El viernes 25 de diciembre coincidió con el feliz natalicio de Jesucristo (la paz sea con él).

 

El cumpleaños de Jesucristo es un día feliz en Irán y en el mundo. Jesucristo (la paz sea con él), como un gran profeta es respetado por todos los musulmanes y las religiones divinas, y teniendo rasgos como el amor y la clemencia, posee valores humanos, espirituales y morales para toda la humanidad.

 

El Islam y el cristianismo son dos misiones religiosas celestiales. Traen mensajes de amor, convivencia, paz y cariño.  Como confirmó la Torá, el libro sagrado de los judíos, Jesucristo dio la buena nueva de que “después de mí, vendrá un mensajero, de nombre Ahmad, el Hazrat Muhamad (la paz sea con él), el gran profeta del Islam”.

 

El mensaje de Jesús (la paz sea con él) es el de sabiduría y misericordia. Dado que una de las misiones más importantes de los profetas ha sido defender los derechos de los oprimidos, los musulmanes y cristianos se sienten obligados a eliminar la opresión y contrarrestar la Arrogancia y el colonialismo mundiales siguiendo las enseñanzas religiosas, y reclaman la liberación de los pueblos del mundo de la tiranía.

 

En un mensaje, publicado en idioma inglés vía Twitter, el Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, felicitó la Navidad a todos los cristianos de Irán y del mundo, en particular a los compatriotas cristianos.

 

A su vez, el presidente iraní Hasan Rohani transmitió mensajes de felicitación de la Navidad a los jefes de Estado de los países del mundo, y expresó su confianza en que el hombre de hoy, especialmente los seguidores de todas las religiones celestiales, valiéndose de las elevadas enseñanzas de los profetas divinos y siguiendo su camino y sus costumbres, puedan encontrar una vía hacia la perfección humana.

 

 

El domingo 20 de diciembre, varios cohetes Katiusha impactaron en la Zona Verde, en la capital de Irak, Bagdad, donde se ubican los principales organismos de gobierno y embajadas, incluida la de EE.UU.

 

 

Tras ese ataque sospechoso y desde su cuenta de Twitter, el presidente norteamericano, Donald Trump, acusó a Irán de estar detrás de la agresión con misiles contra la misión diplomática de EE.UU. en Bagdad, sin ofrecer prueba alguna y solo compartiendo una foto de unos cohetes no identificados.

 

Como reacción, el canciller iraní, Mohamad Yavad Zarif, dijo que Trump usa una foto sin valor para acusar a Teherán.

 

“La última vez, Estados Unidos destruyó nuestra región debido a la supuesta fabricación de armas de destrucción masiva, gastando siete billones de dólares y cobrando 58 976 vidas estadounidenses”, tuiteó zarif

 

Advirtió que un ataque estadounidense podría provocar un conflicto en la región “mucho peor” que la guerra en Irak, y prometió que el jefe de la Casa Blanca “asumirá toda la responsabilidad de cualquier aventurerismo en los últimos días de su trabajo”.

 

El reciente ataque con cohetes contra la Zona Verde de Bagdad se inscribe en el marco de los esfuerzos para desestabilizar Irak.

 

Funcionarios y comandantes de las Unidades de Movilización Popular de Irak (Al-Hashad Al-Shabi, en árabe) han calificado de sospechosos estos ataques, argumentando que tales embestidas son planificadas por los propios estadounidenses para justificar de alguna manera el mantenimiento de sus tropas en el país árabe.

 

Ha pasado casi un año desde que el Parlamento iraquí aprobara una resolución exigiendo la retirada de soldados estadounidenses del país.

 

La presencia de una fuerza tan poderosa como Al-Hashad Al-Shabi y de otros grupos de Resistencia islámica y su alta capacidad, no gustan a Washington ni a sus aliados regionales, ya que quitan la excusa a los estadounidenses redoblando la necesidad de su retiro de Irak.

