Mar 11, 2016 10:57 UTC

En este programa a continuación del programa anterior seguimos revisando el proceso de formación de la Declaración Universal de Derechos Humanos occidental.

Estimados oyentes en el programa anterior dijimos que los sucesos horribles de la primera y segunda guerra mundial obligaron a la opinión pública mundial a darse cuenta seriamente del concepto derechos humanos. Porque, según este concepto, el principio de igualdad de dignidad humana carece de raza, lengua, religión, sexo, y otras características, asimismo, el principio de solidaridad puede crear el terreno para la paz, la empatía y fraternidad entre las diferentes naciones del mundo. En este sentido se aprobó la Declaración Universal de los DD.HH y después el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. Después de este periodo también se aprobaron diferentes convenciones con el objetivo de apoyar a los grupos vulnerables como mujeres, niños, refugiados, obreros, entre otros. Con la adopción y el desarrollo de pactos y convenciones internacionales al respecto, el terreno de los derechos humanos se hizo más sólido. Aunque la Declaración Universal de los Derechos Humanos plantea una misión global para promover los derechos humanos, en los diferentes continentes se han realizado diversos movimientos para mantener y elevar los derechos humanos. El movimiento regional de derechos humanos no puede contrariar la misión de la Declaración Universal de DD.HH y, según su lógica, como la realización y el pleno ejercicio de los principios de la Declaración Universal todavía no son posibles a nivel global, al menos deben concretarse a nivel regional. La regionalización de este movimiento se puede observar en Europa, Estados Unidos, África y Asia.

En Europa, existen dos instituciones, el "Consejo de Europa" y la "Comunidad Económica de Europa", que avanzaron sus actividades durante largo tiempo de modo paralelo, hasta que finalmente se unieron. El Consejo de Europa es una institución internacional establecida en virtud de un acuerdo pactado el 5 de mayo de 1949 en Londres que está formado por los países que tienen un concepto común sobre los principios fundamentales en los que se basa la civilización europea, y el objetivo de su formación, después de la segunda guerra mundial, era luchar contra las amenazas comunistas. Hasta ahora se han emitido más de un centenar de convenciones bajo el auspicio del Consejo de Europa, uno de estos es el "Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales" o conocido como la "Convenio Europea para los DD.HH. suscrito en Roma el 4 de noviembre de 1950 que en términos de contenido y estilo es un documento de supervisión importante. Esta convención entró en vigor el 3 de septiembre de 1953 y tiene por objeto proteger los derechos humanos y las libertades fundamentales de las personas sometidas a la jurisdicción de los Estados miembros, y permite un control judicial del respeto de dichos derechos individuales.

Por otro lado también es notable el papel de la Comunidad Económica de Europa en el reino de los derechos humanos. En dos tratados impulsados por esta entidad, el de París (1951) y el de Roma (1957) más allá del objetivo económico, se destaca el deseo de mejorar las condiciones de vida y de trabajo de las personas. Asimismo, el respeto de los derechos humanos es la condición inevitable de la membresía de cada gobierno a la dicha comunidad económica.

El Parlamento Europeo repetidas veces ha puesto en su agenda el apoyo a los derechos humanos y, en este sentido, ha aprobado diversos comunicados sobre diversos asuntos generales y puntuales, como asuntos laborales. En el Acta Única Europea, firmada entre el 17 y el 18 de febrero de 1986 señala en su preámbulo, que todos los 12 países miembros están decididos a elevar la democracia junto a los derechos fundamentales reconocidos en las constituciones y leyes de los Estados miembros, el Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales, la Carta Social Europea, especialmente, en el terreno de la libertad, igualdad, y la justicia social. A continuación de la promulgación del Acta Única Europea, el Consejo de Europa aprobó en diciembre de 1989 la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea.

