Pars Today

ParsToday-En los 19 programas transmitidos hasta ahora, nos hemos dedicado en reiteradas ocasiones a la hostilidad de los EE.UU respecto a los izquierdistas de Sudamérica.

En el programa de hoy revisaremos el panorama del declive  de los gobiernos izquierdistas en América Latina y concretamente, el caso de Venezuela.

Desde finales de 2015, cuando las fuerzas de la derecha y las fuerzas opositoras al gobierno izquierdista venezolano se hicieron más poderosas, el país se convirtió en escenario de incesantes protestas y disturbios. La inadecuada condición económica, la fuerte caída del precio del crudo y las continuas sanciones de Estados Unidos en los últimos años ha agravado la crisis interna y la expansión de la insatisfacción en Venezuela. En las elecciones parlamentarias de 2015, la coalición de izquierda venezolana, titulada "El Polo Patriótico", que fue fundada por el difunto presidente venezolano, Hugo Chávez, perdió su mayoría parlamentaria por primera vez en una década, y se convirtió en el partido de la minoría.

Tras la caída del precio de petróleo a 24 dólares el barril, se anunció estado de emergencia en Venezuela. Mientras que más del 96 por ciento del presupuesto nacional de este país depende de los ingresos petroleros. El aumento de las autoridades de Maduro y su gobierno fue rechazado por los diputados de los partidos rivales.  

El Parlamento de Venezuela, dirigido por los opositores de Maduro, con su voto evitó el aumento de las autoridades de Maduro. El presidente siempre ha acusado a sus rivales de ser unos fascistas e insiste en que los miembros de la oposición se esfuerzan por actuar según las directrices del gobierno de EE.UU y actuar contra su Gobierno a través de los medios de comunicación opositores.

En reacción al voto del Parlamento de limitar el poder del presidente y el gobierno, maduro afirmó que el Legislativo  pretende limitarlo a él y a su gobiernos para que no puedan adoptar medidas constructivas para Venezuela. Según Maduro, los derechistas, a través de actuaciones violentas y aprovechándose del apoyo mediático internacional y el partido derechista mundial pretenden llegar de nuevo al poder en Venezuela.

Debido a las amenazas contra ese país, el ministro venezolano de Defensa solicitó al pueblo adherirse a los ejercicios militares bajo el título de la independencia 2016. Maduro cree que las amenazas no tienen ningún objetivo, solo la eliminación de la Revolución Bolivariana y las uniones estratégicas.

Paralelamente con el aumento de las tensiones en Venezuela, Henrique Capriles, el líder de la oposición de ese país, ha solicitado claramente al ejército venezolano para que decida si permanecerá en el frente de Maduro o no. Los opositores alegan no estar en busca de un golpe de estado militar en el país, pero pretenden sacar al Maduro del poder a través de la celebración de un referéndum.

Las insatisfacciones en Venezuela se derivaban de  la estrategia a largo plazo de los derechistas y la fuerte existencia del dólar estadounidense en ese país. Los derechistas, con el avance de sus políticas anti-revolucionarios han provocado problemas como la inflación, la escasez de energía y la inseguridad ciudadanía.

Una breve mirada a los problemas económicos de Venezuela puede demostrar por qué la gente de este país está dando la espalda al izquierdismo. La reducción del precio mundial de petróleo ha tenido efectos devastadores sobre la economía de Venezuela, ya que el petróleo es la principal fuente de ingresos del gobierno venezolano. La excesiva dependencia al petróleo ha hecho que el gobierno de Nicolás Maduro no pueda cumplir con sus promesas económicas en el momento de la caída del precio del petróleo.

A estos factores, hay que agregar también  las sanciones de Estados Unidos contra Venezuela, la alta inflación y la recesión económica en el país, que por su parte provocaron la inestabilidad, el aumento de los crímenes y la delincuencia, así como el aumento de la inseguridad en diversas ciudades. Hugo Chávez, durante los 14 años de su gobernación, creó una única combinación de las políticas populistas e izquierdistas en el ámbito económico. Su postura agresiva contra sus opositores en el ámbito interno y sus duros ataques contra los Estados Unidos consiguieron atraer el apoyo de amplias masas populares.

Los opositores del gobierno de Venezuela, con la cooperación y el apoyo de los Estados Unidos y el Occidente, establecieron varios escenarios para derrocar a este gobierno o reducir su legitimidad. Entre estos escenarios, figuraban la presión política, la guerra económica y la inseguridad dentro del país por los opositores y sus partidarios. El resultado de estos escenarios ha sido el aumento de la inflación a 75 %, la fuerte caída del valor de la moneda nacional, la bancarrota de muchas compañías nacionales y extranjeras y la fuga de capitales del país, la reducción de las reservas de divisa y el aumento de la inseguridad en Venezuela.

