pueblo iraní considera los problemas del pueblo oprimido y valiente palestino como los suyos y hace todo lo que pueda para resolverlos.

 

De acuerdo con la Carta Magna iraní, los objetivos de la política exterior se fundamentan en claros principios al respecto, entre ellos el énfasis en la defensa de los derechos de los musulmanes; el apoyo a los oprimidos ante los arrogantes y el respaldo a los movimientos de liberación, lo que está destacado en los artículos constitucionales.

 

Estos principios indican que el Irán islámico se siente en la obligación de respaldar a las naciones oprimidas y de no guardar silencio frente a la opresión contra otros, especialmente los musulmanes.

 

En este contexto y en un discurso pronunciado en la cumbre de la Conferencia Internacional de Apoyo a la Intifada Palestina en Teherán, el Líder de la Revolución recordó que aquellos que crearon al régimen sionista en la región con el fin de imponer un conflicto de largo plazo para impedir el establecimiento de la paz y estabilidad y el progreso en estas altitudes, ahora también están detrás de las sediciones existentes.

 

La situación actual en la región demuestra que Estados Unidos y los sionistas buscan hacer creer al mundo que los palestinos son unos refugiados que tienen que vivir de cualquier manera sin tener tierra alguna. Esto explica tildar a la Resistencia de terrorismo y el largo esfuerzo por normalizar la sumisión y la transigencia.

 

Hoy en día, no solo el pueblo de Irán, sino también los musulmanes e incluso los pueblos libres del mundo condenan los crímenes del régimen israelí, expresan su repudio a los líderes malvados y criminales de Israel y reclaman el ejercicio de los derechos del pueblo oprimido palestino.

 

La República Islámica ha tratado de presentar estrategias efectivas, teniendo en cuenta sus puntos fuertes, tales como defender los derechos de las naciones oprimidas, rechazar cualquier agresión y condenar cualquier guerra agresiva y la ocupación. El apoyo de Irán a los derechos de la población palestina y, en consecuencia, la consolidación de la paz y la seguridad en la región, ha estado basado en los mismos enfoques.

 

El Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Jamenei, hizo referencia en un discurso al esfuerzo de los enemigos para enfrentarse con los musulmanes, sobre todo en la cuestión palestina  y señaló: “En la actualidad, los estadounidenses  han denominado su política  satánica  con respecto a Palestina como ‘auerdo del siglo’, pero  deben saber  que, con ayuda de Dios, este acuerdo nunca se materializará y, a pesar de los dirigentes norteamericanos, la causa palestina nunca será olvidada, y Al-Quds (Jerusalén) quedará la capital de Palestina”.

 

Un experto iraní en asuntos palestinos dice sobre los objetivos de EE.UU. al promover el denominado ‘acuerdo del siglo’: “Israel busca destruir el derecho de la repatriación de los palestinos, y Arabia Saudí y Estados Unidos buscan lo mismo”.

 

El hecho de que de Trump haya tomado la iniciativa en esto indica que el objetivo del sionismo mundial es alterar la identidad islámica de la tierra palestina y Al Quds (Jerusalén).

 

La ocupación de los territorios palestinos por parte de Israel y los crímenes de este régimen contra los pueblos palestino y libanés a lo largo de los años pasados, han tenido el apoyo total de Washington y Tel Aviv. En su primera toma de posición, Trump planteó el tema del traslado de la embajada de EE.UU. de Tel Aviv a Al Quds (Jerusalén).

 

Tal medida no solo podría escalar la crisis y la inestabilidad en la región de Asia Occidental sino que en la práctica significaría distanciarse de la idea de crear un Estado palestino independiente.  Teniendo en cuenta todas estas realidades, la República Islámica sostiene que hogaño, la cuestión palestina encabeza todos los asuntos políticos de la comunidad islámica y que todos están obligados a esforzarse por la salvación del pueblo palestino.

 

En todas las etapas de la lucha de los palestinos contra los ocupadores sionistas, la República Islámica ha apoyado a la Resistencia palestina y ha participado en su creación y en el fortalecimiento de sus capacidades.

 

La política de la República Islámica de declarar el último viernes del mes de Ramadán de cada año como el Día Mundial de Al-Quds siempre ha sido para respaldar al pueblo oprimido palestino, la estabilidad y la seguridad de la región y condenar las acciones divisionistas y unilaterales de EE.UU. y el régimen israelí.

 

En abril de 2018 y en respuesta a la carta de Ismail Haniyeh, jefe del Buró Político del Movimiento de Resistencia Islámica Palestina (HAMAS), quien agradeció el apoyo de la nación iraní a los derechos del pueblo palestino, el Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Jamenei, insistió en la posición habitual de la República Islámica en apoyo total a Palestina y dijo lo siguiente:

 

 “Nunca se puede olvidar la cuestión palestina y el destino de un pueblo cuyos derechos han sido pisoteados y que ha sido desplazado de su patria por fuerza.  Hoy, la Resistencia en comparación con el pasado, disfruta de una alta capacidad ante los agresores, resiste ante Israel y nunca permitirá que el régimen sionista logre sus nefastos objetivos”.

 

En la delicada situación actual, el respaldo a los derechos inalienables de los palestinos oprimidos y desplazados y el apoyo total a ellos para desalojar a los agresores sionistas de todos los territorios palestinos y lograr la autodeterminación representan una responsabilidad religiosa y nacional para los países islámicos.  Este gran movimiento sin duda determinará el destino de Palestina en el marco de la  causa de este pueblo.

 

P/FE/NL