Ago 15, 2017 07:52 UTC

En este programa se estudian las diferencias y las principales características de los partidos de extrema derecha de Europa.

Con saludos cordiales a todos ustedes estimados oyentes de la Voz Exterior de la República Islámica de Irán, estamos a su servicio con la séptima parte de la serie “El crecimiento de la extrema derecha y la  islamofobia en Europa”. En el programa anterior  abordamos la oposición de los partidos de extrema derecha europeos con la convergencia en la Unión Europea como una características de estos partidos ultraderechistas.
 
 
Los partidos de extrema derecha de Europa siguen tres líneas: oposición completa, acuerdo condicionado y  reconciliación. En el primer caso, de la oposición completa, aunque los partidos de extrema derecha están de acuerdo que a los países de este continente los une elementos históricos, culturales y religiosos comunes, se oponen a la cooperación en el marco de la Unión Europea, de ahí que  las estructuras institucionales y políticas se resistan a la formación de una comunidad política común. Su objetivo principal es el cambio de poder a favor de la restauración de la soberanía de los gobiernos y naciones, el retorno de la soberanía de las instituciones nacionales y su rechazo a un solo sistema dominante. En el segundo caso, acuerdo condicionado, se plantean temas como la herencia común de los europeos y la aceptación de los principios de cooperación pero se oponen a las políticas actuales y también a la estructura presente de la Unión Europea. En general, sus defensores critican las políticas y las instituciones de gobierno de Europa y piden la cooperación entre los países del continente hasta donde los institutos ultranacionales no provoquen el derrumbe de la soberanía propia de los gobiernos. En el tercer caso, de la  reconciliación, los partidos de derechas están de acuerdo con una cultura común europea y apoyan los métodos básicos de la convergencia pero rechazan la creación de una unidad política europea.  En este espacio, los partidos radicales creen que la convergencia europea necesariamente no es buena idea, aunque algunas de sus dimensiones pueden favorecer a los gobiernos. Si bien, algunos grupos de extrema derecha mencionan la existencia de elementos comunes de identidad y cultura en las comunidades europeas, e incluso consideran útil la convergencia entre los Estados en algunos terrenos, todos son renuentes a la creación de una unidad unánime política bajo el nombre de la Unión Europea pues defienden que debe mantenerse la soberanía e independencia nacional de los gobiernos.
 
 
Por supuesto, la formación de nuevos partidos de extrema derecha en Europa ha hecho que no se mantengan las mismas razones y motivos.  Algunas de las más importantes raíces de la creación de nuevos partidos radicales son: la extensión de la globalización económica, la inmigración, el desempleo creciente, la extensión multicultural y la amenaza de la identidad cultural, la reducción de las medidas de bienestar, la extensión del terrorismo, delitos y crímenes  que, según su opinión, principalmente tienen sus orígenes en la presencia de inmigrantes y refugiados.
 
 
Una de las causas más importantes que influyen en el aumento del apoyo a la extrema derecha, reside en la insatisfacción de los partidos tradicionales y de centroderecha, así como en la desconfianza en las instituciones oficiales de los países europeos.  De hecho, una parte de los votos de los partidos de extrema derecha proviene de los que antes iban para los partidos de izquierda y de centroderecha. A pesar de esto, la democracia es una forma de gobierno aceptada por la mayoría de la gente en Europa, aunque muchos ciudadanos no están satisfechos con la actuación de su gobierno.
 
 
Los partidos de extrema derecha, en un ámbito donde los votantes simpatizantes de los partidos tradicionales de izquierda y centroderecha no han logrado satisfacer su posición, utilizan esta oportunidad y se presentan como la única alternativa para cambiar la situación existente.
 