En América también se realizaron diferentes medidas encaminadas a restaurar el concepto de los derechos humanos y promover su elevación. En la conferencia de Bogotá, celebrada en el año 1948 se firmó la carta fundacional de la Organización de los Estados Americanos (OEA) y la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre, este documento era simplemente una recomendación sin validez legal. Esta declaración difiere de la Convención Americana sobre Derechos Humanos aprobada en 1969 y entró en vigencia el 18 de julio de 1978 en una conferencia de la OEA celebrada en San José de Costa Rica. Este documento es una declaración detallada que se ha convertido en la base del sistema interamericano de promoción y protección de los derechos humanos. Sin embargo, considerando la situación no desarrollada de los países suramericanos, no parece realista. Esta convención pone mucho cuidado a los derechos civiles y políticos y considera que el enfoque preventivo favorece el desarrollo económico, social y cultural, mientras que el desarrollo progresivo de los derechos humanos depende del grado de progreso y las posibilidades de cada país. En 1978, los Estados partes en la Convención Americana sobre Derechos Humanos adicionaron el Protocolo Adicional a la Convención Americana sobre Derechos Humanos, conocido como "Protocolo de San Salvador" que consta de 22 artículos, que principalmente abarcan los derechos sociales.

África siempre ha estado asociada con la liberación del colonialismo pero lejos de la promoción y protección de los derechos humanos. La carta de la fundación de la Organización para la Unidad Africana adoptada en el año 1963 en Addis Abeba se centra en el derecho de la lucha libre determinación contra el colonialismo y la discriminación racial. Sin embargo se observa un cambio con la emisión de la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos que incluye una visión colectiva y unida sobre los derechos humanos. Esta carta fue adoptada por unanimidad el 12 de junio de 1981 en la Asamblea General de la Organización para la Unidad Africana —en la actualidad reemplazada por la Unión Africana— y entró en vigor el 12 de octubre de 1986 y, hasta el final del año 1989, 35 países africanos la habían suscrito.

La Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos abarca algunos derechos especiales de la Declaración Universal de los DDHH de 1948, pero tiene varios atributos específicos. En este documento recobra importancia el derecho al desarrollo como un requisito previo para el respeto de los derechos políticos y civiles. Este asunto dejó malos efectos en el continente africano. De hecho, el ejercicio directo de la teoría de desarrollo es en el terreno de los derechos humanos. Además, de manera concisa atiende los derechos económicos sociales y culturales.

En Asia, continente que alberga la mayor población del mundo y cuenta con una variedad cultural, con el apoyo de los ritos e ideas antiguas, la situación de los derechos humanos tiene una situación especial respecto a las otras regiones. Sin embargo, sobre los diversos problemas en torno al respeto de los derechos y las libertades humanas en esta región no se ha logrado un éxito importante en la definición de normas jurídicas comunes y la creación de mecanismos de supervisión regional entre los países llamados del Este y Oeste de Asia.

De todas formas no se pueden ignorar algunos logros resultados a niveles subregionales. Por ejemplo, los países del sudeste de Asia, en el marco de la a Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), han adoptado documentos comunes sobre los derechos humanos y, para dar seguimiento a dichos documentos, han creado los mecanismos especiales.

Asimismo, el grupo de países conocidos SAARC (Asociación para la Cooperación Regional del Sur de Asia) ratificaron los documentos conjuntos en materia de derechos humanos ratificado y han aprobado otros documentos comunes sobre derechos humanos que consideran necesarios.

En la región del Pacífico también se han adoptado documentos en materia de derechos humanos entre los países de la región. Los Estados miembros de la Liga Árabe, la mayoría de ellos se encuentran entre los países asiáticos que han adoptado el documento conjunto "La Carta Árabe de Derechos Humanos" y que se considera el más importante de la zona.

Además de las actividades dentro de cada región geográfica para la formación de normas y mecanismos regionales con el objetivo de promocionar los derechos humanos adoptados en las Naciones Unidas a fin de atender las necesidades de cada región en términos culturales, económicos, religiosos, entre otros, un aspecto importante es que debe tomarse en cuenta la posibilidad de la realización efectiva de las normas universales de derechos humanos, las medidas en forma de resoluciones de la Asamblea General o la Comisión de Derechos Humanos y del Consejo de Derechos Humanos sobre los "acuerdos regionales para promover y proteger los derechos humanos", sobre todo en la región de Asia Pacífico.

La promoción de los conceptos universales de derechos humanos sobre la base de la filosofía y la visión occidental y la promoción y la propaganda para la globalización de estas ideas a fin de que sean adoptados por todos los gobiernos, incluidos los del mundo del Islam, pese a que algunos difieren de los principios islámicos, dio lugar a diversos enfoques que finalmente desembocaron en el desarrollo de la Declaración Islámica de Derechos Humanos, que en próximo programa estudiaremos.