Según los analistas,  es probable que ocurran tres escenarios en Venezuela. El primer escenario es el levantamiento general. El segundo un golpe militar. La presión del poder central para evitar la formación de las disputas sociales sería el tercer escenario. En los últimos dos años, Venezuela ha experimentado una tasa de inflación sin precedentes en el mundo. A finales del año 2015, la inflamación llegó a 180 por ciento.

El Fondo Monetario Internacional (FMI), tiene una diferente mirada respecto a este tema. Según los líderes de este fondo, el gobierno socialista de Hugo Chávez dedicó de forma excesiva los recursos de Venezuela a apoyar a los pobres. Desde 2005, Venezuela ya no tenía esos recursos disponibles para continuar con esta política. El petróleo crudo de Venezuela es muy pesado y debe mezclarse o refinarse para su venta en el mercado, y estos dos procesos requieren grandes inversiones. La falta de capital necesario ha provocado que la producción de petróleo de Venezuela disminuya diariamente.

Una de las características del socialismo del siglo XXI y de todos los programas revolucionarios bolivarianos fue su enfoque en la personalidad de Chávez. La personalidad fundamental es un fenómeno común en la región de América Latina. No hay mucha gente que pueda continuar la línea de pensamiento de Chávez. El peso político y social de Nicolás Maduro, quien solamente repetía las palabras del difunto presidente, no tuvo éxito en atraer tanto apoyo popular como Chávez. Entonces, el futuro de Venezuela depende de muchos elementos. La actitud de Maduro respecto a la política interior y exterior y el grado de su compromiso con el mecanismo democrático venezolano figura entre estos casos. Con la muerte de Chávez, el futuro de Venezuela se basa ahora en la actuación de Nicolás Maduro, que está bajo la influencia de los medios occidentales y las protestas de la oposición del gobierno.

El fracaso del Movimiento Bolivariano en las elecciones parlamentarias de 2015 creó serios desafíos para el gobierno de Maduro. Los derechistas, que ya son la mayoría del parlamento, impiden la aprobación de los planes del gobierno. Además, teniendo en cuenta que los opositores del gobierno venezolano están más presentes en el sector privado, se puede decir que a largo plazo no solo no se resolverán los problemas de la clase media, sino que la clase media puede volver a su estado anterior de pobreza.

Dada la proximidad de la actitud de los opositores  a las políticas estadounidenses y, hasta cierto punto, su dependencia a Washington, se puede decir que la política exterior venezolana enfrentará serios cambios si la oposición gana las elecciones presidenciales de 2019. A nivel regional, es probable que cambien los acuerdos entre Venezuela con otros países de nueva izquierda. Se cancelará además el envío diario de ochenta mil barriles de petróleo venezolano a Cuba en vez de recibir servicios médicos y educativos.

 Los enfoques bolivarianos e izquierdistas en las uniones regionales latinoamericanos como Mercosur y Alba también se verán debilitados. A nivel internacional, el declive de los izquierdistas en Venezuela afecta también las relaciones de Caracas con los Estados independientes de los EE.UU o sus opositores, como China y Rusia. La relación de Venezuela con Irán y el eje de resistencia en Oriente Medio también serán afectada por nuevos avatares. En particular, porque el movimiento bolivariano fue uno de los principales defensores de la resistencia palestina. Por el contrario, es probable que se mejoren las relaciones de Venezuela con el Occidente.

Por supuesto, no se puede considerar el fracaso del partido gobernante en las elecciones parlamentarias de 2015 en Venezuela como el fin del izquierdismo y el socialismo en esta región. Los tres componentes de la nueva izquierda, a saber, justicia, idealismo y anticolonialismo, aún tienen sus partidarios en América Latina, y cada vez que las políticas neoliberales logren resolver los problemas de estos países, el socialismo volverá rápidamente, debido a su mayor similitud con las demandas de la gente de esta región.

Las pruebas demuestran que si la oposición en Venezuela quiere volver completamente a la era previa a Chávez, entonces su poder durará menos de una década, y esta vez, las tendencias centradas en la justicia surgirán con un mayor poder. Durante los 14 años de poder de los gobiernos izquierdistas de Lula Da Silva y Rousseff en Brasil, según todas las fuentes fidedignas estadísticas  nacionales e internacionales, el nivel de la pobreza disminuyó mientras que promovieron los programas de bienestar social de una gran parte de la sociedad brasileña. Este libro de trabajo deseable dejará un buen recuerdo del desempeño de la izquierda y la eficiencia de las ideas económicas y políticas del proceso político de izquierda en la mente de los pueblos de América Latina.