 
Uno de los motivos principales que se plantean para la inclinación a los partidos de extrema derecha son los problemas económicos y desempleos. Los partidos de extrema derecha consideran que la raíz de estos problemas se encuentra en la globalización y el flujo de inmigrantes. Sin embargo, algunos expertos en asuntos de Europa creen que los problemas económicos o de desempleo no son el motivo de la tendencia a seguir los partidos de extrema derecha. No hay  relación seria entre la extensión de la extrema derecha y el estallido de la crisis económica, porque los partidos de extrema derecha existentes aparecieron en las décadas de los 80 y 90, períodos anteriores a  la crisis económica. Por ejemplo, la aparición de los partidos de extrema derecha en Austria, Suiza, Suecia y Noruega, considerando la situación económica de estos países, no puedan tener relación con la crisis económica. Estos países figuran en la lista de los países ricos del mundo y sus ciudadanos se benefician de un ingreso y bienestar elevados.
De hecho, los partidos de extrema derecha, aunque tienen motivos y razones comunes respecto a su formación, de todas formas, en cada país europeo, algunos motivos propios, han tenido un papel destacado y eficaz en la formación de estos partidos y su inclinación. Muchos expertos sobre asuntos de  Europa creen que el éxito de los partidos de extrema derecha durante los últimos años más que los  asuntos económicos son los asuntos culturales y de identidad y el caso de inmigración.
 
 
Los partidos de derecha en Europa, después de abandonar sus políticas antijudías de la última década, en particular, han adoptado políticas antiinmigrantes, especialmente contra los musulmanes. La nueva generación de estos partidos apareció después del suceso del 11 de septiembre y sus miembros son los que habían abandonado los partidos de centroderecha. Los partidos de extrema derecha han podido debilitar muchas posiciones de los partidos de izquierda en Europa. Los líderes de estos partidos radicales, para lograr legitimidad política, se muestran como reclamadores de los valores nacionales contra el auge del Islam. Por ejemplo el partido italiano Liga del Norte, mientras defiende restringir la construcción de mezquitas musulmanas, plantea argumentos relacionados con la seguridad nacional; el  grupo belga Vlaams Block utiliza también  razones de seguridad para protestar contra la concesión de ayuda financiera estatal a los musulmanes; el partido francés Frente Nacional aboga por el fin la comunidad islámica de Francia. Según la líder de este partido de ultraderecha galo, hay 6 millones de ciudadanos musulmanes que durante los últimos años han entrado en Francia y advierte de que si estos musulmanes, a pesar de su ciudadanía francesa, tienen un sentido de afiliación a otra entidad, serán muy peligrosos. 
 
 
En un estudio sobre la situación que enfrentan los musulmanes en ocho países europeos, se ven diferentes ejemplos de enfoques antimusulmanes entre los ciudadanos de estos Estados: la mayoría de la gente en cree que los musulmanes tienen muchas peticiones y esto es lo que causa inestabilidad. También hay evidencias de preocupación por la minoría musulmana en estos países, de hecho, por lo menos el 40 por ciento de los encuestados en Gran Bretaña, Alemania, Italia y los Países Bajos cree que el número de musulmanes en sus territorios es demasiado. El aumento de esta tendencia ha dado lugar a partidos de extrema derecha desde partidos tradicionales que adoptan duras posturas ante los inmigrantes y musulmanes. En muchos casos, buscan crear políticas de inmigración más estrictas, especialmente para los inmigrantes de países musulmanes. La propaganda de extrema derecha contra los inmigrantes y los grupos musulmanes, busca legitimar la violencia contra estos colectivos y causar un cambio  en la composición de los simpatizantes, así como aumentar la tendencia de las personas educadas y los responsables de los países europeos a estos partidos.
 
 
En el pasado, los cristianos de las regiones y aldeas pobres constituían las más importantes bases de los partido de extrema derecha, pero hoy las clases sociales educadas forman los más importantes miembros de los partidarios de extrema derecha. Las investigaciones realizadas muestran que entre el 38 y el 50 por ciento de los votantes de los partidos de extrema derecha en Dinamarca, Francia, Suiza y Austria  está formado por ejecutivos o propietarios de empresas privadas.  Estos partidos, además de haber tenido cierto éxito en las elecciones parlamentarias, en otras aspectos también están aumentando su poder. Estos partidos influyen en las políticas e imponen sus demandas y cambian la    mentalidad social. A pesar de las diferencias entre los partidos de extrema derecha en Europa, todos tratan de cambiar las políticas de su país en áreas como la inmigración, la religión y la cultura nacional. La toma de poder de estos partidos significa la propagación del racismo, la discriminación racial y la desintegración de la tolerancia y la interacción en las sociedades europeas.
 
 
 

En  el próximo programa estudiaremos la situación de algunos de los más importantes partidos de extrema derecha en los países europeos.