 

Obviamente, tales comentarios y acusaciones repetitivas, infundadas y falsas pueden evaluarse en el marco de juegos de culpas habituales de la Casa Blanca y están destinados a opacar las muy difíciles condiciones en las que se encuentra Trump.

 

Invitado por el secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán, el asesor de Seguridad Nacional afgano Hamdulá Moheb realizó una visita a Teherán el 22 de diciembre, donde se encontró con las autoridades locales.

 

La cooperación en los sectores político, económico y de seguridad, la celebración de la comisión conjunta de los dos países y el seguimiento a otros proyectos, sobre todo la cooperación en el campo del agua, fueron algunos de los temas abordados en las pláticas del visitante afgano con las autoridades persas.

 

Durante este viaje, Moheb ofreció un informe sobre los últimos acontecimientos relacionados con las negociaciones de paz en su país y apreció las posturas de la República Islámica en apoyo al Gobierno y el pueblo de Afganistán.

 

En el encuentro con su homólogo afgano, el contraalmirante Ali Shamjani, secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional (CSSN) de Irán, aludió a las amenazas e intereses comunes de Irán y Afganistán en diversas cuestiones, sobre todo el problema de la propagación del terrorismo y la necesidad de asentar la estabilidad y la seguridad en la región, para luego reiterar el firme apoyo de Teherán al Gobierno legal de Afganistán y destacar la necesidad de aumentar la cooperación e interacción entre ambos vecinos en distintos aspectos político, económico y de seguridad.

 

Shamjani también advirtió sobre la expansión de las actividades del grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) en Afganistán y los riesgos que suponen para el pueblo de este país y de otros países de la región, enfatizando la vigilancia, cooperación y esfuerzos conjuntos de todos los Estados para repeler por completo la maldad de este tumor cancerígeno.

 

 

Shahin Mustafayev, viceprimer ministro de la República de Azerbaiyán, fue la segunda autoridad de países vecinos de Irán, quien la semana pasada discutió la agenda bilateral y los asuntos regionales durante su visita a Teherán.

 

En sus reuniones con funcionarios iraníes, el viceprimer ministro azerí consideró las relaciones Bakú-Teherán y el pleno apoyo de Irán a su país como una fuente de aliento para el pueblo y el Gobierno de Azerbaiyán y agradeció las posturas de principio de la República Islámica en el conflicto de Nagorno-Karabaj.

 

Ahora, con la finalización de la guerra de Nagorno-Karabaj, las empresas técnicas y de ingeniería iraníes, considerando su gran capacidad y experiencia adecuada, están dispuestas a participar en la reconstrucción de las zonas dañadas por la contienda en Azerbaiyán. Ambos vecinos pronto firmarán un documento de cooperación en este sentido.

 

El 16 de diciembre, se produjo la reunión informal y por vía telemática de los ministros de Asuntos Exteriores de Irán y del Grupo 4+1 (Alemania, Francia, el Reino Unido, Rusia y China) y con la presencia de Joseph Borrell, el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, al término de la cual se emitió un comunicado conjunto donde reafirmaron su compromiso de mantener vivo el acuerdo nuclear iraní, de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), además de insistir en que la Resolución 2231 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas de 2015 es totalmente vinculante.

 

Con el fin de aplicar cabalmente el JCPOA, Teherán ha tenido la mayor cooperación con la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) al permitir los accesos de monitoreo de la misma al más alto nivel. Sin embargo, el JCPOA es un acuerdo multilateral que debe implementarse de manera bilateral, y no puede ser renegociado con demandas unilaterales.

 

El canciller iraní, Mohamad Yavad Zarif, tuiteó que si EE.UU. y los tres países europeos (E3) socios del JCPOA cumplen con sus compromisos en virtud del mismo, Irán revertirá rápidamente las medidas correctivas en respuesta a la retirada ilegal de EE.UU. y las violaciones flagrantes del E3.

 

 

 

P/FE/RH